¿CELOS?

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*Serena*

—Hace ya varias semanas que no sé nada de Darien y las pocas veces que lo he visto no hemos pasado de un simple saludo, después de lo que pasó en su auto hasta yo misma estoy poniendo en duda esta locura de conquistarlo, es más que obvio que no quiere nada conmigo, tal vez yo no le gusto o algo así, pero aquel beso me confundió de sobremanera, debe estar loco me pide que me aleje pero me lleva en su auto, me pide que me aleje, pero me besa—bufo de frustración—él está loco y me quiere llevar a la locura junto a él— el sonido de la campanilla de la puerta de entrada me detrae levanto la mirada, veo a Seiya con una enorme sonrisa en su rostro, nos hemos hecho muy buenos amigos en este corto tiempo pero con el todo es fácil, hablar, reír todo, viene todos los días por mí al trabajo es un hombre muy bueno atento y caballeroso aunque a Doro no le cae muy bien ha hecho de todo para que se aleje.

—Hola Sere—me saluda Seiya con una gran sonrisa, yo correspondo igual.

—Hola Seiya—se acerca y deja un beso en mi mejilla "mmm huele muy bien".

— ¿Estás por salir?

—Sí, dame un minuto organizo estas facturas y podremos irnos—el asiente.

—Hola cachorro—se acerca al corral donde esta doro con los demás cachorros y acaricia su cabeza—espero que esta vez no tengas planeada ninguna maldad para mí, no sé si pueda aguantar más— dice mientras sonreímos juntos, el saca a doro y le coloca su correa , una sonrisa más amplia se planta en mi rostro al recordar las cosas por las que doro ha hecho pasar a Seiya, hace unos días lo enredó con la correa haciendo que cayera en un charco de barro, como si eso no fuera suficiente, hace unos días cruzábamos los tres la calle y en un semáforo una chica se inclinó a recoger algo, doro tocó su pompis con su trompa la chica se levantó y antes de que pudiésemos explicar algo, plantó una tremenda cachetada en el rostro de Seiya ese día me deshice en disculpas hacia él, luego otro día embarro su camisa de lodo al posar sus patas sobre él, hizo que aplastara popo con sus zapatos italianos de 2000 dólares, estaba rojo del coraje aun así no dijo nada y así podría hacer una lista de las maldades de "mi lindo cachorrito".

—Estoy segura de que no lo hace a propósito—respondo a mi amigo, detrás de mi Mina rompe en una sonora carcajada.

—Serena ese pequeño cachorro te tiene en la palma de sus garritas— enchino los ojos al mirarla— es verdad— dice sin dejar de reír— y tú Seiya— lo apunta con su dedo, se llevan muy bien este par— deberías cuidarte he visto hacer a ese cachorro loco cosas que ni te imaginas—se acerca a el de manera misteriosa—estoy segura de que tiene un maquiavélico plan contra ti—los tres observamos a doro, el solo pone su carita de lado sin entender nada a lo que los tres reímos—lo vez su plan es parecer inocente— dice Mina.

—Ya Mina deja de hablar mal de mí dorito, Seiya terminará por creer que es un loco desadaptado.

—Es que lo está, de eso estoy segura— ruedo los ojos al escucharla.

—Listo he terminado con esto—cierro el libro de facturas— nos vemos luego Mina.

—Adiós Aino—Seiya se despide.

— ¡Hey Seiya!—grita mi amiga llamando la atención de Seiya— terribles cosas esta por pasar—dice de manera lúgubre mientras mueve los dedos veo a Seiya tragar duro, luego le lanza un beso y le guiña un ojo.

—No le hagas caso que Doro no planea nada contra ti.

—Mi hermosa Serena yo a las pruebas me remito—dice dándome un beso en la frente, no puedo evitar sonreír, Seiya camina delante de mí mientras coloco mi chaqueta hasta que mi mirada se concentra en un punto fijo y se topa con una mirada azul, si hay está el con su mirada puesta en mi sigue viniendo todos los días a esa misma banca con su café en mano, suspiro y lo ignoro aunque me duela hacerlo lo hago ya que él mismo me pidió distancia y no pienso suplicar más al menos como Serena no.

Déjame Amarte(EN EDICIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora