No tengo ganas de NADA. Ni siquiera me han dado ganas de escribir. Creo que me siento peor. Ni siquiera he escuchado música (algo DEMASIADO raro en mí).
No quiero ir el lunes. No tengo ganas de ver a Natalia y mucho menos a ti. No quiero saber lo que vaya a pasar después de lo del viernes. En verdad me da mucho miedo.
Ahora no tengo mucho que contar, sólo eso.
En verdad que no tengo ganas de hacer nada.
— Daniela.
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Cartas Sin Fecha De Entrega
RomanceDos adolescentes enamorados uno del otro, pero ninguno se atreve a decir lo que realmente siente. A ella le daba pena declararse. A él le daba miedo ser rechazado. ¿Su solución? Escribir cartas. Cartas que no entregaron jamás.