Como yo ningún amor se entregara

Capitulo 10

Mis dedos golpeaban una y otra vez la sabana que cubría la cama. Ni siquiera sabía porque estaba nervioso. En realidad nervioso no sería la palabra, estaba un poco inquieto. Si. Había pasado una semana desde aquella misteriosa llamada de Laura y yo no había tenido el valor de llamarla. No era que me diera miedo hablar con ella, porque era Laura...Laurita...¿pero que iba a decirle?: "Hola, Laura ¿Qué tal?, ¿para que me llamabas?, ah por cierto no he podido dejar de pensar en lo que pasó entre nosotros la otra noche...seguro que tú también piensas en mi todos los días...".

Vaya mierda.

Me dije con malhumor levantándome de la enorme cama del hotel. Ahora todo me parecía tan grande y vacio. Luego de probar lo que era tener a Laura en mis brazos de nuevo...ya nada me llenaba. Suspiré y tomé la ropa para darme una ducha. Estos días Elena estaba en Ibiza con su familia y yo me había quedado en España pues tenía varios compromisos, luego iría a Bélgica y a Francia para dar un par de conciertos...si, eso era lo único que me permitía sonreír a estas alturas de mi vida. Mi música, mi profesión...era lo único que de verdad adoraba. Caminé hacia el baño pero recordé que José, me había dicho que revisara el correo ese día.

Caminé hasta sacar mi maletín del closet y cogí mi portátil. Revisé el correo rápidamente, algunas cosas relevantes y otras no. Iba a cerrar todo cuando de repente una vocecilla me dijo que abriera aquel correo que hacía ya poco más de cuatro años no abría.

Solo solía usarlo para hablar con Laura cuando no teníamos tiempo de llamarnos...nos escribíamos para recordarnos cuantos nos amábamos...leí un par de mensajes bastante antiguos y una sonrisa leve iluminó mi rostro, las palabras de Laura siempre me daban fuerza...pero ahora ya no las tenía.

Abrí muchísimos los ojos cuando vi que tenía un nuevo correo...y correspondía exactamente con la fecha de ese mismo día...y además hacía solo unos minutos que lo había enviado.

De: Laurabisbal@hotmail.com

Para: Bisbicorradini@hotmail.com

Asunto: (Ninguno)

Fecha: Martes, 26 de Mayo 2009 09:34:56 pm

Estoy segura que me arrepentiré el resto de mi vida por esto, pero ya que me tomé la molestia de cabrearme con el internet porque no me iba como cosa rara, y entrar a este correo que hace años que no abro, y sé que tú tampoco...pues me expresaré todo lo que quiera. Al final supongo que nunca leerás esto, y yo supongo que nunca tendré el valor de decirte esto si te tengo en frente.

Años atrás, cuando tú y yo vivíamos nuestro cuento, ¿te acuerdas, David?. Tú eras mi príncipe y yo era tu princesa. En esos años no pude ser mas feliz, juro que a tu lado viví momentos que mi memoria se niega a olvidar. Quizás porque tengo la memoria mas masoca del mundo...o quizás porque a pesar de todo, tienen razón los que dicen que tú y yo estamos predestinado. Y si, suena cursi incluso para mí. ¿Pero entonces por que luego de tantos años seguimos sintiendo esto?, y sé que no hablo solo por mi. Lo que pasó aquí, en Miami, es una prueba de que algo pasa...y aunque nunca lo vaya a aceptar teniéndote cara a cara, fue más que sexo, fue la unión de nuestras almas una vez más.

No quiero que te confundas con este email. No te estoy pidiendo nada, no te estoy reprochando nada, incluso ni siquiera espero que me contestes. Pero tenía la necesidad de hacerte un par de preguntas (insisto, no tienes que responderme si no te sale de los cojones):

1) ¿Por qué mierda me dejaste tirada si aún me amabas?.

2) ¿Por qué no intentaste explicármelo?

3) ¿Por qué tuviste que arruinar nuestro cuento?

4) ¿Por qué aún sigues usando esos calzoncillos cutres?

Vale la de los calzoncillos era solo por picarte =P.

David, realmente quiero saber que pasó. Que nos pasó. Siento una horrible necesidad de saberlo. Quiero saber si de verdad me dejaste tirada por otra o...si alguna vez me quisiste. Se que esto no cambiará las cosas pero...solo necesito saber que pasó.

Si no recibo ninguna respuesta de tu parte, lo entenderé. Tan solo lo interpretaré como que nunca leíste este mail.

PD: Si estás por Miami o algo llámame.

Cuídate.

Laura.

Mi mente seguía procesando aquellas palabras. ¿Pero que era esto?, ¿Cómo Laura se había enterado de estas cosas?, ¿y por que justo ahora buscaba una explicación que ella misma no quiso escuchar años atrás?, la verdad es que cada vez la entendía menos.

Mi mano temblaba pues sabía que probablemente aún estuviera en el ordenador...esperando una respuesta que ella misma creía que nunca llegaría. Quizás era mejor dejarlo así. Tener que explicarle todo a Laura me daba vergüenza y a decir verdad me asustaba bastante. No por su reacción, ni por lo que pudiera pensar...sino porque entonces yo tendría que aceptar lo mucho que la había cagado, lo mucho que había arruinado mi vida...y la suya. Pero antes de darme cuenta el mouse se movió clicando en "Responder".

*****

Me di cuenta que parecía una estúpida actualizando una y otra vez la página. Él no respondería, simplemente nunca leería el email, o si lo leía seguramente pensaba que tenía cosas mas importantes que hacer que responderle a una ex histérica a la que dejó por otra. Recordé entonces que esa había sido justo la razón por la que le escribí aquel email, quería saber que había sucedido. No suelo hacerle la pelota a nadie, y con David no seria la excepción, pero al menos lo intenté.

Me levanté del escritorio y fui a por un poco de café a la cocina. Estaba yo sola de nuevo, David se había ido el fin de semana a España y yo la verdad es que le agradecía que me diera un poco de espacio. Sobretodo con lo que estaba pasando por mi cabeza esos últimos días. Tomé un cigarrillo. Tenía que darme el crédito de que ahora fumaba tan solo unos dos, incluso uno al día.

Caminé de nuevo hasta el escritorio y me senté dándole una calada al cigarrillo. A la mierda con David, y a la mierda con mis estúpidos pensamientos. Cerraría todo y este mail quedaría en el olvido. Pero antes de hacerlo, actualicé casi por inercia. Y ahí estaba. Un reluciente y amarillo, nuevo mensaje.

De: Bisbicorradini@hotmail.com

Para: Laurabisbal@hotmail.com

Asunto: RE: (Ninguno)

Fecha: Martes, 26 de Mayo 2009 03:50:12 pm

Me has dejado flipando de colores, Laura. De verdad que si.

No me esperaba encontrar esto, y supongo que tú en el fondo no te esperabas que yo te respondiera. Pero quizás tengas razón, quizás estemos tan predestinados que algo me hizo revisar justamente este correo hoy. Y aunque si, es verdad, suena cursi, yo también creo que pasa algo. Algo que ni yo mismo puedo explicar, y mucho menos en un correo electrónico. Por eso responderé tus preguntas, pero no aquí y no ahora.

Puedo tomar un vuelo mañana temprano y estar allá con el tiempo suficiente para que charlemos. Aunque aún no entiendo por que ahora, ¿Por qué me pides explicaciones que yo quise darte y tú te negaste a escuchar?. La verdad es que no sé si ahora quiera dártelas, pero lo haré, lo haré porque tú siempre serás mi princesa, chiquilla.

Te llamaré cuando esté allá.

Tú también cuídate.

David.

Yo casi me caigo de la silla al leer aquello. ¿No era acaso esto lo que estaba esperando?, si lo era, pero la verdad es que David tenia razón, una parte de mi esperaba que no me respondiera y yo pudiera seguir pensando lo despreciable que era.

Pero me respondió, y estaba dispuesto a darme las explicaciones que buscaba.