Lo sé, lo sé...
Soy la persona con más suerte en este mundo...
Ojala fuera cierto.
Odio mi vida.
Odio mi suerte.
Odio mi cobardía.
Odio a Abraham.
Odio a Natalia.
Odio el amor.
Me odio.
Pero sobretodo, lo que definitivamente más odio es a tu sobrino y tus primos.
Yo estaba tan alegre de que al fin te pude decir lo que siento. Aunque fue por mensaje (la forma menos romántica de declararse) pero lo pude hacer.
¿Y qué hacen tus primos y sobrino?
¡Romper el celular!
No sabes cuánto los odio. No los conozco, pero seguramente son las peores personas del mundo.
No sabes como me sentí cuando me dijiste que se había roto tu celular. Me sentí tan estúpido, tan triste, tan todo.
Ni siquiera supe que responder cuando me preguntaste que decía el mensaje. Me puse tan nervioso y lo único que pensé fue decirte que no era nada importante.
Odio mi suerte, en serio. Ahora tendré que pensar otra cosa para declararme y reunir de nuevo el valor suficiente.
— Leonardo.
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Cartas Sin Fecha De Entrega
RomanceDos adolescentes enamorados uno del otro, pero ninguno se atreve a decir lo que realmente siente. A ella le daba pena declararse. A él le daba miedo ser rechazado. ¿Su solución? Escribir cartas. Cartas que no entregaron jamás.