Fueron días inolvidables en Cancún... Días en los cuales el derroche de amor, de pasión y complicidad fue el hermoso protagonista... Estábamos felices, más unidos que nunca.
Al llegar a la ciudad, Marshall me pidió pasar por mi casa para recoger mis cosas y así volver a vivir con él. Todo era tan perfecto que me daba miedo, sin embargo, intentaba por todos los medios obviar esos pensamientos y concentrarme en disfrutar lo que la vida me estaba ofreciendo. Fui perdonada, dejamos atrás el rencor, el dolor, hoy por hoy eramos dos seres que se amaban locamente y en la dulce espera. Mi vientre cada día estaba más abultado, mi bebé era una ilusión que nos hacía conectarnos más como una verdadera familia
Al llegar a los aposentos Mathers, Hailie me recibió con los brazos abiertos, extrañaba mucho a esa niña hermosa, era una personita que alegraba la casa con su inocencia y dulzura
-Aquí en mi panza, tengo un bebito que será tu hermanito ¿te gusta la idea de tener un hermanito con quien jugar? -le pregunté a Hailie con dulzura-
-Siiii ¡Ya quiero que mi hermanito esté fuera de tu panza para jugar con él, Yupi! -todos soltamos la carcajada ante la ocurrencia de la niña, la cual daba saltitos de felicidad-
Volví a mi antigua alcoba, me recosté en la cama que muchas veces fue testigo de nuestro amor y nuestra incandescente pasión, aun no me creía estar de vuelta, me hacía tanta ilusión pensar que reanudaría mi vida junto a Marshall y que pronto seríamos 4 conviviendo en armonía familiar.
Nos sentamos a la mesa a degustar mi comida preferida, en un antojo, le pedí a Marshall que prepararan lazaña y él me complació sin chistar... Se le veía realmente comprometido como futuro papá, siempre sonriente cuando hablábamos de nuestro futuro bebé.
Al caer la media noche, luego de hacer el amor como nunca, dejé que el sueño me llevara a descansar, tenía que volver a la rutina, aún y cuando Marshall no quería que volviese a trabajar en mi estado de embarazo, yo decidí seguir en mis labores como secretaria en la empresa, un embarazo no era un impedimento para cumplir con el deber.
*********
En la mañana, estando en la empresa, le conté a mi amiga Ximena todo lo que sucedió en Cancún, le agradecí su ayuda al hablar con Marshall el día que vino a buscarme, y ella en un gesto de sincera empatía se contentó al saber de mi actual felicidad... Pidió ser la futura madrina de nuestro hijo y yo sin pensarlo dos veces, le concedí ese sitial bien ganado en la vida de mi bebé.
Luego de archivar unos papeles, redactar unas pólizas y servir el ultimo café de mi jefe en el día, culminó mis labores. Decidí llamar a Marshall para que me pasara buscando.
Me quedé sentada junto con Ximena, ella me haría compañía mientras esperaba a mi novio para poder irme a casa. Medité ese pensamiento percibiendo lo bien que se sentía verlo como mi novio, al parecer ya no tendría más ex que se anexaran a la lista de intentos fallidos de amor.
-Ay amiga, me encanta verte tan contenta, no me canso de decirlo -frotó mi hombro en señal de apoyo-
-Si, Xime, lo sé, por eso eres mi mejor amiga, gracias -comenté con cariño-
De pronto, sonó su cel, ella contexto al instante
-Aló, si ¿diga?, si habla con ella ¿Le conozco?... ¿Qué? -se le veía un poco preocupada, me alarmé en el acto- ¡No puede ser! ¿Está seguro?... Ok, voy para allá de inmediato -colgó enseguida y yo ya estaba realmente ansiosa-
-¿Que sucede, Xime? -le tomé la mano, la percibí agitada y temblorosa-
-Me llamaron, dijeron que mi auto ya no estaba en el garaje de mi vecina, sabes que estaba en reparación y alquilé ese espacio mientras llegaba la pieza que le faltaba, al taller y supuestamente desapareció ¡Ya no está!, amiga, debo ir a verificar esa información, y si es así, reportar el robo, disculpa, debo irme - se levantó del asiento, tomando sus cosas de manera apresurada-
-Lo entiendo, no te preocupes, ya Marshall debe estar por llegar, ve, ojalá sea falsa alarma, suerte Xime, bye -la vi irse alterada, yo me quedé preocupada-
Al cabo de unos minutos, mientras leía un poco, escuché la puerta y sentí alivio, "De seguro es Marshall, por fin" pensé. Levanté la vista a la entrada de la empresa, llevándome una sorpresa nada grata.
-¿Tú, otra vez?, ¿Hasta cuando jodes? -me levanté del asiento, enfrentándolo, no iba a demostrarle temor como la ultima vez que nos vimos-
-Si, yo, vengo en son de paz... Supe que habías vuelto así que decidí venir... oye, necesito que me perdones, he sido un patán, un idiota, nunca pude aceptar que no me hicieras caso, perdón por favor -No podía creer lo que estaba escuchando-
-¿Que tramas? no te creo nada, los putos como tú, nunca cambian -espeté sincera, no daba crédito a sus palabras-
-Por favor, creeme, se que es dificil pero realmente me arrepiento de los malos ratos que te hecho pasar, perdón ... ¿Hacemos las pases? prometo no molestarte más, solo quiero que me perdones, ¿si?
-¿Por qué mejor te olvidas de mí y listo? olvida todo, yo haré cuentas que ni te conocí, Jhon -sentía rabia y desconfiaba-
-Anda, por favor, lo que pasa es que me ha ido muy mal en estos últimos meses y créeme que sé que estoy pagando caro mis malas acciones, si tu cambiaste, yo también puedo... Solo quiero tu perdón, te lo suplico, es como un deber moral que tengo conmigo mismo ¿Me entiendes? -se le veía acongojado-
"No todo podía ser tan perfecto" volvió a pasar esa frase en mi mente, sacudí mi cabeza como para dispersar esos pensamientos
-Esta bien, Jhon, te perdono ¿contento? asunto finiquitado y olvidado... Ahora si, por favor, aléjate para siempre de mí y todos felices ¿Va? -él me extendió la mano y dubitativamente, estreché la mía junto a la de él-
-Espero que seas feliz - se acercó peligrosamente a mí, me puse nerviosa- yo lo único que quería era probar las mieles de tu pasión sexual pero nunca se pudo ni se podrá -sonrió- bueno señorita Hooper, ya me voy, pero antes ...
Me tomó con fuerza, apretándome muy junto a él, manateandome con avidez. Chocó sus labios junto a los míos, forzando un beso asqueante, intentaba zafarme de él pero se me hacía difícil... Forcejeaba con todo de mí hasta que una voz nos paralizó a ambos en la lucha que estábamos emprendiendo
-¡¿Qué significa esto?! -Marshall se veía totalmente transfigurado y desencajado...
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"Futuro Ex Novio"
RomanceMi vida se tornó de rosa a gris... Un corazón roto y algunos intentos fallidos, eran mis acompañantes fieles... Me juré a mi misma no enamorarme de nuevo, pero el destino a veces hace jugadas inesperadas... *HOLA, SI TE SIENTES IDENTIFICAD@ CON M...