- ¡Justin, Justin! ¿Estas aquí? – Comencé a decir en voz alta, nadie respondía. Fui hacia la cocina.-¡Justin, responde! – Grite de nuevo. – Demonios, ¿dónde estas? – Tome mi cabeza, no puede habérselo llevado, no así, no tan fácil! Fui arriba. - ¡JUSTIN, JUSTIN! – Empezaba a desesperarme cada vez más, no pude haber dejado que esto sucediera! Nadie estaba arriba, volví a bajar. - ¡Justin responde! – Nada, había completo silencio….no estaba aquí, se lo había llevado! Esa asesina se lo había llevado! –
Me senté en la escalera, lágrimas de apoco comenzaron a salir…tenía que encontrarlo.
- ¿Clara? – Sentí que una voz cerca mio había pronunciado mi nombre.
Levante mi rostro para ver quien me hablaba y ahí lo vi, ahí estaba…lo más tranquilo, normal y yo desesperada por no poder encontrarlo. No lo pensé ni dos segundos, me tire sobre el dándole un fuerte abrazo…como si no lo viera hace años. El me correspondió y me abrazo igual de fuerte que yo a él.
- ¿Qué sucede Clara? ¿Por qué lloras? – Dijo Justin preocupado, yo no conteste solo quería disfrutar de ese hermoso abrazo y de que él estaba aquí, conmigo. – Clara, me estas asustando! ¿Que sucede? – Rompió el abrazo para poder verme a los ojos. – Estas sangrando… -Dijo y su rostro se tenso. Pase mi dedo índice por el lugar en donde Claire me había pegado una patada, sangraba y mucho.- ¿Qué rayos sucedió Clara? – Dijo asustado. – Debemos ir al hospital. – Se dio vuelta para ir a buscar las llaves del auto pero yo se lo impedí.
- No, no, déjalo Justin estoy bien. – Intente calmarlo, estuve mucho peor otras veces.
- ¿Qué estas bien? Mírate!
- ¡Cálmate! Estoy bien, créeme. – Respiro un poco intentando calmarse.
- Ven, siéntate aquí y espérame….ya traigo el botiquín para emergencias. – Subió a los saltos la escalera para ir a buscar el botiquín, ¿acaso estaba verdaderamente preocupado por mi?Que linda tarde comencé: unos buenos golpes recibidos, un buen susto con Justin.
¿qué más pasará?Respire profundo, intentando calmarme por todo lo sucedido y pensar en frío. Quise tomar mi celular pero recordé que lo había dejado en el auto. Toque nuevamente mi herida y seguía sangrando. Justin vino luego de unos minutos.
- Mientras te curo, vas a contarme TODO lo que sucedió…entendido? – Estaba sentada en el sillón del living, él se sentó frente a mi en una mesita que había allí.
Abrió el botiquín saco un par de gasas, agua oxigenada para limpiar la herida y una curita para poder ponérmela al finalizar y que la herida sane. Tomo una de las gasas y a la vez tomo la pequeña botella de agua oxigenada, vertió un poco del liquido oxigenado sobre el suave pedazo de tela. Lo tomo con firmeza y lentamente lo acerco al lugar en el cual Claire me había pegado; comenzó suavemente a pasarlo por la herida.
- Ahora, quiero escucharte. – Lo miré, tendría que volverle a mentir. Suspiré.
- No sucedió nada, solo me caí en la calle. – Mire el suelo, no podía soportar que esos hermosos ojos color miel brillantes me miraran con preocupación.
- Eso no es una caída, te lo puedo asegurar. Por favor, dime…estoy demasiado preocupado. – Se detuvo por unos segundos y acaricio mi mejilla.
- ¿En serio estas preocupado por mi? – Continuaba acariciándomela mejilla, suave y dulcemente con una mirada más que tierna.
- ¿Acaso crees que no me preocupo? – Baje mi mirada mientras Justin la buscaba. – Mira, antes…no me gustabas para nada, solo te importaba mi fama. Eras grosera con mis hermanos, mi familia y conmigo, solo te aprovechabas y ni siquiera agradecías. Ahora vi que cambiaste y además me comentaste el verdadero motivo de todo…eso. – Sabía que lo que iba a hacer estaría mal pero iba a disfrutar del chico que amo aunque sea este poco tiempo.
