La flecha sombría [Zed x Ashe]

Fin de la batalla |Parte 2|

...La primera de nuestras filas se lanzó, ellos la recibieron con golpes mortales que, mataron a varios sin piedad.

Punto de vista Zed|

-N-no puede ser...- Ashe se levantaba para cometer una imprudencia.- No.- La agarré de la mano devolviéndola a su posición.- No deberíamos salir ahora.- su mirada llena de resentimiento se posó en mi.- ¡No me puedo quedar así cuando mueren nuestros hombres!- lo sé.- ¿Crees que a mí me gusta quedarme quieto?- la pelirroja interrumpió.- Dejad vuestras peleas de pareja para después, vamos a salir, si se tuerce la cosa, saldría vosotros.- acto seguido salió y arremetió contra los contrarios. Ambos en silencio observabamos la denigrante escena creada en unos minutos. Fue entonces, cuando Katarina cayó al suelo, Talón salió lleno de furia a defender lo que quedaba de ella.- Vamos.- dije.- Vamos.- respondió ella.

Ashe me cubría, matando a varios desgraciados, poco a poco me acercaba a Hans, entre las sombras, sin ser notado.

De un momento a otro una espada amenazaba mi abdomen. Una flecha certera paró el corazón del contrario.

Un gritó proveniente de la persona que menos quería en peligro, hizo que me girara desesperado a su rescate, cosa que no hizo falta, ha que Talón se había encargado de ellos.

Quedaban 10, no muy claro, ha que había algunos que no estaban muertos. Entre ellos Hans. Su semblante sádico había salido a la luz. El recuerdo de hace más de 10 años un invadió mi mente por completo, mi madre tirada en el suelo, manchas de sangre por doquier. La venganza se apoderó de mi mente y en pocos segundos mis cuchillas amenazaban su cuello.- Tu realmente eres algo.- Hans sonreía sádico al punto de la locura.- Vengan...za- una daga clavada en su abdomen le hacía perder fuerza, pero aún así sacó lo poco que le quedaba para terminar con la vida de su padre, cayendo al suelo desplomado, al contrario que Hans, que se quedó petrificado. Alcanzó a ver cómo un alma negra salía del cuerpo de su odiado y ya muerto padre. Una lágrima incomprendida salió de sus apagados ojos. Cayó inconsciente.

La peliblanco corrió devastada hacia su amado al igual que Talón.- No... ¡NOOOOO!- las lágrimas no tardaban en salir.- ¡RÁPIDO!- Talón cargó con él para llevarlo a algún lugar seguro. Ashe cogía su mano mientras sus húmedas mejillas se enfriaban...
A partir de ahí todo se volvió borroso.

||||5 días después||||

Abrí los ojos aturdido, no sabía dónde me encontraba, una presión en mi abdomen se hizo notar. Aún estaba herido. No podía levantar el cuello, dolía demasiado. Sentía una ligera respiración cerca de mi.

Me incorporé dolorosamente despertando a la peliblanco de ojos ahora rojos.- Zed...? ZED. N-no-no te i-incorpores, quédate así.- me acostó delicadamente. Un suspiro de alivio escapó de la boca de Ashe.- ¿E-estás bien? ¿Todo salió como planeábamos?- me esforcé por hablar, aunque dolía.- Sí, todo salió bien, excepto las bajas. Son considerables.- Una lágrima recorría la mejilla de la arquera.- Siento haberte preocupado.- ella envolvió mi mano con las suyas.- I-idiota... No te disculpes por eso, yo... Realmente n-no habría sabido q-qu-que hacer si t-tu...- la interrumpí.- Ese no es el caso, ahora, deja de llorar.- Acaricié su mejilla con cariño.-