Epilogo

6.1K 392 136
                                    


Niñas por fin!!... Traje el epilogo de la historia, tengo tantas cosas que decir, estoy muy agradecida que esta loca historia les haya agradado tanto, en lo personal fue una grata sorpresa, cada vez que escribo algo nuevo es un desahogo y poder leer mis creaciones más tarde es tan bueno, leer los comentarios que me regalan siempre roban miles de sonrisas y me reconfortan en muchos sentidos, me hacen volver a creer en mí.

He tenido días difíciles y quiero comentarles un poco, en lo personal amo la profesión que elegí, sin embargo hay cosas de ella con lo cual me he difícil lidiar, yo espero que sea cuestión de tiempo, ya saben, que todo pase, que me acostumbre a eso, porque en la parte asistencial realmente adoro eso, más no la parte administrativa, y por fin las ideas vuelvan a surgir en mí, tengo tantas historias escritas, bueno oneshots y no puedo ponerles fin y es complicado, me enfado conmigo misma xD...En fin... Gracias por leer esta historia hasta el final, espero les agrade el último estirón... y espero vernos en impulsividad (aunque tardaré, será tardado por donde estoy ahora).

También quiero agradecer a Angel O ya que ha estado aquí apoyando increíblemente con el desarrollo de esta historia. Y evidentemente agradecer a todos por seguirme, gracias :D

Sasuke frunció el ceño y se retiró el cubrebocas.

-Ahora puedes enjuagarte la boca—Le indicó a su paciente, un hombre de más de sesenta años, y no cualquier persona, nada menos que Hiruzen Sarutobi uno de los hombres más ricos y renombre del país.

-Esta muela enserio me estaba molestando—Habló el hombre con eje cansado y agarrándose la mejilla derecha, sobre la zona afectada—No me dejó dormir en toda la noche.

Sasuke dibujó una perceptible sonrisa y asintió con la cabeza.

-Ahora solo va a necesitar un analgésico y un antibiótico.

-¿Me llevo los instrumentos?—Inojin un chico rubio de 22 años cuestionó al moreno, que simplemente asintió con la cabeza, observando como el joven estudiante, cuidadosamente recogía las herramientas de trabajo.

-¿Tienes escolares?—El mayor cuestionó sorprendido.

-Un par de ellos.

-Pero si es sábado—Debatió el mayor frunciendo el ceño.

-Bien, si quieren aprender no habrá día que quieran desperdiciar.

-¡Papá!—La sonrisa del Uchiha esta vez se ensanchó y fue completamente sincera al escuchar la voz infantil, llevó la mirada hacia la puerta cerrada del bonito y pulcro consultorio.

Segundos después la puerta blanca se abrió y apareció Chou-Chou, su segunda estudiante, por su rostro pudo averiguar que el pequeño Suk no le había puesto las cosas fáciles.

-Aquí está el niño Hyuga—Habló Sarutobi, apreciando el chiquillo de ojos negros y cabello oscuro, mismo que corría en dirección al dentista que en un par de años se estaba ganando un exitoso prestigio en el país.

-Uchiha—Soltó Sasuke poniéndose de pie e inclinándose para tomar en brazos al pequeño niño de tres años.

-Papá, ¡ella mala!—Señaló a la chica bronceada, robusta y llenita, misma que enseguida negó con las manos exageradamente.

-No, no, el niño iba a zonas de riesgo y no podía dejarlo ir.

-¿Chou-chou se portó mal contigo?—Cuestionó el azabache divertido, el niño asintió enseguida con un leve puchero agitando los pies haciendo que los pequeños converse de bota negros resaltaran bajo el pantalón de mezclilla azul que portaba.

Un hijo para el imperio HyugaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora