T/N
- Pequeña, apresúrate ya debes salir al escenario.- Jimin cada vez me apuraba más y más, pues llevo un buen rato encerrada en mi camarín intentando arreglarme lo más rápido que puedo, ya he perdido mucho tiempo desahogándome con Jimin sobre lo que pasó con Luis, tiempo que debería haber usado para arreglarme y prepararme para competir.- T/N! ya están por empezar y todos tus compañeros te están esperando!
- Lo sé, lo sé! y no me pongas más nerviosa de lo que ya estoy!- ese sentimiento estaba apareciendo en mi otra vez, pues no había estado así de nerviosa desde que empezó la competencia, ahora eran más grandes que en cualquier otro momento de mi vida.
Después de uno o dos minutos más, por fin mis nervios me dejaron salir de mi escondite, pero al salir no tuve mucho tiempo de analizar mi alrededor ya que Jimin me tomó fuertemente del brazo y rápidamente me arrastró hacia los costados del escenario. Cuando llegamos, con lo primero que me encontré fue con la gran cara de enfado, preocupación y nerviosismo que tenía tanto Cristina como el resto de los chicos, lo cual es entendible, es decir, apunto de presentarnos y yo me encierro en el camarín.
- Perdón, juro que no volverá a pasar.- intenté disculparme con Cristina, pero no fue totalmente necesario pues inmediatamente ella dejó salir una pequeña risa.
- Será mejor que te ubiques en tu posición.-me dijo amablemente mientras me empujaba levemente hacia mi lugar.
Pero no podía dejar así con la palabra en la boca a Jimin, así que antes de ubicarme, me di la vuelta pues él estaba detrás mío, me acerqué y le regalé un cálido y tierno abrazo, sintiendo cómo él también me envolvía en sus brazos.
- Deséame suerte.- le hablé en un susurro mientras él dejaba salir una sonrisa.
- Suerte, princesa.- dijo también en un susurro junto con algunas caricias en mi media espalda descubierta producto del vestuario. Solté una sonrisa estúpida para luego alejarme y posicionarme en mi lugar, perdiendo así el contacto visual que manteníamos. Pero estando apunto de salir, un cosquilleo desagradable en mi oído acompañado de un fuerte apretón en mi muñeca, hicieron que me recorriera un horrible escalofrío.
- ¿Acaso pensaste que te librarías de mi tan fácilmente? ¿simplemente por ir a esconderte con ese imbécil? porque si es así, déjame decirte que no te durara mucho la gracia.- Y por primera vez sentí realmente en el centro de mi pecho, cómo comenzaba a crearse en mi el miedo y las ganas de separarme por siempre de este hombre. Nunca antes le había tenido miedo a un hombre, menos a mi novio, que en realidad yo creo es él el único que piensa que sigo siendo su novia.
- Ya suéltame.- le hablaba en un susurro y con la voz entre cortada por el miedo que comenzaba a tener, me removí intranquila y algo asustada para soltarme de su agarre, pero Luis no me soltaba. Las lágrimas de la desesperación empezaban a salir de mis ojos involuntariamente y yo aún estaba atrapada en sus manos. Pronto pude sentir que Luis hundía su nariz en mi cuello mientras inhalaba y exhalaba el perfume que había impregnado en mi piel, algo que me dio bastante repugnancia, tanto así que mi estómago comenzaba a revolverse. Antes de que pudiera seguir, logré hacer un movimiento rápido y soltarme de su agarre, obteniendo de él una mirada llena de odio, furia, impotencia y ¿celos?
Una hora con veinte minutos después.
Lo divisé al fondo del pasillo y simplemente no pude evitar las ganas de correr hacia él y tirarme a sus brazos, así que no lo pensé demasiado y me puse a correr en su dirección pero fui detenida por, nuevamente, la misma mano fuerte y despiadada que esta vez, me arrastraba hacia un pasillo en donde no había mucha gente transitando. Poco a poco sentí cómo me faltaba el aire y las lágrimas salían por el miedo.
Al llegar, velozmente, esa mano me giró haciéndome ver la mojada cara de Luis producto de las constantes lágrimas que emanaban de sus ojos. Me miró fijamente aún entre sollozos y llevó sus manos a mi rostro.
- ¿Qué tiene él? ¿qué le ves? ¿qué tiene él que no tenga yo? dime por favor.- por las preguntas, debo decir que quedé atónita, no pensé nunca que Luis llegara a preguntarme tales cosas.
- ¿Qué?- por las repentinas preguntas y al ver por primera vez su rostro casi desfigurado por el llanto, no pude decir nada más.
- ¿Por qué es que lo quieres tanto, más que a mi? ¿por qué no puedes quererme así?- entonces comprendí que Luis no me ve como una persona de sentimientos, si no que me ve como un simple trofeo él cual quedará en las sucias manos del ganador. Con este tipo de pensamientos puedes llegar a perderme completamente, soy de esas personas a las que les gusta que a traten como tal; una persona, no un objeto.
- ¿Así que es por eso no? ¿cómo puedes pedirme que te quiera si estás tratando de ganar en un juego que no existe?- solté enfada, decepcionada, triste, frustrada, herida, entre otros sentimiento, mientras me alejaba de él con la mayor expresión de odio y asco que se puedan imaginar.- Yo no soy el trofeo de nadie si es lo que estás tratando de hacer. Nunca intentes conseguirme, al menos no de esa forma, si me ves así es mejor que te alejes y salgas de mi vida por completo, porque no pienso tener a una persona como tú en mi camino.
- Él no es lo que necesitas.- dijo cambiando su expresión, otra vez, a una de odio y rencor. Su comentario hizo que soltara espontáneamente algo que no quise decir, algo que nunca pensé decir.
Dilo, es lo que sientes.
- Pero es al que yo amo.- entonces tanto Luis como yo quedamos sorprendidos, pero ahora que había dicho eso, no podía retraerme, no con él presente, así que me mantuve en esa postura, mientras que Luis quedaba sin palabras pero se acercaba cada vez más a mi con lágrimas saliendo otra vez, pero de la impotencia.
- ¿Así que lo amas?- tono amenazante, detectado.
- S-si- dije algo indecisa y titubeante, pero fue suficiente como para persuadir y convencer a Luis.
- Bien, pues entonces no volveré a molestarte, eres libre de irte con él pero ya no podrás volver a mi.- a su tono de voz y su postura le sobraban lo egocéntrico y machista.
- Primero: obviamente no volverás a molestarme y segundo: no te preocupes porque no te necesito en mi vida así que no volveré a ti.- terminé firme para luego darme la vuelta e irme en busca de Jimin y dejar a Luis con la palabra en la boca.
Luego de un rato buscando a Jimin, pude encontrarlo hablando con sus amigos en la entrada de su camarín, de espalda, así que corrí y corrí para cuando llegara a él, pudiese lanzarme a su fuerte y rígida espalda. Jimin, al sentir el impacto y luego descubrir que era yo, lo primero que hizo fue reírse un montón, contagiándome a mi las risas y carcajadas, luego se giró hacia mi y cuando me encontró, creo inconscientemente, me tomó de la cintura, me atrajo a su cuerpo y unió nuestras cabezas lenta y suavemente, mientras las respiraciones se mezclaban y los pulsos se aceleraban, él buscó con sus ojos los míos y quedamos sumidos en la mirada del otro por un largo rato, el cual se terminó por el necesario y calmante baile que hacían nuestras bocas...
"Bésame, con el atrevimiento de no saber si es lo correcto..."
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Holi lindas. Perdón si me demoré en actualizar :/
Gracias por seguir votando, de verdad GRACIAS <3 Ojalá les haya gustado el cap. y la frasecita del final :)
Cuídense y besos<3
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EL AMOR QUE NUNCA TUVE (Jimin y tu)
Fiksi PenggemarT/N es una chica latina de 20 años y ya va por su tercer año de universidad. Tiene una belleza, tanto interior como exterior, inigualable, lo que la hace bastante popular, pero claro, a ella no le gusta presumir. Una competencia internacional de bai...