La flecha sombría [Zed x Ashe]

Comienzo de la batalla |Parte 1|

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                                                                    Punto de vista de Ashe.

Todo estaba siendo preparado cautelosamente para llevar a cabo lo que teníamos en mente. Quedan unos dos días hasta que terminen todo, y, como buena admiradora de la naturaleza, no me puedo ir sin observar los grandes y cuidados jardines del palacio.

Es realmente hermoso, flores únicas tan solo pueden crecer aquí, plantas comunes en su plenitud y pequeñas criaturas silvestres. Nunca pude detenerme a apreciar la belleza de la naturaleza en el frío Frelijord, donde las flores nunca crecen.

-Una flor para otra flor.- una mano adornada con una blanca rosa.- No podrías ser más original, Talon.- ironicé. Acepté la flor.- ¿Sabes dónde se encuentra Zed?- lo miré.-... ¿No puedes pensar en otra cosa que no sea 'Zed'?- frunció el ceño. Mi cara se tintó de un claro color rojo; Ignoré mi propia temperatura y continué.- ¿Sabes donde está?- el simplemente cerró sus ojos y cogió mi mano, para a continuación llevarme a algún sitio el cual desconozco.

-Recuerda que mañana es el gran día.- se paró.- Lo sé.- Miré a mi alrededor, era el más cuidado de los jardines. Callé y observé.- De nada.- cuando lo intenté mirar, ya no estaba.

(Varios minutos después...)

Unos fuertes brazos me rodearon por la espalda. Antes de reaccionar, ya estaba preguntando.- ¿Zed?- y así era, era Zed.- ¿Esperabas a alguien más?- levantó una ceja y río ante mi cara.- Por cierto, tenemos que prepararnos.- sonrió pícaro.- ¿P-p-pa-para q-qué?- estaba totalmente roja.- Para mañana, obviamente.- inflé mis rojos mofletes y miré hacia otro lado.- Idio...- un beso interrumpió mis palabras.- No seas impaciente, me tuve que contener bastante.- miraba mis ojos con sus brillantes orbes rojas, al igual que mi rostro.- ¿Vamos?- lo tomé de la mano.- Vamos.-.

||Día de la batalla||

Todo la cuidad sabía que era hora de comenzar la preparada venganza. Algunos nerviosos, otros relajados, varios se echaban para atrás, pero todo continuó. El incesante murmullo mientras los valientes luchadores partían hacia su destino daba una extraña sensación de seguridad, los habitantes animaban a las tropas, les obsequiaban regalos útiles y ofrecían escasa comida. Estábamos siendo apoyados, mirados con orgullo desde las distancias, saliendo de la ciudad.

||En el lugar de "encuentro"||

Todos observabamos escondidos en nuestras posiciones al modesto ejército de Hans.

Continuará...

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Lo siento... Lo siento...~ Pronto ( es decir, en menos de una semana) publicaré la segunda parte.

Disfruten lo poco que les he ofrecido hoy~ Hew~~~