Juego sucio: El precio de la libertad

Adiós Ginny

"Juego Sucio"

S.M Guzmán

Capitulo XXVI

Harry camino pesadamente hasta que detuvo su andar frente el cofre de madera que estaba apoyado en varios parales, había demasiadas personas presentes que él en su vida había visto, observo a la familia Weasley, llorar y consolarse entre ellos, el nudo en su garganta lo asfixiaba, no tenia claro porque había llegado hasta ahí, pero cuando después de darse un baño se vistió completamente de negro, no más por instinto supo que debía estar presente, para decirle adiós a ella, y a esa parte de su vida que quería olvidar.

Observo con cautela a Molly, la mujer estaba devastada. Alguien que él no supo identificar daba un discurso aparentemente muy conmovedor, cuando su debilidad flaqueo limpio rápido la lagrima que se escapo, finalizo el discurso los presentes tenia la varita en alto para convocar el Lumus, en señal de despedida. Lo observaron con detalle, esperaron que él hiciera lo mismo, pero no fue así, y cuando por fin lo entendieron convocando el hechizo, Harry se acerco al ataúd, la miro más pálida de lo normal, sus labios habían perdido el tono rosa al igual que las mejillas. La impotencia lo recorrió, sin pensarlo dos veces sus manos se volvieron puños.

──Adiós Ginny.

Susurro muy cerca del cristal que los separaba, como un gran secreto entre ellos. Se alejo del féretro, de los presentes y camino en dirección a la salida del cementerio.

Hermione se removió incomoda cuando sintió un golpe en su nariz, no quería despertar estaba muy cómoda, arrugo la nariz cuando otro golpe le dio en un ojo, ese si le dolió. Recordó a Scorpius, quiso inclinarse aun sin abrir los ojos y sintió la calidez abrumadora en su cintura que no se lo permitió. Se giro con violencia miro a Draco, plácidamente dormido y ha Scorpius, jugando con un cojín. La felicidad la embargo, se tiro encima de él llenándole la cara de besos.

Draco despertó asombrado y asustado por tal acto, pero Hermione no le dio tiempo de decirle nada lo abrazo con fuerza, y él extrañamente le correspondió atrayéndola hacia su cuerpo. Scorpius, gateo hacia ellos integrándose al abrazo ¿Qué más podía pedir Draco? Tenía la felicidad entre sus brazos. Hermione se aparto de Draco, esté tomo al bebé entre sus brazos y empezó ha besarle el rostro, igual que Hermione, hizo con él. Scorpius, se carcajeo robándole por completo el corazón al matrimonio.

── ¿Cuándo llegaste? ──  Pregunto la castaña saltando de la cama. Draco continuo admirando a su hijo, su pequeño le había dado las fuerzas para soportar todo lo ocurrido.

──Anoche, ambos dormían no quise despertarlos.

Hermione sonrió no le dio tiempo contestar, los toques en la puerta la hicieron caminar hacia ella, saludo ha Anastasia, quien fue por el bebé.

──Disculpen el niño necesita comer.

La mujer se marcho con el niño en brazos, Hermione se giro nuevamente hacia Draco, este tomo asiento en el borde de la cama admirando a la mujer que tenia en el frente, una pulsada le atravesó el pecho. Ella tenia la mirada radiante como cuando solía verla en el colegio, la expresión estaba más relajada de lo normal, se sintió culpable por los últimos días que ella había atravesado.

──Hermione ── Nombro con sutileza sorprendiéndose así mismo ── Yo ── Titubeó busco las palabras adecuadas para lo que tenia en mente ──Entiendo si quieres marcharte, tomarte un tiempo todo esto ha sido un desastre.