La flecha sombría [Zed x Ashe]

Revelación y colaboración.

Punto de vista de Ashe

A los segundos de dejar a la vista sus peculiares armas, Zed estaba encima de él, inmovilizándolo mientras lo intimidaba con la mirada.- ¿Eras tú quien asesino a él inocente sirviente?- comencé con el improvisado interrogatorio.- ¿Inocente? ¿Acaso la inocencia sirve de algo en este aberrante y dejado mundo?- dijo esbozando una carcajada.- Limitate a responder con sí o no.- Interrumpió Zed.- No os conviene ser leales a ese hombre. Una cuchilla os atravesará la espalda si le confiáis vuestras vidas.- Advirtió bastante relajado para la posición en la que estaba.- Noxus os recibe con las manos abiertas si se trata de una revelación contra Hans.- prosiguió. Zed forzó aún más su agarre, para luego dejarlo libre.

Punto de vista de Zed

Suficiente tiempo duraron las preguntas como para que tomara una decisión.- No volveremos allí, Ashe.- dije, desviándose mi vista de Talón para posarla en ella.- Esperaba que dijeras eso. A cualquier lugar que vayamos será mucho mejor que ese.- apoyó la idea.- Supondré que eso quiere decir que vendréis conmigo.- Talón se levantó del suelo y se sacudió las manos.- Sin embargo, tenemos condiciones.- dije deteniéndolo de su marcha. Me miró curioso.- Les ofreceré información a cambio de estancia en Noxus, temporal.- expliqué.- Y que no se nos oculte absolutamente nada, o se volverá en vuestra contra.- terminó Ashe.- Realmente están compenetrados. Tranquila, Ashe, a ti no te escondería nada.- Besó su mano. Tome su cintura posesivamente y la estrujé contra mi pecho. Él simplemente río y continuó el camino.

-Ya estamos- anunció Talon, rompiendo el silencio durante todo el camino. Ambos levantamos la vista, encontrándonos con un gran castillo que apenas se podía observar por el gran muro que impedía su paso. El guardia al ver a Talón, abrió la puerta sin soltar una palabra, dejándonos paso. Debe ser alguien importante como para que confíen plenamente en el.- ¿Cómo estás tan seguro de que se puede confiar en Noxus?- dudó Ashe.- No rechazarían ayuda tratándose de su peor enemigo.- expliqué y la miré para tranquilizarla.

Una gigantesca puerta se abrió, haciendo eco en todo el castillo, dejando a la vista a todas las personas que estaban trabajando con prisa y corriendo por ahí.- Esto es lo normal, así que no se preocupen.- emitió una voz grave que inundaba toda la sala, y no era precisamente de Talon. Un hombre con un exótico cuervo en su hombro se acercaba a nosotros.- Mi nombre es Swain, el rey de Noxus. Lamento todo este alboroto, Ashe, Zed.- Nos analizó a los dos. Por un momento dudé, ¿cómo sabía de nosotros? Pero enseguida recordé que éramos seguidos por Talon.

Nos guío hasta una sala que parecía ser de reuniones, dónde se encontraban varias personas, las cuales callaron al vernos entrar junto a Swain.

Todos nos sentamos, el ambiente era impoluto.- Iré directo al grano... Supongo que ya sabréis cual es nuestro objetivo, por lo que me ahorraré la explicación y proseguiremos con el plan, si creéis que hoy puede fallar o faltar, dígamelo.- sentenció Swain. Todas las personas presentes asintieron.- El plan es simple, Hans no sabe de vuestra colaboración, por lo que vosotros apareceréis en el último momento.- explicó.- Él ya ha planeado ir en busca de usted en persona, por lo que será fácil atacar, no irá solo, por ello me gustaría evitar el mayor número de muertes posibles.- dije con firmeza.- Todos los que apoyan la opinión de ese hombre deben morir.- gruñó Swain.- No todas las personas que están ahí son así... Muchos son inocentes, y solamente cumplen con lo que les ordenan.- replicó Ashe.- Sin embargo la muerte de Hans será necesaria. Así será y no hay más.- terminó.- Formaremos 3 grupos, el primero irá delante, en contacto directo, el segundo apoyará y entrará en acción después de que empecemos la batalla, y el tercero, que limpiará la escena si hay problemas. Somos 15 personas principalmente, aunque iremos acompañados de soldados. Vosotros solo tenéis que saber que formareis con el tercer grupo.- finalizó y se levantó.

Eventualmente todo el mundo se marchó.- Vamos, parejita, os guiaré hasta vuestra habitación.- dijo hasta lo que sabía por ahora Katarina.

Sin vacilar nos guío y nos dió las llaves. Se marchó segundos después. Ambos fuimos hacia nuestras respectivas habitaciones, que estaban separadas por una insolente pared.

Al entrar, las vistas eran exquisitas, un amplio balcón al fondo de la habitación, dando lugar a una maravillosa vista. Llevé mi mirada a lo largo del balcón. Nuestros balcones estaban unidos, lo cual hizo que ambos sonrieramos al vernos. Me acerqué a ella, tomándola por la cintura mientras observabamos las vistas.- Es increíble...- soltó.- En un mundo tan ignorante y sucio se puede apreciar una de las cosas más hermosas del universo.- continúe.- Cierto, las vistas, nunca esperé que algo así existiera.- sus ojos recorrían entusiasmados el paisaje.- ¿Quien dijo que hablaba del paisaje?- La miré y sonreí.- ¿Q-qu-que d-dices?- tartamudeó sonrojada.- Que eres lo más hermoso del universo.- planté un tierno beso en sus labios y sonreí divertido, volviendo a posar mi vista en el nocturno paisaje.- Q-que tonto eres...- unos delicados brazos sujetaron mi cuello, siguiéndolos de unos suaves y dulces labios en mi mejilla. Esta vez el sonrojado era yo.

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Últimamente varias personitas han votado en mi historia, cosa que me ha hecho muy muy feliz, ya que me ha motivado para sacar la inspiración del rincón más oscuro de mi cerebro para crear este capítulo y seguir con la historia. Muchísimas gracias.
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|Gracias por leer~|