NOS USAMOS.
Nos usamos. Nos quisimos. Nos destrozamos. Y nunca nos amamos.
Tú querías dejar de pensarla, mientras yo buscaba olvidarla. Ambas estábamos rotas y estábamos dispuestas a fingir amor, ambas buscábamos llenar un poco aquel hueco doloroso que nos dejaron en nuestro pequeño y demasiado extraño corazón, buscábamos detener las lágrimas y lo buscamos por el camino fácil.
Pudimos enfrentarlo, pero le dimos la espalda y fingimos querernos. Fingimos estar bien. Fingimos olvidar. Fingimos superar. Que tontas, ¿no crees?
No sé si ya lo olvidaste.
No sé si ya no me lees.
No sé siquiera qué hago escribiéndote.
Pero por alguna extraña razón me encontré con tus palabras, volviste a mi mente como un recuerdo fugaz y quise escribirte. Me di cuenta que te extraño pero que ya no te amo, creo que nunca lo hice... ¡que confusión!
Ambas nos usamos.
Pero quiero pensar que ambas nos queríamos, espero haya sido así.
Hace muchísimo tu nombre no rondaba mi mente. Es tan curioso que un domingo por la tarde hayas vuelto así sin más.
He cambiado, pero si volvieses rota, como aquella vez, yo volvería a querer ayudarte..., sabiendo la clase de persona que eres, sabiendo que todo es por momentos, aún buscaría ayudarte.
No sé si soy muy buena persona o muy idiota.
En fin.
Sólo quería hacerte saber que pensé en ti sin sentir odio ni amor. Ni siquiera sentir.
