«veintidós»

2.3K 196 12
                                    

 —Es una depresión constante esto

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

 —Es una depresión constante esto. —dice Cami sentada en mi cama.

—Quiero volver, la puta madre. —llora Lucía abrazada a su mochila de Travel.

—Yo todavía sigo sin caer que Lola se comió a más pibes que vos. —ríe Nati.

—Seguro es por las tetas —contesta Lucy—. Ya les dije, cuando me case con mi sugar daddy me voy a hacer las gomas.

—¿Tu sugar daddy Midel? —sonrío.

—Uh, ni me hablés de ese. Termina con la novia, me tira los perros, y después me dice que mejor no. Es un gil.

—Bue, por lo menos te va mejor que a mí.

—¿Seguís peleada con Damián?

—Hace un mes que no hablo con él. Ya me chupa un huevo. Onda, me sigue gustando, pero ya fue, no voy a andar colgada de él como una pelotuda cuando me trató para el orto la última vez que hablamos.

Dejo el tema ahí para no ponerme mal, y empezamos a charlar de otras cosas.

Cómo extraño Bariloche, la puta madre. No soy una mina que ame la joda pero ME ENCANTÓ. Encima tuve el re levante, no sé qué onda. Deben ser las tetas como dice Lucy ahre.

Las chicas se van y yo le aviso a mamá que me voy a la casa de Mauro, donde están Ecko y Lit también.

—¡BEBÉ! —grita Duki en cuanto me ve, abrazándome y levantándome del suelo.

—Hola mi gordito hermoso —digo dándole un re beso en el cachete—. ¿Me extrañaste?

—La vida sin vos es una tortura, bebita.

—Salí, wacho, dejame a mí —dice Mati empujándolo a Duki y abrazándome—. Menos mal que lo viniste a ver, sino iba a estar más insoportable que antes.

—No sabe' lo que era; inbancable. —se ríe Lit.

—Callate, siome —le pega Mauro—. Contame, ¿cómo la pasaste? ¿Te trataron bien?

—Sí, re. La comida era un poco mierda pero la pasé re piola, más que nada por la nieve y por los boliches. Estuvo buenísimo, man. Quiero volveeeer —digo con un llanto falso—. ¿Y ustedes, qué onda? Vi que ganaste la última fecha del Quinto —le hablo a Lit—. Bien ahí, putita.

—Obeo' mame, si soy un crack. —me responde.

—Ah, claro, él gana el Quinto y lo aplaudís, pero yo me voy de gira y no me decís nada. —dice Duki cruzándose de brazos.

—Felicitaciones, bobo —le respondo dándole un beso—. ¿Y vos, Mati, todo bien? ¿Cómo anda Ro?

—Bien, la semana que viene tiene el ensayo general para la exposición de danza y anda re loca —se ríe—. No sabés, el otro día...

Para de hablar cuando suena el timbre; lo miro a Duki a ver si esperaba a alguien más y él niega con la cabeza. Abre la puerta y entra Damián con el labio roto y la remera llena de sangre.

*apa apa apa

weno me voy 

nos vemos mañana

si es que no me da paja ahre

tentación ❀ dam Donde viven las historias. Descúbrelo ahora