Capítulo 3

1.4K 7 0
                                    

Mónica Mathews.

Recién salí de la universidad, estaba de camino a buscar a Grace a la escuela, íbamos a pasar un rato con papa en su apartamento… Desde la separación de nuestros padres no podíamos pasar mucho tiempo con el, papá trabajaba demasiado y los días donde nosotras podíamos verlo él nunca podía, y cuando podía nosotras o no estábamos en la ciudad o mamá decidía que no era una buena idea verlo.

Mamá y Papá tuvieron una buena relación hasta que los años fueron pasando, cuando tenia 5 años nació mi hermana, Grace,  desde entonces papá no paraba en la casa, vivía trabajando y mamá solo se hacia películas en la cabeza, creyendo que el no hacía otra cosa mas que serle infiel. Papá trató de hacerla ver que nada estaba pasando, pero ella se resistía a creerle… Pasaron 4 años y aun estábamos en la misma situación, hasta que una noche papá decidió irse de la casa, entre llantos y pataletas le suplicamos a papá que no se fuera de la casa pero él ya había tomado su decisión, no había marcha atrás.

Para nosotras papá era como nuestro mejor amigo, aunque el tiempo con él era corto, sabíamos como aprovecharlo, con el podías hablar de lo que sea, siempre nos daba consejos, nos apoyaba, era el mejor padre del mundo.

Ya estábamos llegando al apartamento de papá, Grace estaba emocionada, pues este verano se quedaría con papá, yo por mi parte viajaría con mis amigas pero quería pasar con el un tiempo antes de irme. Llegamos, y papá nos abrió la puerta…

- PAPAAAA! – gritó Grace y salto en su brazos. – Papá y yo sonreímos, pasamos al apartamento y caminamos directo a la cocina.

- Hola Pá, como estas? – le dije, mientras le daba un fuerte abrazo.

- Estoy bien… pero como están mis niñas de grandes! – exclamó con orgullo, dándonos a cada una un beso en la frente. – Grace, estas emocionada por un verano inolvidable con tu padre? – le preguntó a Grace de manera burlona.

- Siiii, no puedo esperar! – dijo con muchísima emoción mi hermanita, mientras lanzaba sus brazos al aire.

- Y tu Mo? Por fin, que harás este verano? Te irás de viaje como me dijiste? – dijo mientras mordía una fresa, y nos ofrecía a Grace y a mi.

- Pues si, en menos de 3 días me voy a Londres con April. No sabes lo emocionada que estoy papá, estoy loca por conocer, culturizarme… - Y conocer chicos – interrumpió papá y me lanzó un guiño. Nos echamos a reír…

- Bueno, quizás papá, quien sabe lo que encuentre por allá… Tal vez no vuelvas a ver a tu hija por Los Ángeles. – le dije con una sonrisota pero él  se quedo con la cara seria. – Papá, no te pongas así, sabes que estoy bromeando. – le di un beso en la mejilla, a ver si se le pasaba lo molesto.

- No bromees así, moriría si no te volviera a ver… Ustedes son lo más importante en mi vida, quiero que lo sepan, pase lo que pase,           ustedes son el tesoro mas preciado que tengo en esta vida. – nos abrazó tan fuerte, sus palabras me llegaron al corazón, se me salieron dos pequeña lagrimas y a papá también.

Las horas pasaron volando, ya eran las 5 de la tarde y April no me había llamado, decidí mandarle un mensaje de texto a ver que pasaba.

“April, donde estás? Quieres que te pase a buscar o no? Se está haciendo tarde. Llámame cualquier cosa. Besos :*”

April respondió a los 2 minutos: “No quería interrumpir la tarde con tu padre, pero si estás lista para irte, por favor pásame a buscar, estoy en la universidad.”

- Papá, tengo que ir a buscar a April a la universidad y arreglar maletas. Te llamo en la noche para ver como te va en tu primera de muchas con Grace, te advierto que tiene mal dormir. – dije en tono burlón, a Grace solo se le ocurrió darme una trompada en el brazo.

Los Ángeles en LondresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora