Miedo, oscuridad, amor, entrega, confianza, deseo, alegría, decepción, añoranza, perdón, cariño y respeto. De todo eso y mucho más están llenas las relaciones, un día podemos sentirnos en la cima y al siguiente podemos sentirnos en un pozo profundo al que no le encontramos salida. Así también ha sido la de nosotros, como una extraordinaria montaña rusa.
Lo mejor de todo, es que siempre estas dispuesto a dejar tu orgullo de lado con tal de poder arreglar los malos entendidos.
Sin duda alguna, estoy muy agradecida de poder contar con un joven tan maravilloso como tú, Gus. Has llenado muchos vacíos que habitaban en mi, y a tu lado he aprendido a sanar las heridas que la vida había marcado. Gracias por siempre tomarme de la mano, y en tiempos de tormentas y turbulencias has sabido hacerme sonreír
Te quiere, Natalia
Para: Mi GusPd: Aún sigues siendo mi joven del café
12-11-2010
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Cartas al joven del café
RomanceElla nunca se cansó de escribir, ella nunca se cansó de amar. Quien diría que algo efímero podría convertirse en algo duradero, apasionado, arrebatado.