QUE COMIENCE EL JUEGO TERMINADA

Capítulo 17 (Parte 2)

RUGGERO

Me levante temprano, me arreglé, y partí hacía la casa de Karol, deje mi auto a una cuadra de su casa y me acerque a su auto, saque una navaja y pinché una de sus llantas.

Fui hasta mi auto y lo estacioné frente a su casa, para esperar que saliera. Cuando salió su sonrisa se desvaneció.

— ¿Qué haces aquí?

—Pase por aquí y pensé que tal vez podría llevarte. —Dije con mi típica sonrisa.

—Por si no lo sabías, tengo un auto. —Señaló su vehículo.

Levanté mis lentes oscuros.

—Por lo que veo, una llanta esta sin aire.

— ¡Diablos! —Exclamó.

—Vamos, no es ningún sacrificio llevarte. Sube. —Salí del auto y le abrí la puerta del copiloto.

—Gracias. —Encendí mi auto en camino a la escuela. Cuando llegamos todas las miradas se fijaron en nosotros, Savannah se acercó.

—Hola Ruggero, hola Karol. Me preguntaba si quisieras entrar al equipo de animadoras, ya sabes, tienes un buen cuerpo y muy buen estado físico, eres ideal para ser una "Cheerleader". —Dijo la rubia con su falsa sonrisa.

— ¿Qué te hace pensar que quiero ser como tú? —Karol siguió y entró al instituto, dejando a Savannah con la palabra en la boca.

—Y... Ruggero, ¿que harás esta noche? —Dijo envolviendo su cabello en su dedo.

—Creo que estaré ocupado, nos vemos luego. —Salí de la escena y caminé hasta la entrada.

No pude preguntarle a Karol porque se comportaba así conmigo, ¿qué le hice ahora para que fuera tan fría? Entre a mi primera clase, en esa clase estábamos juntos, pero, como siempre, prefirió sentarse con Josh.

Las horas pasaron rápido dándole paso al almuerzo.

KAROL

— ¿Qué hay chicos? —Dije sentándome junto a ellos en la cafetería.

—Nada nuevo, ¿y tú? —Dijo Mike

—Nada... —Sonó mi celular anunciando una llamada, lo tomé y presioné el botón verde.

— ¿Hola?

— ¿Karol? ¡Hola, hablas con Alex! —Mi sonrisa salió a flote.

— ¡Alex ¿Cómo estas?

—Bien, ¿y tu?

—Bien, y dime, ¿a qué se debe tu llamada?

—Te llamaba para invitarte un café, ¿que tal hoy?, yo te recojo a la salida de tu instituto.

—Me parece perfecto. ¡Te espero! —Corté la conversación y guarde mi teléfono.

— ¿De qué hablábamos? —Enfaticé.

—Savannah hoy me ofreció unirme al equipo de porristas... —Mencionó Valen.

—A mi también, pero me negué. ¿Y tú qué le dijiste? —Pregunté preocupada.

—La idea me agrado, así que acepte...

Me atranqué con mi fruta.

— ¿Qué hiciste que?

—No es para tanto Karol, sé que no te agradan las animadoras, pero, ¿me podrías apoyar en esto? —Dijo haciendo carita de perro suplicando.

—Bueno, es tu decisión, cuentas con mi apoyo. —No me agradaba que mi mejor amiga, Valen, se uniera a su séquito de "estúpidas sin cerebro".