0.9

354 40 2
                                    

— Luke es un buen chico. —Asiento tranquila tomando mi pan tostado del plato.

— Y es bonito. —Mis ojos van hacia mi prima con el ceño fruncido.

— ¿Son muy amigos cierto? —Murmuro un sí muy leve ante la pregunta de mi tía. — Es amable.

— Sí, es amable. —Respondo.

De la nada, en el comedor comenzó una plática entre mi familia sobre las razones por las cuales debería ser mi pareja.

Sin decir nada me levanto de la mesa, dejando el plato en la cocina y dirigiéndome a la habitación que comparto con mi mamá.

Me recuesto en la cama y comienzo a pensar en cualquier estupidez, la escuela, Luke...

Me quedo dormida al poco tiempo.

— Elisa... Hija —Me despierto sobresaltada.

— ¿Qué pasa? —Sonríe levemente, sólo levantando las comisuras de sus labios, como siempre lo hace.

— Nada, es que dejaste tu teléfono abajo y no ha parado de sonar. —Lo pone en mi mesa de noche. — Eso era todo.

Observo a mi madre cerrar la puerta de la habitación al salir y bufo tomando mi celular luego de estirarme.

2:15 pm

Hey, ¿Quieres salir? L.

2:30 pm

¿Elisa? ¿Estás viva?

2:45 pm

Demonios, contéstame.

3:05 pm

¿Estás ocupada?

3:28 pm

¡Elisaaaaaaaaaaa!

3:34 pm

Luke llamando a Elisa.

3:40 pm

Te voy a cantar.

3:46 pm

¿Te gustan The Beatles?

3:48 pm

¿No?

4:20 pm

Realmente necesito que me respondas.

Mi mirada se posa en el reloj digital de la mesa de noche, marcando las 4:35, por lo que decido responder.

"Luke, deja de sufrir por mi, he vuelto. E"

"¡Gracias al cielo estas bien! ¿Quieres salir? L."

Sonrío.

"Te espero. E."

(...)

— ¿Luke? —Emite un sonido extraño de su garganta — ¿Qué tienes? —No responde una vez más, su seriedad me preocupa, apenas y levantó la comisura de sus labios al verme.

Me observa con los ojos entrecerrados, toma mi mano y al juntarlas aprieta la mía levemente.

Necesita apoyo.

Mi apoyo.

— ¿Luke? —suelto su mano lentamente, y me coloco frente a él, observando su rostro frío mientras levanto levemente mi rostro para mirarle mejor.

Algo anda mal.

Por la manera en que evita mis ojos.

Suspiro y paso mis brazos por su cintura para abrazarlo.
No responde hasta unos segundos después que también me abraza, apretándome contra su pecho.

— ¿Qué tienes? —Susurro. Niega separándose de mi para sentarse en una banca cercana. — Lucas.

— Elisa —Responde con un hilo de voz, me limito a sentarme junto a él. — Mi padre tuvo un accidente — Acaricio su espalda mientras él se encoge en su asiento tratando de no explotar. — No quiero perderlo, Elisa, no quiero hacerlo.

Explotó.
Comienza a sollozar, como jamás había visto a alguien.

Lo abrazo sin siquiera pensarlo, incluso le beso el cabello, recargo mi mentón en su cabeza con los ojos cerrados.

Nunca me había sentido mal por alguien, nunca.

(...)

— Gracias por escucharme. — Sonrío abrazándolo.

— Tú me has escuchado a mi. —Acomoda su cabeza en mis piernas. