f o u r t e e n

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Yunhee seguía avergonzada, por eso al momento de que el abrazo se cortó no vio a los ojos a Taeyang.

—Yunhee, mírame. —Exigió Taeyang. Pero Yunhee negó —. Mira, no tienes razones para avergonzarte. —La voz severa de Taeyang no estaba de broma, así que Yunhee no tuvo de otra.

—¡Es que me siento tan mal! —Dijo Yunhee sorbiendo. —. ¡Debía haberme quitado o debía haber dicho algo!

—No es tu culpa que haya sinvergüenzas como ese poco hombre, a veces simplemente no hablamos porque no podemos procesarlo. —Dijo Taeyang tomando los hombros de Yunhee, tal y como las veces en las que le hacía promesas cursis.

Por un momento sintió la necesidad de besarlo otra vez, justo como cuando terminaba de enunciar sus promesas.

—Yunhee, creo que sólo estás en shock, no tienes por qué avergonzarte, deberías estar feliz porque no pasó a más. —Era increíble que a veces Taeyang no comprendía a Yunhee, pero aun así Yunhee terminaba sintiéndose como Taeyang decía. —¿Sabes? Te acompaño.

—¿Enserio? —Yunhee estaba sorprendida, pensó que si volvía a ver a Taeyang sería el típico cliché de odio amor, no fue así, sin embargo.

—Sí, ¿A dónde vas? —Preguntó Taeyang.

—Sólo a la biblioteca... —Dijo Yunhee no muy animada, sentía algo en el estómago.

Cuando tomaron el bus se sentaron juntos, pero no se sentía la calidez de antes.

—Y... ¿Sigues con Seok Woo? —Preguntó Taeyang.

—Sí, vivo con él. —Dijo Yunhee tratando de sonreír. —. Tú sigues con Gyuri, ¿Verdad?

Taeyang negó: —No, es... Complicado... —Las palabras de Taeyang sonaban dudosas, la verdad Yunhee esperaba que Gyuri fuera algo pasajero. —. Claro, con la diferencia de que nunca viviríamos juntos, ella no es algo fiable. —Aseguró Taeyang.

Se detuvieron un momento para que Taeyang amarrara sus agujetas.

—Oye Yunhee, con el maquillaje esos moretones no van a dejar de ser visibles... —Taeyang sonaba dolido, aunque Yunhee pensó que era su imaginación.

—Seok Woo no lo hace siempre y por qué sí, ¿Sabes? Es que soy muy tonta y lo hago enojar con mis errores. —Dijo Yunhee limpiando unas lágrimas calientes que salieron de la nada.

Taeyang la miró confundido.

—¿Y qué sigues haciendo con ese loco? —Preguntó Taeyang.

—Es que ambos no tenemos a nadie más, mi mamá ya no me habla mucho y su familia y él no hablan hace años, ambos estamos solos, no lo comprenderías. —Dijo Yunhee negando.

—Nunca has estado sola, y lo sabes. —Taeyang tomó su mano y dibujó otro círculo.

Yunhee sintió una punzada en el corazón.

—No es sólo eso, sé que él puede cambiar y...

—Para Yunhee. —Dijo Taeyang.

—¡No Taeyang! Soy su pareja y debo esperarlo, voy a esperar que cambie y seremos felices... —Dijo Yunhee llorando. —No, la verdad sólo no lo quiero defraudar, él necesita ayuda Tae, él me necesita...

—Nunca vas a cambiar. —Taeyang sonó nostálgico.

Finalmente llegaron a la biblioteca y Yunhee consiguió su libro.

Cuando salieron de la biblioteca, Taeyang la tomó de la mano, pero no exactamente como antes, jaló a Yunhee y corrieron.

—Taeyang, ¿Qué está pasando? —Preguntó Yunhee siguiendo su paso.

—Hay unos tipos allá que nos buscan a mí y a Gyuri... —Las palabras de Taeyang quedaron colgadas en el aire, como si faltasen detalles en su relato, detalles importantes.

—¿Y....? —Taeyang después de unos segundos no respondió.

Finalmente se detuvieron en una banqueta.

—Es... Un ajuste de cuentas, ¿Verdad? -Taeyang no la miró. —. Entonces, ¿Es verdad que te estás metiendo porquerías?

—Creo que está por demás que lo sepas, tú y yo hace meses no somos nada. —Dijo Taeyang con frustración

—Tienes razón, tú y yo ya somos desconocidos. —Dijo Yunhee siguiendo su camino nuevamente.

Había sido una idiota al pensar que todo volvería a ser como cuando eran amigos, había sido una idiota al haber siquiera pensado en volver a ser amigos, Taeyang había cambiado mucho.

Yunhee había pasado veinte minutos con la esperanza de que Taeyang la alcanzara otra vez, ¡Maravilloso! Había sido una idiota una vez más.

Definitivamente lo habían perdido todo. Tal vez en algún lado había quedado la Yunhee que él amó, posiblemente en un recóndito lugar de él estaba su rayo de sol.

Yunhee regresó a "casa" con Seok Woo y todo estaba hecho un desastre.

—¡Yunhee! —Un grito desesperado de Seok Woo la alarmó.

—¡Oppa! —Dijo Yunhee buscándolo.

Seok Woo llegó corriendo a donde ella. Yunhee esperó un golpe de parte de Seok Woo, pero no, él la abrazó y besó en la mejilla.

—Por favor, nunca me dejes...—Dijo Seok Woo llorando.

Yunhee negó y acarició su espalda a manera de consuelo. Ahora era más que imposible dejarlo, Yunhee comprendía de alguna bizarra manera a Seok Woo, él no quería estar sólo y Yunhee no lo defraudaría.

...


❝Nothing Without You❞ SF9✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora