He's Just A Boy |Draco Malfoy y tu|

Capítulo 10

Han pasado tres años desde entonces...

En la cama de la habitación muggle de _____, había un bulto tapado por las sábanas color rojas. Era ella. Estaba profundamente dormida, con todo su pelo revuelto. Estaba soñando en como sería su regreso a Hogwarts. Cursaba quinto año en la escuela de Hogwarts, Magia y Hechicería.

Una mujer de pelo rubio, y un hombre de pelo castaño con gafas, invadieron la habitación de nuestra quinceañera. Enchufaron la luz de la habitación y se sorprendieron al ver a solo a su pequeña hija. El hombre con gafas dio unas cuantas palmadas. Ambos padres sonrieron cuando _____ se comenzó a quitar la sábana de encima. El padre de ____ preparó su cámara de fotos y se acercó a ella, a la vez que la madre de ella, que iba con una tarta de nata y fresa. La favorita de ____.

_____ salió de debajo sus sábanas con todo el pelo alborotado, y con una cara de pocos amigos. Su padre le sacó la foto, sin ni siquiera esperar a que se arreglara un poco el pelo.

El hombre esperó a que la foto se pusiera y se la mostró a su mujer. Ambos rieron y le mostraron la foto a la chica aún con cara de pocos amigos.

-Feliz quince cumpleaños hija. Mira, tu primera foto con quince años.

_____ miró la foto solo con un ojo abierto, pues aún le dolían por la luz. Alzo una ceja y soltó un suspiro.

-Os odio.

Ambos padres rieron al ver a su hija volverse a tapar entera con las sábanas. La madre tocó levemente la pierna de su hija para luego moverla.

-Cariño, sopla las velas. -murmuró la madre. _____ sacó su cabeza y se incorporó y sopló las velas rápidamente. Para luego, volver a taparse. -Hija, tienes una sorpresa en el salón. Prepárate y baja en cuanto acabes.

_____ murmuró algo como diciendo que vale. Los padres de ella salieron de la habitación. Se estuvo unos minutos más con los ojos cerrados y luego se levantó lentamente. Como si le pesara el cuerpo. Miró el reloj.

¡Eran las ocho de la mañana! ¡En un día de agosto!

_____ soltó un leve grito de indignación. Ella que estaba tan ricamente durmiendo. Y van y la despiertan. Los iba a matar. Estaba pensando ya en mil y un hechizo para matarlos o hacerles sufrir.

¿Cómo no he quedado en Slytherin? Pensó ella. Luego rió.

Fue a su armario y sacó una camiseta de manga corta, que le venía por debajo de sus muslos. Era parecida a un vestido, pero no llegaba a serlo. Se puso unos shorts vaqueros. Se sentó en la cama y abrió el cajón último de su mesa de noche para sacar sus calcetines. También sacó su sujetador y unas bragas. Se iba a dar una ducha antes de bajar al salón.

Llevó la ropa al baño y fue a coger una toalla a un armario que había en el pasillo, justo al lado de la puerta del baño. Cogió un par de toallas y se volvió a meter en el baño. Se quitó el pijama que llevaba, algo viejo ya. Pensó en que debería ir a comprarse ropa nueva antes de que acabase el verano.

Se quitó toda la ropa y puso el agua caliente. Cuando estuvo lo suficiente caliente, se metió en la ducha, pasando la cortina para no salpicar agua al suelo. Comenzó a mojar su pelo y su cuerpo con el agua caliente. Apagó el grifo y se enjabonó con el jabón de olor a Jazmín. Se enjuagó entera y luego enrolló una toalla a su cuerpo y otra a su pelo.

Se sentó en la taza del váter mientras se secaba. Se puso la ropa interior rápidamente para no hacer esperar a sus padres. Se puso la ropa que eligió. Quitó la toalla de su pelo para después cepillar este y echarse un poco de colonia. Volvió a su habitación para ponerse las nuevas Vans que se compró hace unas semanas. Eran de color amarillas, que hacía juego con la camiseta color amarillo pastel que llevaba. Se puso un poco de rimel en los ojos y un poco de brillo de labios.