Este no puede ser mi futuro

Capítulo 10 - Estamos juntos en esto, ¿no?

Disclaimer:

Esta historia pertenece a la increíble génesis black (de Potterfics) Sólo la estoy poniendo en Wattpad para que se pueda leer en un formato más amigable. Pero todo es de su increíble mente y los personajes son de la reina J.K. Rowling.

No había dejado de pensar en el impulso que tuvo hacía su mejor amiga. Han pasado algunos días y no se había atrevido a ir a buscarla, es mas, trataba por todo los medios evitarla, sentía vergüenza por lo que había hecho era como su hermana y él en un impulso se le ocurrió besarla. No sabía si fue por lo vulnerable que se veía o por su propia desesperación por otro lado no se sentía culpable de haber cometido una pequeña infidelidad, por así decirlo, ya que estaba casado con Pansy y eso se lo recordaba el anillo que portaba el dedo anular de su mano izquierda, pero por qué respetar un sacramento así si ella se había acostado en el primer día con él....Draco Malfoy la piedra en medio de sus dos caminos.

-¿Qué estás haciendo?- cuestiono Harry al ver a la pelinegra con su camisón negro de seda sentada en medio de la enorme cama rodeada de muchos libros.

-Trato de aprender, no puedo seguir basándome en remedios que recuerdo de mi madre o Snape- respondió la pelinegra sin quitar la vista de un libro que leía con detenimiento.

-¿Es en serio?- mirándola con el entrecejo fruncido mientras se quitaba la camisa.

-¿Qué no ves?- cuestionó con voz neutra la pelinegra alzando la mirada "tranquilízate Pansy" pensó la pelinegra al ver el torso desnudo del ojiverde.

-Si, sólo que se me hace raro- seguía desvistiéndose.

-Veo que te dejas llevar por lo que dicen- dijo con acidéz volviendo su vista al libro que leía.

El ojiverde suspiró, no sabía si era cierto lo que se decía de ella, pero ella no hacía mucho para que se desmintiera lo que se rumoraba en Hogwarts. Lo que si debía de admitir es que en estos días Pansy se estaba comportando diferente, él creía que iba rechazar la idea de ser madre sin embargo ella actuaba como si todo fuera normal, prestaba atención a Dylan y a Samanta, es más juraría que se preocupó cuando Dylan llego con una fractura a casa, ayudaba a Samanta cuando le pedía un consejo, ¡vio la tele con ellos! cosa que lo sorprendió.

-¿Qué no te vas aponer pantalones?- viendo como se sentaba al lado de ella sólo con sus bóxers pegados azul marino. No es que la espantara ver un hombre en ropa interior sólo que Harry siempre dormía con sus pantalones de dormir y el que estuviera así la sorprendía.

-No, hoy no tengo ganas o ¿acaso te molesta?- mirando a los ojos a la pelinegra "¿por qué le pregunto?" tratando de entender lo que había dicho.

-Claro que no sólo es extraño- frunció el entrecejo

-A ver, dame te ayudo- le dijo quitándole el libro que tenía en las manos ante la mirada sorprendida de la pelinegra

-¿Es en serio, el gran Harry Potter me va ayudar?- viendo como el ojiverde examinaba el libro

-Te recuerdo que el gran Harry Potter es tu marido así que te tengo que ayudar-alzando la mirada para ver los ojos azules de su "esposa"

Pansy lo contempló, tal vez todo esto lo hacía porque su alma samaritana y ego de héroe no soportaban ver a alguien en problemas o porque si cometía un error su nombre estaba de por medio... después de todo estaba juntos en esto ¿no?

-Si, sólo hasta que se vayan Samanta y Dylan- susurró la pelinegra. Harry solo se limitó a verla, era cierto los días pasaban y pronto los chicos se irían.

