Capítulo 17

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''Cuan difícil fue poder ver, tomar navajas y abrir mis ojos, que ilusa vida fueron los años que con furor quise sentir eterno, que hiriente me fue la vida, una paliza recibí sin prisas''

  —Fragmento de Ruinas— 

¿Qué pensaba Kaela? A caso estaba loca, no me concentre en las consultas, en mi mente se repetía su nuevo socio tocando su espalda, y su pelo...

Subí a la azotea y comencé a caminar de un lado a otro, para mi sorpresa Liam estaba allí con sus brazos cruzados mirando el cielo, intente devolverme pero la voz de él me hizo quedarme allí.

—El espacio es bastante grande para los dos Byron.

— ¿Sucede algo? —pregunté.

—No, no pasa nada, solo vine a tomar aire y pensar en lo agraciado que soy. —dijo sonriendo.

—Sí, lo eres. —respondí.

—Agradezco todos los días que Dios me dio una nueva oportunidad después del accidente, no tenía muchas probabilidades de sobrevivir, nunca te di las gracias porque estuviste allí en ese momento, así que gracias, empezare a ser más tolerante contigo y mi hermana. —espetó acariciando su barbilla.

Un nudo se formó en mi garganta, si el supiera como están las cosas ahora de seguro me arrojaría de aquí arriba, aunque él no era estúpido debía sospechar algo.

—Aunque para eso debes volver a ganarla, no sé qué paso entre ustedes, sé que algo les pasa, ella no se cortaría el pelo o se endurecería como lo hizo de no ser por una causa, así que campeón juégatela, ahora es que me vas a demostrar si ella merece estar en tu vida o no. —recalcó.

Miró su reloj y se fue con una sonrisa de satisfacción en su rostro, me quedé parado esperando un golpe de parte de él, pero no llego nunca, que cómica la vida, el día que Liam me acepta Kaela se aleja.

Me coloque en el borde poniendo mis manos en la barandillas de metal y miré hacia abajo, apreté con fuerza los barrotes tibios por el sol, Kaela se subió al auto con el maldito idiota con que acababa de verla. No pude soportarlo y baje lo más rápido que pude las escaleras, llegue al parqueo pero era tarde, no había señas del auto, quite el estetoscopio de mi cuello y lo arroje al suelo, escuché como se hacía añicos al caer.

Busque mi auto y me subí en él, mientras conducía comencé a llamar a Kaela, quien me respondió a la quinta llamada.

— ¿Dónde estás Kaela? —Quise saber.

—Ahora no puedo hablar Byron, estoy en una reunión importante. —me dijo tras la línea.

—Te vi salir con el maldito con que andabas te juro que lo voy a matar Kaela. —amenacé.

—Yo no maté a ninguna de las chicas con las que te acostaste mi cielo. —comentó antes de colgar.

Me detuve en el auto y estalle en carcajada, si esto era un maldito sueño tenía que despertar cuanto antes, que se creía Kaela, di una vuelta en u en la siguiente calle y fui directo a la tienda de ella, visualicé a la chica que trabaja con ella y fui a su lado.

— ¿Dónde diablos esta Kaela? —indagué.

—Está haciendo inventarios, le diré que viniste a verla. —dijo soltándose de mi agarre.

Salí para quedarme de piedra, mi novia acaba de llegar y su socio se dirigía a abrirle la puerta, pero ella salió antes de, le brindó una sonrisa. El volvió a subir a su auto y le vi alejarse, Kaela camino hacia su tienda y cruzo por mi lado, hizo de mi como si no me conociera, su perfume se coló entre mis sentidos, un sentimiento de pérdida me invadió, sujete su bolso haciendo que se detenga.

—Suelta mi bolso Byron, si deseas que hablemos lo siento mucho estoy muy ocupada, quizás una de tus chicas deseen servirte, hmm puede ser Veira, oh no ella ya no te volvería a hablar. —mencionó.

Me sorprendió ¿Cómo sabia de Veira? Si apenas cuando tuve roces con ella no tenía mucho tiempo aquí.

—Sé que anda en tu cabeza ¿Cómo ella saber de Veira? Pero es simple éramos amigas en el pasado, de casualidad vino a mi tienda y nos reencontramos, lo mejor paso cuando vio nuestra foto, si sus nervios salieron a flote y ella una de sus cualidades es su sinceridad y transparencia, intento hablar conmigo pero no pude porque me sentí traicionada por ella, cuando debía sentirlo de ti, entendí que ella no tuvo culpa que un maldito como tu llegara a nuestras vidas Byron, así que a ella la perdono y en cuanto a ti puedes perderte. —gritó.

Sus palabras fueron como un puñal en mi corazón,en mi alma muy dentro de mí, solté su bolsa y di un paso hacia ella, intentetocar su rostro pero ella se alejó de mí, creo un muro invisible pero bastantefuerte, tan poderoso que temí no volver a verla, a sentir sus labios,  un abrazo de esos cargados de amor que solo ella sabía dar, de sus moradas coquetas y de niña traviesa.

—Perdóname mi amo. —articule.

 — ¿Me perdonarías si fuese yo? Si me hubieras brindado todo tu apoyo y lo pisoteo así como si nada, recuerda que la confianza se construye paso a paso, se sube a peldaños a veces dura bastante en un mismo escalón, pero se cae tan rápido como baja un ascensor, milésimas de segundos Byron y créeme que te tenía en la luna, pero has caído muy bajo. —manifestó entrando a su tienda.

Pude ver como trataba de disimular las lágrimas en sus ojos, le dolía hacerme esto, pero debía de entenderla, iba a jugármelas hasta el final, pero no permitiría ella me dejara.







Esperen otro capitulo hoy mismo para que sepan que les quiero. Por cierto pobre Byron.



Lujuria Engañosa. [L. Adictiva 2].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora