Acosado Por Un Psicópata [BL]

Capítulo 17

Drake, al sentir mi cuerpo sobre su espalda, se detuvo y relajo su cuerpo. Alejándose de William que aún estaba en el suelo, dirigiendo su mirada a mi.

—¿Por qué me detienes? Existe la posibilidad de que él sea el culpable de todo esto— su expresión era seria mientras sostenía mis hombros—. No voy a dejar que ninguno de esos dos se acerquen sin saber qué podrían hacer.

Entendía sus palabras, pero no creía que era corrector atacar ciegamente sin saber quién era la persona correcta. Si termina matándolo solo para descubrir que era inocente, no me quiero imaginar como sería.

—¡Basil!—Jack apareció con la mejilla magullada y el labio roto, pero su mirada no mostraba el más mínimo enfado contra Drake, solo preocupación al verme.

William se levantó del suelo y miró con odio a Drake, quien ahora sostenía mi cintura mientras observaba a ambos chicos atentamente.

—Basil, ¿qué está ocurriendo?— preguntó William, intentando acercarse nuevamente solo para ver como Drake me escondía detrás de su espalda.

—Será mejor que lo sueltes ahora, Drake. —Jack sostuvo un cuchillo con sangre en su mano, el mismo que utilizó contra Gilbert—. Si aún quieres mantener tu mano, eso es.

Drake lo miró con ridículo antes de burlarse y responder.

—¿Y que si me niego? ¿Me asesinaras como lo hiciste con ese profesor?

Jack lo miró sin responder. Su mano apretó con fuerza el cuchillo, señalando la ira que estaba sintiendo.

—Basil, esas dos personas son peligrosas. Alejate de ellos y ven conmigo —comentó William, mirando con recelo a ambos chicos.

—Tu mantente alejado de él. No te hagas el inocente, eres alguien que apareció de la nada y se acercó a Basil. Cualquiera se podría dar cuenta que hay algo malo contigo con la forma en la que actúas cerca de él.

—¿Tu crees ser diferente?—Jack apuntó su cuchillo a Drake, mirándolo con desprecio—. Apareces de la nada fingiendo conocer a Basil desde antes cuando es obvio que él no te recuerda. ¿Quién es más sospechoso aquí?

—Lo dice el que asesinó a alguien a sangre fría.

La situación no parecía calmarse y los tres comenzaban a discutir entre ellos, cada uno señalando que el otro era peligroso u sospechoso y diciendo que se alejen de mí.

No sabía qué hacer. Mi padre necesitaba mi ayuda y solo quería salir de este lugar para buscarlo y escapar. No entendía cómo es que terminé así, con un cadáver en mi habitación y tres personas discutiendo como si se fueran a morder a muerte en cualquier momento.

Mi cabeza comenzó a doler cuando sus voces se detuvieron y sentí como fijaban su mirada en mi.

—Basil, ¿confías en mí?—preguntaron al mismo tiempo.

Me quedé en silencio, mirando a las tres personas que mantenían su mirada en mí, esperando mi respuesta.

Tenía que elegir a alguien, y solo tenía una oportunidad.