➳Tell me. |Why Don't We|.

➳ Final: "Y esto es para una gran chica"

Tiempo después (...)

Jack

¡Joder! El tiempo ha pasado como tortuga, pero la espera ha valido la pena. 

El escenario al aire libre está casi listo. Zach se encarga de la iluminación mientras que Daniel camina de un lado a otro, más nervioso que cualquiera.

Bueno, yo también estaría hecho un manojo de nervios si fuera el director del comité estudiantil, pero más que nada estaba esperando... Todos estábamos ansiosos. 

Iba a meter mis uñas en mi boca para mordisquearlas, pero no. Me contuve y me reprendí mentalmente. 

Había mucha gente intrusa, pero eso era lo que menos importaba. Veía a muchas chicas con su pareja y éstas llevaban una rosa en su mano.

Mhmhm, ¿Qué significa eso?

—¿Has olvidado que el baile era en parejas? — pregunta a mis espaldas Daniel. ¡Ay maldita sea!

¡SÍ! ¡LO HABÍA OLVIDADO! 

Daniel niega con una mala cara. Bufo porque sé que él tampoco ha conseguido una pareja. 

Bah, no me interesaba llevar una chica al baile. Mis hermanas estaban aquí por invitación de Daniel, así que necesitaba asegurarme de que nadie se les eche encima.

Además, yo quería bailar una pieza con Madeline. Y ahora que me acuerdo, no veo a Jonah ni a Corbyn. 

¿Será que? ¿Acaso sí se ha puesto en marcha el plan?

Saco mi celular del bolsillo de mi pantalón. Marco al número de Corbyn pero éste me envía al buzón de mensajes. Algo fastidiado, lo intento con Jonah y pasa que está ocupado.

Ush, maldita sea.

— No te alarmes, ya va a empezar el programa, mejor acompáñame con Zach — Daniel nuevamente me interrumpe. Éste sabe algo y me lo va a contar.

Lo miro todo sospechoso, pero él se da media vuelta y camina hacia la tarima. Mi enojo aumenta pero se me ocurre la idea de mandarle un mensaje a Jonah.

Sigo los pasos de Zach a regañadientes. Veo que él tampoco está de buenas. Cuando me fijo, en el bolsillo trasero de Zach cuelga una cinta.

Sí, era esa para su pareja de baile. 

¿Qué estará planeando?

Corbyn

El avión había aterrizado. Solo era cuestión de minutos para que la cabellera anaranjada apareciera.

Caminé con prisa entre la multitud. Observaba a cada persona, pero ninguna era ella.

De repente alguien tocó mi hombro. Giré un poco nervioso para encontrarme con Madeline.

— ¿A quién buscas, eh?— preguntó con una sonrisa en el rostro. La abracé como pude. Ella, en cambio, se dedicó a desordenar mi cabello. Suspiro. Sí que había sido infalible el plan elaborado.

— Ahora vamos, que ya estamos retrasados — dice antes de que jale mis manos. Le quito suavemente la maleta que arrastra para llevarla yo. Nos dirigimos al auto de Gabe. 

Conduzco respetando el límite de velocidad. Madeline va hablando sobre cómo fue su baile. Ya nos estábamos acercando al instituto.