El fotógrafo [Grintson]

Nueva sesión

Me encantaba el rostro concentrado de Rupert cuando me sacaba las fotografías... Cuando miraba cómo mis manos sostenían las sábanas y cómo mis ojos lo miraban.

Sonrió.

-Emma... Inclina tu barbilla hacia arriba.

Le obedecí.

-Así. Bien. Ahora... Trata de fruncir la nariz.

Sonreí. Eso siempre me hacía fruncir la nariz.

-Perfecta.

Luego de otros minutos, escuché:

-Es todo por hoy. Puedes ponerte la bata. Tengo que revisar las tomas un poco.

Asentí. Le di la espalda y me la puse.

Él revisaba las fotos. Me acerqué a su silla y me senté en su regazo para verlas también.

Rió y me acarició una rodilla.

-Has hecho un buen trabajo. Mira esta sonrisa... Y este rostro expresivo. Me encanta tu habitación, la luz entra desde el ángulo justo.

Sonreí y espié algunas de las tomas.

-Este es un enfoque excelente. ¿Es automático?-Pregunté.

-No. Es manual.

-Vaya, es un trabajo brillante.

Sonrió.

-Gracias. ¿Qué tanto entiendes de fotografía?

Me encogí de hombros.

-Solía ser fotógrafa hasta que mi representante creyó que me vería mejor delante de la cámara que detrás de ella.

Rupert sonrió.

-Es muy inteligente.

-Pero me hizo firmar un contrato en condiciones muy extremas.

-Oye, no todo fue malo. Te conocí.

Cerré los ojos y me acerqué a su rostro.

Cuando lo besé, nunca creí que fuera a sentirse así. Sus labios eran suaves. Su mano se apoderó de mi nuca para corresponderme.

Mis manos se acomodaron en su pecho. Ladeé la cabeza. Los lentes no estorbaban tanto como creí.

Sonrió al separarse de mí.

-Tengo que irme.-Dijo.

Sonreí.

-¿Cuándo vienes otra vez?

-Tengo unas horas libres hoy por la noche... Por si quieres verme en alguna parte... Esta es mi dirección.-Sacó una tarjeta de su bolsillo.-Desde las ocho.-Dijo.

Besó mi mejilla antes de ayudarme a bajar al suelo y recoger sus cosas.

Sonreí.

Al parecer, tenía una cita.