Capitulo 7.

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Nos sentamos en un banco mientras Jesús hablaba por teléfono.

- ¿Que tal te ha parecido mi hermano? - dijo Dani rompiendo el hielo.

- Un chico muy cariñoso y muy guapo, como tú. Sois iguales.

- No somos iguales eh. - dijo gruñón

- Fisicamente si, interiormente aun no lo se.

- Cuando nos conozcas te darás cuenta fácilmente.

- Pues... me voy en 14 días - dije con cara de suspense.

- Ahora que he conocido a alguien como tú, no quiero perderte - dijo muy romantico.

- Eso se lo dirás a todas las chicas, ami no me sirve chaval.

- Las demás chicas no son como tú.

- Porque yo soy diferente.

- Laura, tu eres especial.

Esas palabras era lo único que me hacía dejarme llevar en esos momentos. Era mi debilidad.

En ese instante noté que Dani me gustaba, que había sido todo demasiado rápido porque con cada cosa que me decía me gustaba mas. Pero no iba a hacer nada, pasaría las vacaciones con ellos como amigos y luego volvería a Madrid y me acabaría olvidando de él.

Entonces llegó Jesús.

- ¿Interrumpo algo?

- No, solo estabamos hablando - dije haciendole un sitio en el banco.

- ¿Con quien hablabas? - pregunto Dani.

- Con Maria. - dijo sonrojandose al pronunciar su nombre.

- ¿Maria? - pregunté sin saber quien era.

- Maria es su novia - me aclaró Dani.

- Con razón trae esa sonrisilla. Pues haber si me la presentas, ¿no? - dije pícara.

- Cuando quieras. Seguro que os caeis genial.

- ¿Cuanto llevais? - pregunté curiosa.

- 5 meses hacemos mañana, asi que pasaré el día con ella.

- Me alegro un montón, que bonito cuanto 'love'. - Reí.

Jesús empezó a reirse y a ponerse colorado aún más de lo que ya estaba.

- Mi hermano está hecho todo un romantico y es hablar de Maria y no dejar de sonreir - dijo Dani.

En ese momento Jesús tenía una cara de felicidad que no se la quitaba nadie.

- Y tu Dani, ¿que tal en el amor?

- Bueno, no tengo novia...

- Pues sera por que no quieras.

Dani rio y me miro con esos ojitos que me mataban.

- A mi hermano eso de tener una relación seria no le va. Es más de lios - aclaro Jesús.

- Bueno la verdad es que aún no he tenido a nadie asi que me guste tanto como para tener una relación seria - dijo Dani justificandose.

Dani sabía mi historia, asi que antes de que Jesús me preguntase habló.

- Ahora me gusta una chica... - dijo Dani tocandose la nuca.

Una señal del destino. (Jesús y Daniel)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora