Cartas al joven del café

Carta 25

Creí que había experimentado todos los tipos de dolores existentes , y acabo de descubrir que no es así. No hay uno peor que el de la desilusión y a la decepción . Pensar que todo se fue a la borda por un simple mal entendido, y lo peor, pensar que en algún momento sembraste confianza y esas hermosas raíces crecían con el pasar del tiempo, pero todo acaba en el momento en que te das cuenta que no fueron precisamente frutos buenos los que recibiste de aquella cosecha, peor aún, no conseguiste una cosecha porque la maleza destruyó tu jardín.

Sigo sin comprender como es que te dejaste llevar por lo que otros pudieron decir, creyendo mas en sus palabras que en todos estos meses juntos. Pero lamento decirte algo, Gustavo, me costó demasiado enamorarme de mí primero, me costó demasiado sembrar confianza en mí misma. Aprendí a no mendigar amor, estuve dispuesta a amarte y entregar lo mejor de mi, a darte un voto de confianza aun sabiendo que tus dudas a cerca de ti mismo podrían volver, pero tú en cambio no me diste mi voto de confianza, ese que estoy segura merezco.

Te quiero demasiado, y traté de explicarte todo, pero fue decepcionante saber que tú no me creyeras y decidieras dejarlo todo. Lo repito, te quiero demasiado, como nunca antes había querido, pero me quiero mucho más a mi, y ese amor que me tengo, no fue fácil de construir, primero tuve que pasar por caminos de complejos, odio, ansiedad, y ahora que conseguí quererme, no pienso dejarlo, no por algo o alguien que no me valora . Espero que cuando abras los ojos no sea demasiado tarde y el karma no te apuñale como a mi me lo hizo tiempo atrás.

Te quiere, Natalia
Para: Gustavo...

24-07-2011