Capitulo 8

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Entonces te digo que estaba precioso...no había visto un vestido tan sofisticado como ese en mi vida...era realmente...bla bla bla...

Mi mente bloqueó por unos segundos las voces. Estaba tratando de concentrarme pero aquella conversación me parecía tan estúpida... y mi cabeza estaba tan llena de información que yo solo miraba el reloj una y otra vez. Quizás era una completa falta de educación, y lo sabía, pero de verdad estaba bastante ofuscado esa noche. Supongo que mi cara lo reflejaba porque sentí que Elena me daba un codazo.

Giré la vista y ella se acercó para susurrarme.

-¿Se puede saber que te pasa?, ¿Por qué tienes esa cara de alegría?.-Dijo irónica. Yo apreté la mandíbula y bebí un poco del vino que nos habían servido esa noche.

Estábamos en Madrid celebrando en una cena el cumpleaños de la abuela de Elena, pero ese día yo no había estado del mejor humor, cosa que también nos había hecho discutir antes de llegar al restaurant. Pero como todas nuestras peleas, pensé que esta quedaría también en el olvido...sin embargo me había estado atormentando toda la noche porque a Elena se le había ocurrido mencionar a Laura...

Resoplé y dejé la copa de nuevo sobre la mesa.

-No me pasa nada, lo siento.-Le respondí en un susurro.

La gente parecía no advertir la tensión entre nosotros. En realidad eso lo sabíamos disimular a la perfección, la pareja perfecta, como decía Elena. Pero de perfecta no teníamos casi nada, o bueno...quizás el hecho de que...a veces nos otorgábamos cierta libertad. La miré de nuevo y vi que sus ojos me miraban entrecerrados.

-¿Es por que discutimos?, no es la primera vez que pasa...

-No es por eso.-Dije un poco frustrado. En realidad la única y verdadera razón por la que mi humor se portaba de esa forma tenía nombre y apellido, y no era precisamente Elena Tablada. El problema era que me jodía pensar en ella, me jodía no poder sacarme de la cabeza lo que había pasado varias semanas atrás. Era como si el tiempo se hubiese regresado...hacer a Laura mía una vez mas fue simplemente...

-¿Entonces?.-Me dijo suavizando el tono y tomándome la mano que reposaba sobre mi pierna.

-No pasa nada, nena...solo...estoy cansado supongo.-Hice el esfuerzo de mi vida por sonreír a medias y ella se acercó acurrucándose en mi cuello.

Esto no podía pasar. Me dije con malhumor cuando mi mente deseó que quien estuviera en mis brazos en ese momento fuese Laura...me puse rígido y ella lo notó porque se separó de mi mirándome a los ojos.

-¿David?.

-Voy al baño ¿vale?.-Me disculpé con todos los que estaban en la mesa y me dirigí hasta el baño.

Miré mi reflejo en el espejo, la verdad que mi cara parecía todo un poema, pero un poema de horror. Me sonreí a mi mismo y me eché un poco de agua en la cara sintiendo como que me calmaba un poco. En realidad ni yo mismo me entendía, aquello era una tontería...es decir, vale, era normal que pensara en lo que había pasado con Laura...tampoco era algo que pasara todos los días...ojala...¿ojala?, solté una carcajada, como decía...era normal que pensara en eso, pero...¿Por qué era que me ponía tan mal?. No debería importarme. Laura ya no me importaba...o al menos eso creía yo.

Me atusé un poco los rizos y me encaminé de nuevo a la tortura Tablada. Sonreí por aquel pensamiento. Me gustaba estar con la familia de Elena...bueno a veces, pero esa noche lo único que quería era irme de ese lugar. Mientras salía del baño mi móvil sonó. No reconocí el número...pero era una llamada internacional al parecer...

-¿Si?.-Escuché la señal un poco interferida.-¿Hola?.-No podía escuchar nada.-¿Hola?, no escucho muy bien ¿Quién habla?.

-David...-Y eso fue lo último que escuché antes de que se cortara la llamada, la voz de Laura, tan dulce como siempre...

Miré el móvil anonadado y mi corazón se aceleró. Madre mía era Laura... levanté la vista y Elena levantó la mano llamándome. Yo que estaba petrificado le sonreí y mis pies se movieron por inercia...solo podía pensar...en que Laura me había llamado.

¿Laura?

¿Por qué me llamaba Laura?

Como yo ningún amor se entregara Donde viven las historias. Descúbrelo ahora