Minutos antes...
Eric Holder sale de la cocina de aquella casa, donde había hablado con Katherine minutos atrás. Jamás se imaginó ver aquella escena, con ella bebiendo. La imagen que tenía de la pelinegra era de una joven prudente y obsesiva en cuanto a las reglas. Pero, después de todo, se dijo, Katherine es una adolescente. Al igual que él. Aunque a pesar de ser de la misma edad, sus vidas son opuestas.
Ella no tiene que pasar por un estricto régimen de control como él, no vive en su ciudad. Eric mira hacia atrás, añorando aquella vida que no puede tener, una sin peligrosy sin más responsabilidades que la de estudiar.
El rubio camina hacia sus hermanos. Jonathan mira fijamente a la multitud, escaneado a todos desde que llegó. Eric coloca una mano en su hombro.
—Ey, relájate. Es poco probable que encontremos al elegido aquí.
—La primera lección de un guerrero es no subestimar.
—¿Y? —Jonathan lo mira seriamente— Vamos, sólo por hoy. Diviértete.
—No creo poder con Alex allá arriba.
—¿Qué?
Y ambos alzan la visita. Alex Holder está de pie en el escenario, y al parecer bebió casi tanto como Katherine. Aunque ella más. Le quita el micrófono a dos de los chicos que cantan en vivo y tira uno al suelo. Un molesto ruido no tarda en llegar.
—Gracias por su atención —sonríe— Bien, tengo un aviso que dar. Y más les vale hacerme caso o... bueno, lo descubrirán por sí mismos.
—¡Alex! —grita Jonathan— ¡Baja de ahí, maldito!
Este lo ignora.
—¡Ahora todos! ¡Vamos a bailar la Macarena!
Y se agacha hacia una bocina para poner la música. Esta comienza a sonar.
—¡Dale a tu cuerpo alegría Macarena! Ehhh ¡..Eh, Macarena! ¡Ahh! —canta mientras baila. Algunos lo siguen y otros no— ¡Que bailen, carajo! ¡Dale a tu cuerpo alegría...! ¡Eric!
El rubio le quita el micrófono y mira a todos. Patea la bocina y la música para.
—Lo que en realidad quería decir mi hermano era... —suelta un suspiro y comienza a recirar— Pro in ordine Archangelorum, peto ut magicae lapis bellator munera.
Mira a todos lados y las personas lo miran confusos. No entendieron nada. Aparta el micrófono de su boca y mira a sus hermanos.
—No funcionó. El elegido no está aquí. ¿Están todo, cierto?
—Si. Incluso Nicolás al lado de Fer, pero falta...
Y un grito parte el silencio. Los hermanos se miran preocupados.
—Rápido, ¿quién falta? —habla Eric por el micrófono.
—Katherine —ruje la multitud.
Y los Holder corren hacia la cocina, de donde proviene el grito. Miran a todos lados, confusos, hasta que ven humo rojo salir por debajo de la puerta. Corren hacia ella. La empujan y patean pero esta no cede. Escuchan ruidos, gritos y palabras distorsionadas, hasta que caen al otro lado.
Katherine está con un cuchillo apuntando hacia un chico, se le ve feroz y decidida. Como una guerrera, una vencedora. Y cuando miran a la derecha, ven a quién apunta su amiga, hacia un chico que los mira sorprendido. Sus ojos son rojos, advierten. No es un chico, sino un demonio. El cual se avalanza hacia Katherine y ésta, le clava el cuchillo en un ojo.
Y es entonces cuando Eric Holder sale de su esturpor y le tira el micrófono con todas sus fuerzas. Y lo demás lo ve borroso, como un sueño. Hasta que cae en la realidad.
—¡Llévate a Katherine de aquí!
Y eso hace, mientras la tranquiliza e intenta que ésta se mueva de su lugar. Hasta que ambos corren hacia la multitud, lejos del demonio de ojos rojos, lejos de Victor.
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N/A:
¡Hey! ¿Qué les pareció esta perspectiva de los hermanos Holder?Tardé solo unas horas en hacerlo así que no esperen demasiado.
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Guerreros: Las Piedras Del Ángel
FantasyHace miles de años, cuando el hombre dió sus primeros pasos en la tierra, se les encomendó a los arcángeles cuidar de éstos por orden del creador. Cuando aquellas criaturas celestiales bajaron a la tierra, el suelo en el que cayeron quedó bendecido...