ASESINA ✔

capítulo 31: ¡ERES UNA ZORRA!

Narra Dylan.

Mi corazón latía fuertemente, y sonreía emocionado, por fin era novio de Beth, yo decidí pedirle que sea mi novia aquí en el instituto por que quería que todos supieran que ella es mí novia y yo soy su novio, así nadie nos molestara o algo para después decir "perdón, no sabía que eran novios" por suerte el director nos dio el permiso de hacer esto, ya que Beth y yo habíamos sacado buena calificación en la última actividad que había.

Mientras me besaba con Beth, la abrazaba y acariciaba su cabello con una mano, ya que con la otra mano la sujetaba por que ella tenía sus piernas al rededor de mi cadera, al separarnos ella me sonrió, me dijo muchas veces que...todas sus sonrisas eran falsas. Pero que conmigo y los chicos eso había cambiado, y estoy seguro de que esta sonrisa que me está dedicando es una de las pocas sonrisas verdaderas que ha mostrado en mucho tiempo.

Tocó la campana y todos entramos a clases, los chicos que estaban maquillados ya se habían ido, fuimos al salón con las manos entrelazadas, dejamos la caja que había preparado con los chicos en en dirección, las clases pasaron normales, en receso la mayoría de los estudiantes se acercaban a Beth con regalos o solo para felicitarla.

Le tenía una sorpresa a Beth para esta tarde y noche, después de clases la llevaría a almorzar, luego la llevaría a mí casa ya que mí madre quería conocerla y quería felicitarla, ahí quizá juguemos Xbox mientras pensamos a donde ir en la tarde, ya en la noche la llevaré al parque de diversiones, después de eso le tengo preparada una cena romántica en uno de sus lugares favoritos, la playa.

Todo estaba saliendo perfectamente hasta el momento, solo esperaba que siga así de perfecto hasta la noche, ella estaba sentada a mi lado, no dejaba de sonreír, lo cual me gustaba, los chicos hacían bromas de que ella ya estaba vieja en especial Connor.

-Estas mucho mas vieja que nosotros.

-Connor tu tienes 19-dijo obvia, todos reímos-tu eres el más viejo del grupo, así que a mí no me critiques.

-Sí tengo 19, pero tú eres la más vieja.

-¿Por qué?

-Por que dicen que las mujeres maduran más rápido que los hombres.

-Al parecer sí, por que tú no dejas de hacer tu berrinche.

-No soy un bebé para hacer berrinche.

-Dylan, ¿tienes pañales para este bebé?-todos nos reímos a carcajadas, pero Beth estaba seria, lo cual nos hacía reír mucho más.

-No soy un bebé-protestó Connor.

-Bebé.

-No lo soy.

-Entonces eres un viejo.

-Tampoco.

-Bebé llorón.

Connor se rindió y optó por reír junto con nosotros, todo estaba tranquilo cuando de pronto alguien jaló el cabello de Beth haciendo que caiga sentada de un movimiento brusco, rápidamente me levanté, ella estaba molesta, se notaba en su cara, al ver a la persona que había es me preocupé bastante, al igual que los chicos.

-Mierda-dijo Beth.

-Estúpida, ¿creíste que no te daría tu regalo de cumpleaños?-dijo Michelle sarcástica.

-Suéltame-Beth estaba muy molesta, ya empezaba a conocerla y sabía perfectamente que si alguien no las separaba, habrá sangre derramada en todo el suelo, y no será de mi novia.

-¿O que?-dijo Michelle desafiante.

-Es la última vez que te pido por las buenas que me sueltes, SUÉLTAME, AHORA.

-Yo creo que no...- Beth suspiró... Oh no.

Beth pasó su brazo al rededor de la pierna derecha de Michelle y de un movimiento rápido la hizo caer, al mismo tiempo soltó el cabello de Beth, ella se levantó de un salto y se quedó mirando a Michelle quien sujetaba su cabeza con una mano y la otra la tenía en la espalda, me impresioné al ver que Beth no hacía nada más que observar como Michelle se retorcía de dolor, después de unos pocos minutos, Michelle se levantó del suelo, Beth no le quitaba la mirada de los ojos.

Parecía que Michelle ya se iba por que comenzó a caminar pero al pasar por mí lado ella solo se ganó una excusa más para terminar muerta, Michelle me besó.

Narra Beth.

Cuando la hice caer esperaba a que se levante y que ella actué para poder defenderme, al levantase ella solo me miró, yo no despegaba mí mirada de sus ojos, me dio una última mirada y comenzó a caminar, pero en el momento en que pasaba al lado de Dylan, lo tomó del cuello de su camiseta y sin más, lo besó.

Maldita mal parida.

Dylan estaba paralizado, pero los labios de esa zorra no duraron ni un minuto sobre los de Nash ya que él la empujó y bruscamente hacia mí, miré a Dylan y él tenía los ojos abiertos de par en par, cuando Michelle estuvo cerca de mí, pasé mi brazo derecho por su cuello y con mi mano izquierda sujeté mi brazo de tal manera que comenzaba a asfixiarla, varios estudiantes intentaban alejarme para que la soltara pero yo no lo haría, Dylan me miró asustado, aún no quería matarla, la haría sufrir por puta, la solté y ella cayó al suelo y comenzó a toser, puso una mano en su garganta y la otra en el suelo.

Esta es mas dramática que Blanca Nieves.

-¿Que te sucede?-preguntó.

-Eso te pasa por puta.

-Dylan se acostará conmigo tarde o temprano-dijo levantándose.

Yo jugaba con el anillo que tenía, ese anillo tenía un pequeño diamante que sobresalía, volqué mí anillo, haciendo que el diamante quede en mi palma.

-Repite lo que dijiste-pedí, estaba actuando tranquila por que aquí no podía matarla.

-Dylan y todos tus amigos tarde o temprano se acostarán con...-no la dejé terminar ya que le dí una cachetada.

Como tenía el diamante en la palma de mí mano, al darle la cachetada su mejilla comenzó a sangrar, sonreí victoriosa, pero sin mostrar los dientes, tenía una sonrisa algo...psicópata, ella posó su mano en la mejilla, se tocó la herida y miró su mano, al ver sangre se enfureció.

-¡ERES UNA ZORRA!

-No me llamo Michelle.

Gruñó y saltó a mí, haciéndome caer al suelo, Dylan intentaba separarnos, pero lo único que quería era sacar mí cuchillo y clavárselo en el abdomen y hacerla sufrir, y eso era lo que haría.