Pues nada, a discurrir 😂.Bakugou le aplicaba algunas medicinas a su dragón tras la dura batalla que habían vivido horas antes. Una vez recuperado el aliento suficiente como para poder organizarse, habían llegado a su cueva, donde comenzarían a ponerse mejor.
Aquellos vendajes no servían de mucho sobre las robustas escamas que cubrían, tiñendo de rubís, la piel del animal mítico monstruoso que allí había acabado, pero aún así era mejor que nada.
Aunque no quisiera admitirlo, ese dragón era su única compañía durante las frías lluvias de otoño, las escalofriantes noches de invierno, el calor intenso de algunos veranos y durante la tranquilidad primaveral, era una gran parte de su vida.
No podía dejarlo empeorar por haberlo protegido y, aunque eso significara gastar todos sus remedios curativos en él, lo haría sin dudarlo, así como estaba haciendo entonces.
Su corazón bombeaba fuerte la sangre a su cabeza, que no dejaba de latir por la presión y el dolor que sentía después de la pelea que había tenido lugar en el exterior.
—Tch, si tan sólo no fueras tan grande y pudieras curarte sólo... —Mencionó a modo de comentario, aunque fuera despectivo, como hacía siempre Bakugou.
Aquella enorme bestia se retorció con mirada apenada, semejando ser un tierno peluche triste. Encogiéndose dentro de aquel agujero en el que ambos se encontraban, tiró con sus grandes fauces de una de las vendas y se la tendió a su dueño mientras con la afilada lengua lamía la parte destapada en un intento por frenar la salida de la sangre.
Katsuki se sintió mal ante aquel cariñoso gesto, se frotó las sienes con ambas manos para volver a enrollar a su querido amigo segundos más tarde.
—No seas así, se supone que eres un fiero dragón... —Le dijo aún molesto Bakugou.
—Creo que eso te pegaría más a ti... —Aquella voz puso en alerta al que se creía el único con la capacidad de articular palabras coherentes en aquel lugar.
No pudo hacer más que quedarse en tensión hasta que la voz volvió a aclarar las cosas.
—No hace falta que te asustes, soy yo. —Expresó más desconcertado de lo que debería Kirishima, depositando una de sus garras en el hombro de su compañero mientras poco a poco iba volviéndose un fuerte brazo, que lo rodeaba afectivamente.
—¡¿Pero qué demonios?! ¡Se supone que eres una puta bestia! —Gritó alejándose el rubio.
—Awch... Blasty, antes me querías más. —Dijo haciéndose el dramático. —¿Debería volver a mi otra forma?
—¿Qué? No... —Expresó, sin querer y casi sin aliento, su sorpresa.
La verdad es que estaba bien aquel nuevo cuerpo que mostraba, si tan si quiera hubiera podido evitar las cosas que pasaron por su mente no mostraría aquel sonrojo tan evidente que cubría sus pómulos.
—¡Oh! ¡¿Ahora tú te volverás un dragón?!
—¡¿Qué mierdas dices?! —Preguntó aún nervioso el chico.
—Es que... Te estabas volviendo rojo como yo... —Dijo con ojos tiernos una vez más Kirishima.
—Cállate, es por la sangre que pierdo...
—¿Pero... Entonces no te volverías pálido? —Inquirió curioso aún el joven.
—¡¿Tú no eras un dragón que no sabía nada?!
—Aprendo rápido. —Contestó orgulloso el pelirrojo.
—Bueno, calla y dame las vendas que te sobren, si no quieres que muera desangrado aquí mismo.
—¡Oh! ¡Claro que no, ten! —Le dijo sacándose gran parte de los excedentes de sus brazos y piernas, ahora mucho más pequeños que cuando era un dragón.
Tras una larga conversación tratando de aclarar el porqué del cambio del chico, Bakugou había organizado sus ideas, aunque aún se sentía extraño.
Aquel monstruo con el que había compartido tantos momentos, con el que había dormido y comido, incluso se había bañado con él en un río y resulta que era... ¿Una persona como él?
—Pudiste volverte así antes...
—Pero... Entonces no habría conocido tantos detalles tuyos como sé. Probablemente me hubieras echado a la calle en menos de dos minutos.
—Tsk, vaya imagen tienes de mí. Ahora no te he echado...
—Eso es porque me tienes cariño.
—No te tengo cariño. —Interrumpió el rubio bruscamente y levantándose para salir de la cueva.
—Ah... Entonces, supongo que debería irme.
—No. —Negó seco. —¿Acaso eres estúpido?
—Has dicho que no me...
—La respuesta era sí, eres estúpido. Anda, ponte algo y vamos a cazar para alimentarnos, creo que voy a desfallecer si no comemos nada pronto. —Sentenció para salir intentando no voltear la vista y tratando de centrarse en la labor que ahora tenía por delante.
Bueno, ya tocaba actualizar 😂. Mañana subo capítulo también :3c.
(Y en TodoMomo si me da tiempo).
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Kiribaku || ONE-SHOTS || .
Fanfiction⚫Fanfics Bakushima/Kiribaku. Los personajes no me pertenecen.