–¿Alex?
–Lárgate
Alex guardo todo dentro de la caja fuerte y me empujo en dirección a la salida de su habitación cerrando la puerta detrás de mí con brusquedad. <<Necesitara un tiempo a solas>> creí pero después escuche sollozos adentro de aquella habitación.
Al día siguiente Alex salió de su habitación con los ojos rojos e hinchados. Al ver que estaba ahí desvió su irada rápidamente y se sirvió el desayuno que le había dejado. No me dirigió la palabra.
Cuando regrese de cenar afuera vi a Alex con una caja en sus manos sentado en mi cama/sillón esperándome.
–Tenemos que hablar Luis
–¿De qué? ¿De lo que paso la noche en que te emborrachaste o de esa caja en tus manos?
Inesperadamente Alex se rio de lo que dije. Al ver esa sonrisa sentí otra vez mi corazón latir a toda velocidad.
–Sigues siendo el bromista de siempre... del que me enamore
–Paremos un poco todo, me estoy perdiendo en esta caverna, explíquese por favor señor melancólico
–Lo recuerdo todo. Luis, tu y yo actualmente somos pareja
–¿Qué?
–Nos amamos, el día del accidente trataste de salvarme poniéndote en el lado del copiloto recibiendo el mayor impacto. Por eso yo salí no tan grave como vos
–¿Te salve?
–Si –Alex no pudo contener las lagrimas y se puso a llorar –, si no fuera por mi tu recordarías todo
Me senté a lado de él y apoye mi mano en su hombro para consolarlo.
El comenzó a mostrarme lo que había adentro de la caja mientras me contaba nuestro pasado. Una foto donde estábamos en un parque de diversiones con las chicas me dijo que ese día fue cuando me declare y comenzamos a salir. Otra foto era con una chica, el y yo, fue cuando descubrió mis gustos y no me rechazo. Esa caja estaba llena de regalos, fotos, detalles, papeles escritos. Todo me lo explico él. Lo que tuvimos que pasar para llegar a ser felices. Dayana. Roseline. Julieta. Fernanda. Benjamín. Tatiana. Sofía. Dave. Todos con los que nos cruzamos. Absolutamente todos.
Alex me tomo de las manos mientras lloraba y me contaba cosas íntimas sobre mí que la sabia, solamente él. Me puse a llorar con él mientras agachaba la cabeza.
–Amor yo...
–No Alex, no digas más, no quiero oír más
–Luis por favor
–Es injusto, es tan injusto que no recuerde nada, que me cuentes todo eso y no recuerde nada, absolutamente nada
–Luis calma
–¡¿Cómo quieres que me calme?! ¡Me volví a enamorar de ti, Alex, pero no puedo recordar nada! ¡No entendía porque sentía esto hacia ti si ni te conocía! ¿Acaso sabes cómo me sentía? No sabía qué hacer y me lo calle. Cuando tuve sexo con vos se sintió tan nostálgico y tan doloroso, ¿acaso puedes saber cómo me sentí al no saber porque me sentía así?
–Claro que sí, yo también me sentí así, Luis yo te amo y sé que podrás recordar
–¿Cómo puedes asegurarme eso? ¡¿Cómo puedes hacerlo?! ¡¿Cómo puedes asegurar que podre recordar las cosas que pase con la persona que amo?!
–¡Porque yo te ayudare! ¡Si lo hacemos juntos estoy seguro que recordaras!
–¡¿Y si no?! ¡¿Qué harás?!
–¡Crearemos nuevos recuerdos! ¡Si no puedes recordar entonces crearemos nuevos recuerdos!
–¿Puedes prometer eso?
–Luis, te lo prometo porque te amo
–Alex...
Me abrace con Alex, con mi novio, con la persona que amo. Nos miramos fijamente y nos besamos. Las lágrimas caían en nuestras mejillas. Era un beso nostálgico. Era un beso hermoso. Era un beso que me iba a ayudar a recordad. Era un beso de mi amado.
Esa noche y todos los días Alex me ayudaba a recordar pero lo que él no sabía era que todo era inútil. Porque el único recuerdo que tengo, el único recuerdo que siempre tuve desde que desperté del hospital. Era que nunca recordaría nada a cambio de mi vida. Lo malo es que no recuerdo porque desee vivir a cambio de no recordar pero con Alex a mi lado comienzo a sospechar la razón.
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No importa lo que digan los demás 2 [CORRECCIÓN]
RomanceSi no viste "No importa lo que digan los demás" te recomiendo que leas primero esa historia Esta historia ya no es sobre nuestra parejita de Julieta y Fernanda, ahora se hablara de Alex y Luis porque, como ya dije en la historia anteri...