Capítulo 22

24.5K 2.4K 518
                                    

Sin importar cuánto lo intentara, no podía deshacerme de la cadena en mi pie sin la llave. Mi movilidad estaba limitada hasta la puerta, la cual se encontraba cerrada por fuera.

Lo único que llamó mi atención era el plato de comida y agua que se encontraban en el mesón al lado de la cama. La comida seguía caliente, por lo que no debe de haber pasado mucho tiempo desde que la trajeron. William era la única persona que pudo haberlo hecho.

—¡Maldición!— exclamé, exhausto.

Me acurruque en la cama mientras trataba de calmarme. No tenía otra opción más que esperar por la llegada de William, mi padre aún se encontraba atrapado por él y necesitaba al menos asegurarme de que se encontraba bien. Era lo único que me quedaba, no podía perderlo a él también.

Mi cabeza aún reproducía los últimos momentos de Jack y Drake, quienes murieron a manos de William. Pero la persona que más ocupaba mi mente era Jack, por lo que no pude evitar llorar al recordar la forma en la que su cuerpo quedó tirado sin nadie a su lado.

Pensar en la seguridad y bienestar de mi padre era lo único que podía distraerme.

No sabía cuánto tiempo había pasado cuando escuche como unos pasos se acercaban a la puerta. Al levantar la mirada, vi como William entraba sonriendo con un conejo de peluche en su mano..

—Buenos días, Basil. ¿Dormiste bien?

Lo miré sin darle una respuesta, pero no pareció importarle mientras se acercaba a mi lado. Dejó el conejo junto a los demás peluches en la cama y se sentó, acercando su mano hacia mi rostro.

Aleje su mano de golpe y me aparté de su toque, causando que la cadena resonara por el repentino movimiento.

—¿Te molesta la cadena? No te preocupes, es solo temporal —dijo, jugando con la cadena mientras me miraba—. Tu y yo sabemos que no te quedarás quieto de otra manera, por lo que no tuve más opción que recurrir a esto hasta que te vuelvas un poco más obediente. Espero que lo entiendas.

Su mano se deslizó por la cadena hasta llegar a mi tobillo, acariciándolo suavemente.

—¡Alejate!—grité.

Alejé mi pie de su toque y di una patada sin pensar mucho, planeando aumentar la distancia entre los dos. Sin embargo, nunca esperé que William no se moviera y mi pie terminó golpeando su rostro.

El silencio fue lo único que quedó después de que me percatara de lo que había sucedido. Antes de que pudiera decir algo, un fuerte golpe invadió mi rostro, dejándome mareado y con un sabor metálico en la boca; William me había golpeado.

Mi mejilla comenzó a arder por el golpe, pero no pude hacer nada más que dejar que William agarrara mi rostro y lo moviera para que mirara el suyo, nuestras miradas cruzándose.

—Lo siento, nunca esperé reaccionar de esa manera —acarició mi mejilla, sonriendo—. Estoy un poco molesto por tus recientes acciones, por lo que espero que me perdones. Nunca he querido hacerte daño, Basil.

Acercó su rostro y besó la mejilla que aún ardía por su golpe, como si creyera que con un beso el dolor desaparecería.

—Estoy tan contento, no puedo creer que al fin estemos juntos de esta forma. No sabes lo feliz que estoy, lo feliz que me hace estar a tu lado.

Su mirada cargaba una obsesión y deseo tan grandes que no podía evitar temblar al recibirla. Aquellos ojos, que eran tan hermosos como dos rubíes, los encontraba aterradores. Era como si nunca iba a poder escapar de ellos, hundiéndome cada vez más en el abismo de su tal llamado "amor".

—Basil, eres tan lindo —William acercó su rostro a mi cuello y olfateó, luciendo intoxicado—. Estoy tan, tan feliz que no sabes cuanto deseo poder unir nuestros cuerpos y volvernos uno.

Al terminar sus palabras, sentí como algo duro rozaba mi pierna. Solo para darme cuenta que se trataba del bulto de William, su rostro rojo de la emoción.

—Basil, déjame mostrarte la sinceridad de mi corazón —dijo, sus manos acariciando mi cuerpo. Su rostro se acercó a mi oreja, susurrando—. No necesitas a tu padre ni a nadie más, solo a mi. Soy lo único que tienes.

Lo miré en shock por sus palabras, pero antes de que pudiera preguntar a qué se refería, mis labios fueron sellados por los suyos mientras sus manos se aventuraban por debajo de mi ropa.

Jack... papá... quiero verlos.

Acosado Por Un Psicópata [BL]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora