Katherine despierta en su habitación. Busca por todos lados, desesperada, a su atacante. Se pregunta el cómo llegó ahí si antes estaba en el suelo, cerca de la biblioteca. Atribuye aquello a su locura y se prepara para ir a clases.
«Demonio» la palabra resuena en su cabeza, incesante. Recuerda haber dicho que su atacante era uno de ellos, y también recuerda que el mismo lo confirmó. Pero no puede serlo. Es sólo una persona común y corriente que bebió demasiado y la atacó. Solo eso.
Cuando Katherine se acerca al salón es interceptada por Nico. Él toma a la chica por los hombros y la empuja suavemente por donde venía.
—Hola. Yo... quería decirte algo.
—Dime.
—No quiero que tú y Fer hablen con los Holder. Son... peligrosos. No los conocemos, Katherine. No seas su amiga.
—¿Y tú si los conoces? Mira, Nico, no conocemos a más de la mitad de nuestros compañeros pero aquí estamos y no nos han hecho nada. No soy amiga de los Holder, solo soy amable con ellos.
Y una vez dicho ésto, Katherine regresa a su salón. Está algo fastidiada de la actitud de Nico últimamente. Ella cree que tiene algo contra los Holder, que los vió hacer algo que Nico desaprueba, pero cuando pregunta, éste evade el tema.
Lleva tiempo advirtiéndole sobre los tres chicos, pero Katherine y su espíritu rebelde surgieron. A pesar de la advertencia de su amigo, la chica seguirá hablando con los hermanos.
Ella está harta de que le digan que hacer
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Guerreros: Las Piedras Del Ángel
FantasyHace miles de años, cuando el hombre dió sus primeros pasos en la tierra, se les encomendó a los arcángeles cuidar de éstos por orden del creador. Cuando aquellas criaturas celestiales bajaron a la tierra, el suelo en el que cayeron quedó bendecido...