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Entró a la sala y pudo notar que Hermione parecía perdida en sus pensamientos, sabía que había pasado algo entre ella y Potter ese domingo, lo había notado porque ninguno de los dos se atrevía a mirarse a los ojos ¿pero qué podía decirle?, ¿cómo podía cuestionarle algo cuando él, el día que supo que iba ser padre buscó a su amiga para tener sexo aliviando su miedo y desesperación?. No se sentía culpable pero por alguna extraña razón ahora sí pero ¿Por qué?

-¿En qué piensas?-se atrevió a decir sacando a la castaña de sus pensamientos.

-¿Acaso te importa?- dijo viéndolo a los ojos

-Perdón por preguntar- se quejo el rubio "maldición él no tiene la culpa" pensó la castaña al ver su mirada de molestia

-Discúlpame sólo que estaba pensando en el trabajo- trató de sonar convincente. Draco sabía que eso era una gran mentira "mejor seguirle el juego" mirando a la castaña con detenimiento.

-Nunca creí que Blaise sería un obsesionado con el trabajo, siempre dejaba todo al último momento- dijo Draco con una sonrisa de superioridad recordando ¿hace una semana? En donde Blaise se apresuraba por terminar la tarea una hora antes de entrar a transformaciones.

-Hemos visto cosas que jamás creímos que pasarían- dijo Hermione con una leve sonrisa.

-Si jamás creí que iba ser padre- suspiró el Slytherin mirando a la castaña que se sonrojó

-Es raro tú y yo- habló con timidez la castaña sintiendo la mirada penetrante del rubio.

-Las cosas son así, no podemos hacer nada- dijo con frialdad Draco "por qué demonios no me puedo controlar" se maldijo

-Nunca puedes hacer las cosas bien, ¿verdad?- replicó la castaña con el entrecejo fruncido.

-En eso te equivocas Granger, hice las cosas tan bien que ahora estas embarazada- dijo intentando callar a la castaña

-Sí, pero tardaste doce años- le rebatió con una sonrisa abierta.

-Jajaja si me tarde fue porque nos la pasamos cuidando al hijo de tu amiguito- se defendió recordando todo lo que escucho el domingo.

-No olvides que también es el hijo de tu amiguita- sonrió con falsedad la castaña cosa que noto el rubio.

-Sabes, ese Dylan tiene actitudes mías- Hermione sonrió ante su comentario ya que era cierto, por momentos el hijo de su mejor amigo era la copia fiel de Malfoy.

-Creo que no hicimos bien el papel de padrinos- dijo mirando al rubio que inmediatamente le desvió la mirada -ten vámonos- dándole su chaqueta negra.

-¿A dónde?-

-A una pizzería tengo ganas de una pizza de champiñones o me vas a dejar ir sola- agregó poniéndose su chaqueta

-¿Sabes la hora que es?-

-Sí, me vas acompañar o ¿no?-

Draco la miró al parecer los antojos se estaban haciendo presentes y no podía negárselos estaban juntos en esto y no podía dejarla sola.

-Siempre tienes que salirte con la tuya Granger- le dijo abriéndole la puerta.

-No, no siempre Draco- saliendo del departamento dejando por un momento a Draco sorprendido.

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-Entonces entendiste- dijo el ojiverde después de explicarle los diferentes usos del bezoar.

-Sí, gracias por tu ayuda- sonrió levemente la pelinegra empezando a guardar los libros.

-En fin vamos a dormir- dijo Harry acomodando la cama -mañana tenemos que trabajar- metiéndose a la cama.

-No quiero- haciendo un puchero la pelinegra metiéndose también a la cama

-Por cierto, Samanta pidió permiso para ir a una fiesta- le comentó el ojiverde.

-Y ¿qué dices?-

-Bueno yo pensé darle permiso pero ¿qué dices tú?-

-Ya casi entran a la escuela, creo que es una buena idea- habló con seriedad-Potter, ¿por qué me preguntaste?- dijo la pelinegra después de unos segundos de silencio.

-Porque estamos juntos en esto- se limitó a decir el ojiverde.

Aprender a estar juntos es el primer paso que estaba dando aunque no se estuvieran dando cuenta.