Caminó hasta salir al balcón de su habitación.
Mantenía entre sus labios la copa de vino casi vacía, habiéndose tomado ya media botella de aquella colección de Gerard.
El aire estaba fresco y calmado, era una noche preciosa.
- Una noche justo para ambos.- Esa voz le hizo sonreír enseguida, volteando a verle, alzando una ceja.
Llevaba una bata de seda color verde oscuro, donde por una pequeña abertura dejaba ver su desnudez.
Caminó hasta él soltando la copa y dejando que esta se estrellara al piso.
Le cargó enseguida tomándole de los muslos, caminando con él hasta la habitación mientras esté soltaba una risita.
Cayeron a la cama sin dejar de mirarse.
- ¿Lo recuerdas?- El rubio asintió.
- Eres mi Rayito de sol, después de todo...- Raymond sonrió yendo a capturar sus labios enseguida. Mikey le tomó del cuello subiendo sus manos a su cuero cabelludo, profundizando el contacto.
Ellos igual se habían enamorado hacía mucho tiempo atrás, ellos igual habían sido privados de eso, más aunque siempre habían sentido ese deseo por el otro, jamás se dejaron llevar como Frank y Gerard.
Eran tan reservados, siempre platicando de más o sonriéndose a escondidas.
Sus manos pasaron por su cuerpo besando ahora su cuello, mordisqueando su nívea piel. Su cuerpo desnudo era suave, bajando hasta entre sus muslos y abriéndolos para hacerse un camino en él.
Mikey abrió los ojos sorprendido cuando el moreno simplemente le miró firme, bajándose una parte del pantalón para sacar su miembro erecto y embestirle.
Soltó un jadeo ahogado echando la cabeza hacia atrás.
El aire se le escapaba de los pulmones oyendo a Ray gruñir, apoyando el rostro en su pecho.
- ¿E-estás bien?- Le preguntó temeroso. Se sentía tan enorme en su interior. Respiró un par de segundos antes de asentir con la voz quebrada. Estaba llorando. Enseguida Ray alzó la mirada preocupada.- Lo siento... Me he precipitado, solo, lo ansiaba tanto que... Lo siento...
- No... No.- Negó.- Yo igual lo ansiaba tanto...- Confesó. Se mordió el labio empezando por sí mismo a mover la pelvis, haciendo al moreno soltar el aire y respirar algo agitado.
Las manos de Mikey le apretaban ahora los hombros:- Vamos... Por favor... Muévete.- Ray le miró con algo de sufrimiento.- Ray...- Y Mikey seguía llorando.
- No quiero herirte más.
- Por favor...- Un momento viéndose a los ojos y recordando todos esos años sin tocarse. Veían cuanto se habían extrañado, cuanto se necesitaban en ese momento. Dolía.
Cerró los ojos entonces, apretando los labios y tomando entonces al rubio de las caderas para así tomar el control.
Empezó el vaivén de manera lenta y profunda. Mikey gemía feliz, literal, con una sonrisa en el rostro.
Ray le besaba entonces de vez en cuando robándole el aliento. Aumentando las embestidas, yendo más, cada vez más duro.
- Te amo Mikey.- Dijo de repente. El señor de la tierra gimoteó entonces ante el cambio de posición, siendo alzado de los glúteos y quedando encima del mayor, que aún así le movía a su conveniencia.- Te amo tanto...- Estaba diciéndoselo tan profundamente. Por todos esos años que jamás pudo.
Y Mikey seguía llorando de tanto placer y felicidad, asintiendo y sosteniéndose cómo podía a sus hombros, gimiendo desesperado.
- Más duro... Por favor dame más duro... ¡Ray!- Descontrolados por más. Moviéndose juntos, con el sonido de las pieles al mismo tono que el de sus jadeos.
Llegaron juntos al mismo tiempo, quedando suspendidos en el aire mientras trataban de recuperarse y no morir.
Mikey temblaba ante tal orgasmo mientras Ray sentía el corazón a punto de salírsele del pecho.
Era magnifico:- Te amo.- Susurró el rubio. El moreno abrió los ojos sin verle, pues ahora estaban ya sobre la cama de nuevo, abrazándole por la espalda mientras le acariciaba tiernamente.- Siempre te he amado... Y me ha dolido cada segundo que he pasado sin poder recordarlo con claridad.- Raymond sonrió.
Se sentía en paz.
No volvería a dejarlo ir jamás.
No dejaría nunca de nuevo que le quitasen ese sentimiento.
***
Pensé en "Goner" de TOP cuando lo escribí.
Una vez más, Gracias.
- Paola 🌻❤️
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La reunión de Dioses. '~Frerard~'
FanficGerard y Frank se traen ganas, algo natural para alguien que controla el fuego y el agua. En un universo donde cuatro naciones están divididas por sus Dioses y al fin harán una reunión para aliarse. Volver a verse supone un peligro para todos, ya...