Quizás sea mi imaginación, pero creo que hoy te vi más alegre con Abraham que antes. No sé si sea porque sé que te gusta, porque me dan celos, o no lo sé.
Hoy ni siquiera te juntaste con nosotros. Todo el rato estuviste con él. Caminaron juntos por todo el patio.
Natalia dijo que hacían una hermosa pareja. Como siempre todo comenzaron hacer bromas sobre ustedes. A mí no me hacían ninguna gracia.
En dos días tenemos que entregar la carta. Lo pensé bien y creo que mejor te doy la carta a ti. Seguramente no tendrá mucho, pero al menos podré decirte que me gustas.
Pobre de mi perro, seguramente también le haga una carta luego.
— Leonardo.
ESTÁS LEYENDO
Cartas Sin Fecha De Entrega
RomansaDos adolescentes enamorados uno del otro, pero ninguno se atreve a decir lo que realmente siente. A ella le daba pena declararse. A él le daba miedo ser rechazado. ¿Su solución? Escribir cartas. Cartas que no entregaron jamás.