Era por la mañana y Kat estaba sola sentada en el sofá. Samantha y Lucy se habían quedado a dormir a casa de Kat. Sam había dormido con su padre ,en la parte de la cama de su madre. Hacía muchos años que nadie dormía ahí. Incluso, Kat nunca había dormido ahí desde que Melly había fallecido. Lucy había dormido en una cama al lado de la de la chica.
En ese momento , la adolescente veía la tele. Todos dormían y la casa estaba en silencio. Entonces se oyeron pasos. Samantha bajaba por las escaleras. Llevaba un pijama de chaqueta y pantalón de raso verde. Por encima de él tenía una bata rosa, a juego con sus zapatillas.
-Buenos días, Katita.
-Kat-le corrigió ella-Buenos días, Samantha.
Sam fue a la cocina y volvió con una taza de humeante café entre las manos. Se sentó en el sofá y encendió la televisión. Estaban repitiendo el programa de La Voz de Estados Unidos .
-¡Qué bien! Me encanta este programa.
Entonces la novia de su padre cambió el canal.
-Es más educativo ver las noticias.
Enfadada, Kat se levantó y se dirigió a la cocina. Abrió la nevera y sacó mantequilla y mermelada para hacerse un sándwich. Luego cogió zumo de naranja y lo puso todo en una bandeja. Más calmada, fue al salón y se volvió a sentar al lado de Sam.
-¿No tomas leche? Sí bebés leche crecerás sana y fuerte.
Kat puso cara rara y respondió:
-No me apetece.
-¿Y tu padre te deja?
-A mi padre le da igual que no tome leche un día.
Samantha asintió y subió las escaleras , para luego bajar con su hija en brazos.
-No me acordé de decirte que tu padre se fue pronto a la ciudad a hablar con la editorial, por su nuevo libro. No vendrá a casa hasta la noche, así que tengo planeado un día de chicas. Ve a vestirte.
-Eh... He quedado con unas amigas...-mintió Kat, pues no le apetecía ir con ella.
-Pues otra vez será. Te acompañaré hasta donde hayas quedado. Dime dónde y a qué hora.
-Pues... En el puente, está lejos, no hace falta que vayas. A las 12.
-¿Lejos? En los pueblos todo está cerca. Además, estás bajo mi cuidado y si te pasa algo... ¿Con quién vas?
-Amigos.
Kat se dio la vuelta y corrió hasta su habitación, para que no le preguntase más. Samantha le irritaba, se comportaba como si fuese su madre y no lo era.
Kat cogió su móvil . En principio, no iba a quedar, sólo iba a ir a correr, pero ahora tenía que quedar con alguien , pues Sam la iba a acompañar. Sí Samantha no veía a nadie donde había quedar, la pillaría en la mentira. Ninguna de sus amigas estaban en línea así que no llegarían a tiempo. Mike sí que estaba en línea. Tecleo: Mike sálvame la vida y queda conmigo a las doce en el puente.
Mike contestó con un "okey" y un "jajaja". Kat respiró hondo y se puso sus vaqueros gastados, su sudadera de Adidas y sus Vans.
A las doce estaba en el puente, al igual que Mike . Se abrazaron y Kat se despidió de Sam. Luego le explicó todo al rubio. Cuando término , él se rio .
-Jajaja. No parece mala.
-Mala no , pero es un tostón.
Ambos rieron y caminaron en dirección al mirador. Desde allí se veía todo el pueblo y era precioso...y romántico. Llegaron y se sentaron en unas rocas altas. Sí mirabas abajo , daba miedo. Mike se pegó a Kat y ella le abrazó. Y se besaron tiernamente. Se separaron y Mike le dijo:
-Me dijiste que no estabas preparada y que estabas harta del amor. No sabía que te gustaba.
Como respuesta Kat le volvió a besar.
-¿No sientes nada por Mark ya?
-Calla un poco - rio ella.
Le intentó volver a besar, pero él la sujetó y la apartó.
-Contéstame.
-No sé... Me engañó. Mike me gustas, eres más que mi mejor amigo.
-Pero él te sigue gustando.
-No he dicho eso-dijo Kat sería.
-Sabes que es verdad y a mi no me gusta que quieras estar conmigo tanto como con otro.
Mike se puso de pie. Kat no sabía que decir. Se levantó también y se asomó, colocándose al borde de la roca. Entonces, resbaló y quedó colgando.
-¡Kat!-gritó el chico.
La cogió por los brazos y la elevó. Una vez a salvo, se abrazaron y se besaron apasionadamente. Iba a ser la hora de comer, así que volvieron a casa.
En medio de la calle se volvieron a besar. Kat acarició el pelo rubio de su amigo (pues de momento no eran nada más ).
-¿Kat?-dijo alguien a sus espaldas- ¿Estás con Mike? Tú sabes que te quiero, perdóname.
Era Mark.
-Yo...-se sentía indefensa.
-Déjala. Yo nunca le haré daño, no como tú. Ella me quiere -gritó Mike.
-Me quiere a mí.
Ambos se giraron para saber que decía Kat, pero ya no estaba, de había ido.
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Lo que llamaba hogar
Teen FictionKat es una chica de catorce años. Después de dos años viajando vuelve a su hogar, su pueblo. Allí todo ha cambiado y adaptarse a su nueva vida supondrá un auténtico desafío para ella.