Acosado Por Un Psicópata [BL]

Final [Drake]

Mi mente ha estado distraída últimamente. Me gustaría pensar que se trataba por el tema del acosador, pero la persona que seguía apareciendo en mi cabeza era Drake.

Al recordar lo que sucedió en la azotea durante la escuela, mis orejas y mejillas enrojecen. Aún cuando no era capaz de recordar las cosas que él mencionaba sobre nuestro pasado, el escucharlo y estar a su lado me llenaban con una familiaridad que me era desconocida.

No logré conciliar el sueño esa noche con todas las preocupaciones en mi cabeza, causando que al día siguiente despertará con unas ojeras y cabeceara durante todo el camino.

Sentía la mirada de Jack a mi lado, pero mis ojos buscaban de manera inconsciente la silueta de Drake.

No logré verlo durante toda la primera y segunda clase del día, y el sueño me invadió durante la tercera clase. Usando la mesa como apoyo, me recosté y cerré los ojos por un momento, intentando no estar a la vista del profesor.

—¡Basil!—La voz de un compañero, el cual no recordaba el nombre, me despertó de mi sueño. La clase ya finalizó sin que me diera cuenta—. El profesor Gilbert te llama a su oficina.

No deseaba ir a encontrarme con Gilbert en estos momentos, pero las cosas se volverían más molestas si ignoraba su llamado ahora. Primero decidí pasar por la azotea de la escuela para ver si tenía suerte de encontrar a Drake, sin tener ningún resultado.

No sabía dónde podía estar, pero siempre podría encontrarme otro día con él, así que fui a la oficina de Gilbert para ver por qué me llamaba.

Al llegar, lo vi ocupado hablando con el director, y no parecía que fueran a terminar pronto. Lo mejor sería volver más tarde, así que fui a dar una vuelta por el pasillo hasta llegar a la salida de la escuela.

Jack ya se fue a casa primero al recibir una llamada de Lisa, y mi paciencia no era alta de por sí como para seguir esperando para ir a la oficina de Gilbert. No quería quedarme otro segundo en la escuela sin hacer nada, por lo que me fui. Era mejor pensar en alguna excusa mañana para dar que seguir esperando.

Durante todo el camino, no pude evitar sentir como alguien me observaba, pero al darme vuelta, nadie estaba presente además de mi.

Intenté ignorar aquel sentimiento hasta llegar a un parque cercano de mi casa, hacía tiempo que no venía y me vendría bien despejar la cabeza un rato.

—¿Hm?

No me percaté de que había alguien más en el parque, su apariencia estaba oculta por una capucha pero podía darme cuenta que se trataba de alguien como de mi edad. Una sensación de deja vu me invadió al verlo sentado en el columpio, como si ya hubiese visto esta escena antes.

Antes de poder descifrar de qué trataba este raro presentimiento, el chico en el columpio se movió, levantando la cabeza y mirando a mi dirección.

En el momento en el que sus ojos rojizos se cruzaron con los míos, un miedo indescriptible me invadió por completo. Era como si todo mi cuerpo y cabeza estuvieran gritando que la persona frente a mi era peligrosa, no lograba comprender porque.

Quería correr, quería alejarme de este lugar de inmediato, pero mis piernas no se movían. Me sentía como si estuviera parado en un lugar completamente frío, congelando mi cuerpo por completo.

El ver al chico moverse de su lugar y acercarse hizo que mi cuerpo retrocediera inconscientemente, pero no logró evitar que se acercara a mi lado.

—¿No vas a sentarte a mi lado esta vez?—murmuró, sin despegar su mirada de mi.

—¿Qué?

No entendía a que se estaba refiriendo, solo quería irme de este lugar lo antes posible pero mi cuerpo se negaba a escucharme. No comprendo porque siento tanto miedo por alguien que recién veo por primera vez.