Lazos de Mentiras. #MyE

Capítulo 32

Era Leonel. La persona que los estaba escuchando, y con el rostro aterrado desde el primer piso era el hijo del asesino de su madre. No se le veían lágrimas, sólo se veía su rostro inclinado hacia abajo.

Esteban reaccionó ante un movimiento de Alba y cruzaron miradas y no sé qué fuerza interior hizo que se detuviera porque en realidad quería lanzársele encima para matarla. De esa mujer que lo había criado con tanto esfuerzo, con dureza pero amor, parecía no quedar nada, en ese momento había terminado de perder absolutamente todo el respeto que le tenía, porque de todas las cosas buenas que hizo por él, no las hizo con nadie más. Todos sus acciones que en un momento se pudieron rescatar ya no existían, Alba era buena con una sola persona en ese mundo, con él, pero con todos los demás era el peor ser humano que podían encontrar.

Leonel se alejó del barandal y todos lo vieron por reflejo, ninguno dijo nada, aunque Esteban no podía dejar de sentir pena por la situación. En ese momento un golpe más venía a su vida, se enteraba de la peor manera que el asesino de su madre, era su propio padre.

En ese momento otro ruido los alertó, mientras Leonel bajaba las escaleras, se sentía la risa de Estrella, que salía de su habitación con su teléfono en las manos. Alcanzó a ver que le pasaba a Leonel, se dio cuenta de inmediato por su cara que era algo trágico. Aunque insistió, él no le pudo contestar, sólo bajo más rápido las escaleras para salir de la casa. Esteban vio como pasaba por frente suyo y antes de salir tras él, miró a todos los adultos que aún estaban en silencio.

-Esto no se va quedar así.

Los amenazó y corrió tras de él, que se estaba prácticamente escapando en su auto.

Apenas Esteban desapareció, Demetrio se abalanzó sobre Alba en un descuido, la sacudía por los hombros mientras se escuchaban los gritos de Estrella que bajaba para separarlos y Carmela que le suplicaba que no lo hiciera. Demetrio le estaba haciendo daño y Alba no podía soltarse.

-¡Repítelo! ¿¡Cómo que Arturo mató a Patricia!?
-Lo que acabas de escuchar. ¡Ya suéltame! –forzajeaba pero no podía-
-¡Demetrio suelta a mi tía! –decía Estrella con miedo a acercarse-
-Todos estos años lo único que hiciste fue hacerme cargar con una muerte que no me correspondía. –subía una de sus manos a su cuello y se lo apretaba-
-¡Ya! ¡Deme, no lo hagas!
-¡Sólo lo hiciste para hacerle daño a Leonel! ¡Para seguir haciendo daño!

La apretó más fuerte que casi se detuvo su respiración y la soltó, Alba comenzó a toser buscando reponerse.

-Demetrio basta. –decía Carmela, aunque no se acercaba a su hermana- Estrella sube a tu habitación ahora mismo.
-No, no hasta que Demetrio se vaya.
-¡Estrella sube ahora mismo!

Carmela era la primera vez que le gritaba a su sobrina, y esta estaba desconcertada. Decidió subir en silencio, lo que había escuchado la había dejado intrigada y necesitaba hablar con alguien así que comenzó a llamar a Héctor desde su habitación.

-Demetrio vete ya de esta casa. –decía Alba más compuesta-
-No voy a salir de aquí sin respuestas.
-Pero no le hagas más daño. –intervenía Carmela y Demetrio giró aún más exaltado-
-¿Qué no le haga daño? ¡Debería matarla a ella también!, debería hacerla sufrir y hacerla pasar por todo lo que ella me hizo pasar durante 10 años por haberme hecho creer que maté a Patricia.
-Tú le disparaste el arma, fuiste tú el que tenía intenciones de matarla, eras tú el que debería haberla matado, no Arturo.
-Quiero saber toda la verdad.
-Quiero que te vayas de mi casa, y si no te vas tú mismo voy a llamar a seguridad.

Demetrio no se movía y Carmela tampoco, se había quedado estática, ella también quería explicaciones, quería que Demetrio se fuera también aunque no quería quedarse sola con Alba.