Amor Inconsciente... (Kakasaku)

Capitulo 10: Atardecer de esperanza...

Todo se volió negro. "¿Que ha pasado? ¿Donde estoy? ¿Kakashi? ¿Donde fuiste!? No me dejes por favor...."  Estas palabras hacían eco por todo el lugar. Luego, el silencio dominó todo aquello que paracía ser un mundo de oscuridad absolutamente vacío.... 

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-Kakashi.... Deberías descansar un poco... - Dijo la Hokage al observar al peliplateado sentado junto a la pelirosa, el cual no se separaba de ella ni por un segundo, solo salía por las mañanas para tomar una ducha, y luego volver a la habitación  - Al menos deberías preocuparte de ti mismo tambien, no has comido nada, ¿Verdad? 

El Hatake no daba ni un tipo de respuesta, negandose a alejarse de Sakura, la cual llevaba ya más de una semana sin abrir sus ojos.

-Toma....-Dijo Tsunade con su mano estirada, en la que sostenía un bowl de Katsudon recién hecho - Lo hizo Shizune, y no te preocupes, que no esta envenenado - bromeó un poco, y al ver que este solo apartó la mirada, añadió enfadada - Si no lo comes por voluntad propia, ¡Te lo meteré a la fuerza, aunque sea por las orejas, Hatake!

-Hai, hai... - Dijo finalmente cogiendo el bowl, un tanto temeroso por la amenaza de la quinta.

No habían pasado ni dos minutos cuando este se había devorado hasta el último grano de arroz. "¡Idiota! Estabas muriendo de hambre" Pensó la rubia mirando al peliplateado mientras examinaba a la pelirosa. Pudo notar que el jutsu ya casi se había desvanecido por completo, y tal vez solo era cuestión de horas para que su querida aprendiz despertara. "Ya despierta pequeño cerezo, te estamos esperando" Le dijo en su mente.

La puesta de sol iluminó la habitación de un color anaranjado, para luego abrirle paso a la oscuridad que no dentro de mucho comenzaría a llegar. Tsunade dejó la habitación tras prender las luces, y mirar al copy ninja tomar delicadamente la mano de la chica, definitivamente no la dejaría sola, y la verdad era que la mujer de coletas no lo entendía del todo, aunque sospechas tenía, pero se negaba a tomarlas como posibilidades.

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Abrió lentamente sus ojos color jade, para observar finalmente la pequeña luz que provenía de la mesa de noche que estaba junto a la cama. Tras intenta mover sus manos, pudo sentir un peso sobre su izquierda, y al mirar, no encontró nada más ni nada menos que a él, a su querido Kakashi quien la sostenía mientras dormía sentado incomodamente con su cabeza apoyada en la cama. Era como un deja vu de la vez anterior cuando estaban en la aldea del Hierro, recordaba la pelirosa.

Tras sentir un pequeño movimiento, el peliplateado despertó instantaneamente. Sakura pretendió que seguia durmiento, mientras tenía sus ojos ligeramente abiertos para observarlo mientras este miraba a su alrededor y luego a ella, tenía unos ojos soñolientos y cansados. Tras unos minutos, este se acomodo nuevamente en la misma posición para dormir, sin soltar su mano. Ella solo lo observó por horas, pensando y pensando, en nada más que en él. Se preguntaba a si misma mil preguntas que parecian no tener respuesta alguna, e intentaba ordenar su mente, pero la imagen de Kakashi durmiendo con su cara completamente descubierta frente a ella, desordenaba todo aún más ahí arriba. De pronto, recordó aquel delicado beso, lo cual provocó que su rostro se tornara completamente rojo, mientras reprimía sus emociones y movimientos, intentando no hacer ruido y despertarlo.

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Ya eran las 8 y media de la mañana cuando el peliplateado abrió sus ojos.

-Buenos días, Bello durmiente... - Dijo la pelirosa con un tono bromista.

Impactado, soltó su mano, se sentó sobre la cama y tomó a la chica entre sus brazos, para darle un apretado pero a la vez tierno abrazo, el cual fue correspondido. El abrazo duro los que fueron aproximadamente unos 3 minutos, en los cuales estos no dijeron una sola palabra. Al terminar Kakashi tomó el rostro de la chica entre sus manos para luego apoyar su frente contra la de ella y sonreir. Sakura también lo hizo. 

-¿Cómo te sientes? - Preguntó despegando su frente y bajando su mano izquierdaa su hombro, mientras con su derecha acariciaba la majilla de la pelirosa - ¿Tienes hambre? ¿Sed? ¿Te duele la cabeza? Estas-

-¡Kakashi! - interrumpió la pelirosa - Estoy bien.... - Dijo calmadamente regalandole una sonrisa - Solo....necesito.....ir al baño - Dijo un poco avergonzada. 

-Oh - Asintió el hombre - ¿Puedes pararte?

-Hai - dijo esta sentandose en la cama e intentando pararse, cayendo al instante - Creo que no.. je, je - Musitó con una risilla nerviosa.

Kakashi sonrió, y la cargó como a una princesa hasta el baño.

-Llamaré a Tsunade-sama - Dijo cerrando la puerta.

En menos de un minuto, la rubia abrió de golpe la puerta.

-¡¡Sakuraaa!!! - Exclamó esta arodillandose delante de ella - ¿Cómo estás? 

-Estoy bien - dijo con una sonrisa - pero.....tengo un problema - añadió dejandola intrigada - Me voy a hacer encima - Dijo finalmente y la quinta estallo en risa.

Luego de más de cuarenta minutos, las dos mujeres salieron del baño, tras ayudarla a tomar una ducha y secarle el pelo. Sakura salió apoyada en los hombros de Tsunade, ya que se sentía muy debil aún, pero antes de que caminara más fue cargada nuevamente en los brazos de Kakashi quien la dejó suavemente sentada en la cama. La quinta había ordenado cocinar para esa "pareja de idiotas", como ella los describió. Para ese entonces ya eran pasadas las 11 de la mañana cuando terminaron de almorzar.   

-Kakashi.... -Dijo la quinta con un tono serio - Ve a casa y toma una ducha, ¡Apestas! - bromeó, sabiendo que no era cierto, pero quería que este se despegara un rato de Sakura. El peliplateado obedeció, y tras regalarle una cálida sonrisa a la pelirosa se marchó. 

-Ese bastardo.... -Dijo Tsunade cerrando sus ojos, moviendo la cabeza de lado a lado - El  idiota ni comía por no separase de ti....Baaaka! 

 Sakura, sorprendida, abrió considerablemente sus ojos, sintiendo como la sangre subía hacia sus mejillas para colorearlas de un tono carmesí. Parpadeó rápidamente, volviendo sus ojos a la normalidad, y llevó su mano drecha hacia sus labios.

"¿Él....hizo eso por mi?...." Pensaba cubriendo su sonrisa con su mano.