Capitulo 4.

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JUSTIN BIEBER.

Me muevo nervioso en mi asiento cuando aparco en la puerta del hospital. Rebecca me mira y luego sale del coche tan rápido que incluso me sorprendo dado a lo alto que está el coche para su tamaño.

Quito las llaves del contacto y me bajo guardándolas en mi bolsillo después de cerrar el coche. Ella va un poco por delante de mí así que soy testigo de cómo saluda a casi todo el personal del hospital mientras nos dirigimos a la habitación de su hermano. Me regala una sonrisa cuando estamos en el ascensor y yo creo que estoy sudando dentro de esta sudadera que ahora parece ser cinco tallas más pequeñas.

Las puertas del ascensor se abren y respiro aliviado mientras salgo casi empujando a las tres personas que tengo delante de mí. Pero entonces Rebecca tira de la tela de mi sudadera y me hace girar hacia la izquierda.

-Hola señorita Evans.-Una señora de unos setenta años hace que ella se pare a saludarle y besa su mejilla. Luego busca algo en su bolso y le entrega lo que parece ser una pedazo de periódico.

-Aquí tiene señora Aurora, como cada sábado.- La señora toma con admiración el pedazo de periódico y captura el cuerpo de Becca en un abrazo.

-Espero que tu hermano se encuentre mejor hoy.- Y con eso ambas se dan una sonrisa y seguimos andando por el pasillo.

-¿Qué le has dado?-Pregunto curioso mientras me paso el dedo pulgar por la boca.

-Cada semana su marido le dedica unas palabras en el periódico de la ciudad y yo se lo recorto para que pueda leerlas.- Se detiene delante de una puerta.- Él está en una residencia de ancianos y no puede venir a visitarla. 

Asiento con la cabeza mientras miro los ojos de la persona que tengo delante de mí y me doy cuenta de el increíble corazón que esconde bajo ese cuerpo tan pequeño.

-¿Me estás escuchando?.- Me dice mientras me pasa las manos por delante de los ojos.

-Si perdona.

-Digo que si estás preparado.-Apunta la puerta con su cabeza y asiento. Así que ella después de mirarme por lo que parecen unos diez segundo, se gira y abre la puerta entrando en ella.

Algo comienza a moverse en mi interior y después de respirar hondo y tragar saliva, entro.

Becca está besando la mejilla de Eliot y me rasco la nuca mientras le veo con una infinidad de cables por todo el cuerpo. Me acerco hasta él y noto como su rostro no muestra ni color ni calor y algo dentro de mí se arrepiente de haber venido y haber capturado esta imagen para siempre.

-Ha venido Justin, pero creo que se le ha comido la lengua el gato.- Becca habla con Eliot como si este fuera a salir del coma y contestarla.- Los doctores dicen que es bueno hablarle.

Supongo que se ha dado cuenta de que la he mirado como si estuviera loca, dado que ahora está con la cabeza agachada jugando con las mangas de su sudadera, la que en realidad es mía.

-Hey bro.-Digo está vez dirigiéndome a Eliot y ella levanta la cabeza con una sonrisa.-Este pequeño incordio me ha hecho traerla para ver un partido, así que  veámoslo.

Becca enciende la televisión y se acomoda en la cama junto a su hermano. El partido de los Toronto Maples contra los Red Wings comienza y poco después una enfermera entra con unas bolsas de gomilas y patatas y un par de refrescos.

-Disfrutar del partido chicos.-Dice con una sonrisa mientras deja las cosas sobre la mesa que hay detrás del sillón donde estoy sentado y me sorprendo ante ese gesto.

Because of you.  [JB]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora