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Konor, me llamarás así desde este momento.
Tengo 15 años y me hospedo en un hotel de mal vivir. Mis padres me abandonaron cuando tenía a penas 1 año de nacido, un extraño viejo me encontró y me acogió en su hogar.
El anciano era un maldito, siempre me quemaba en la espalda con un cigarro cuando hacía algo mal, me cansé de sus maltratos y a los 13 años decidí escapar y fui a la ciudad (él vivía en una cabaña que estaba en el bosque).
Y para variar, nací con un defecto que supe, desde mis 8 años, sería mi maldición. Yo nunca tuve manos.
Hasta el viejo me dijo que cuando me encontró, yo no los poseía. No sé si fue un accidente o si era genético. No estoy seguro. Es frustrante sentir que algo tan importante te falta y saber que nunca podrás obtenerlo... Pero estoy acostumbrado.
Acabo de salir por comida (por no decir que lo robé). Me dirijo al hotel para... Ay no... Son ellos: Henry, Dylan y Jordan.
Son unos estúpidos que siempre se la paran fumando en la puerta del hotel, y me impiden el paso.
Trataré de entrar sin que me vean... No ha funcionado.
- Oh! Miren quién está aquí?! - ese es Henry, su madre era una prostituta con la cual él cogió, después que su padre se enterara huyó de casa y ahora está aquí.
-Jaja! Pero si es el mocoso sin manos!! - él es Dylan, era un abusador sin talento en la escuela que, con el pasar de los años, se metió en las drogas y se mudó al oscuro y mórbido mundo de la delincuencia, un mundo en el que desgraciadamente yo también estoy incluido.
-Qué pasó mocoso?!!! Quieres entrar al hotel?!!! JA!! MEJOR CHUPA MIS
HUE...!!! - y por último está Jordan. Este en lo personal es el que menos me agrada: Es el más gritón y vulgar del grupo, abandonado por sus padres y violado por el tío que lo criaba, triste pero asqueroso.
Que cómo se todas éstas cosas? Estos idiotas me cuentan sus vidas cada ves que están borrachos. Es increíble como el alcoholismo reduce tus sentidos y tu rigidez, haciéndote más blando y... Tal vez más baboso en el aspecto mental.
Decido calmarme, sin manos y con ellos drogados, es la solución más coherente.
-Chicos, por favor. Siempre terminan golpeándome sin ninguna razón, yo solo quiero ingresar a mi hogar y ahogarme en mis lágrimas mientras me arrincono en posición fetal a maldecir a la vida por este penoso defecto, pueden comprender eso?
Los chicos dejaron de reírse y se observaron entre los tres.
Tal vez no eran tan inútiles, tal vez había conseguido hacerles entender.

No les había hecho entender.
Me golpearon y me quedé tumbado en el suelo.
Frío aquel suelo en el que me hallaba observando bellas nubes sin forma, tratando de imaginarles una.
Que estúpido puedo llegar a ser jeje...
Espera, Qué?
Unos extraños sujetos literalmente cayeron del cielo, aterrizan sin provocar destrozos o tumultos.
-Qu-Quiénes son ustedes? - con suerte mis labios pueden pronunciar las palabras.
-Guarda silencio. - me responde el sujeto de la derecha, mientras saca una especie de dispositivo, muy parecido al de la película "Hombres de Negro". Me ha cegado, empiezo a tener sueño... Creo que mejor... Descansaré un poco.

El Poder de la Esperanza (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora