Obsesión Mórbida. [Dross]

Capítulo 8°

Nota: Éste capítulo es el 45 y final de "Amor Perturbador" pero narrado por Samantha. Ya casi llegamos a la tan esperada explicación del epílogo ;) [+18]

"Nuestra primera vez"

Después de aquella ocasión en la que Briana provocó inestabilidad en nuestra relación, no habíamos vuelto a tener problemas... Hasta hace poco.

En las últimas semanas, Ángel llega tarde casi todos los días, eso significa que casi no lo veo, pues yo también estoy ocupada en exámenes finales de curso y me siento muy jodida, me siento cansada, estresada y agobiada, me gustaría llegar a casa y tener a mi novio para olvidarme de todo y de todos con solo mirarle, besarlo, abrazarlo o simplemente estar con él, con tan solo dormir abrazada a él, me podía sentir realmente repuesta para el siguiente día, pero estando así, es imposible, porque se va muy temprano y regresa muy tarde, casi nunca está y eso me molesta, me pone de malas, pues recuerdo muy bien que para El festival de la blasfemia no pasaba nada de ésto.

Para colmo, últimamente estamos discutiendo mucho, la entrometida de Georgina le está llamando más de lo normal, los pocos minutos en los que estoy con él, esa mujer los arruina, llamándole para cosas que no son de trabajo, le pregunta cómo está, qué hace y cómo la está pasando, eso no lo debe hacer una editora profesional y me molesta, pero a Ángel no, me dice que no piense mal y que confíe en él, pero me es imposible con esa mujer teniéndolo 20 horas de las 24 que trae el día, todos los días.

Éste sábado vamos a celebrar que cumplimos un año y cinco meses, ya que no hemos podido celebrar las demás fechas, se supone saldremos a almorzar a las tres de la tarde.

Son las 4:30 y Ángel no llega.

Al fin, cuando dan las 5:00 me dice que ya está llegando a casa, escucho la puerta de entrada y me quedo sentada en el sofá de la sala de estar.

-¿Nos vamos?- pregunta como si nada entrando a la sala.

-¿En serio Ángel? ¿Es lo único que me dirás después de llegar una hora y media tarde?- él suspiró agotado.

-Samantha... estaba en una junta de trabajo y Georgina...-

-No menciones a esa mujer más, no la soporto ¡No tolero que pases más tiempo con ella que conmigo!- le reclamé alzando mi tono de voz. Nunca le había hablado de ésta manera.

-Samantha, es por el trabajo, el libro ya está casi listo y... ¿Qué haces?- me pregunto al ver que me ponía de pie y metía algunas cosas a mi bolso -¿En serio vas a enojarte conmigo?- ignoré su pregunta y seguí recogiendo mis cosas -¡Bien! Es increíble que te den celos mi editora- me contestó con ademanes, ahora su voz sonaba molesta.

-Es la décima vez en dos semanas que discutimos por ella y ¿Sabes...? Me estoy cansando de ésto Ángel- tomé mi bolso ya lista y caminé a la salida.

-¿A dónde vas?- me detuve al escuchar su pregunta.

-Ni yo sé a dónde iré, solo quiero estar sola- contesté en voz baja.

Cerré de un portazo la casa y sentí mi corazón estrujarse de tristeza. Estaba perdiendo a Ángel y no era por culpa de Briana.

Briana.

Desde aquellas fotos, la desconfianza que le tengo a Ángel fue sembrada y por eso le hago reclamos absurdos con su editora, aunque ella también me da motivos, él no, él me quiere y sería incapaz de lo que le acuso, soy una estúpida.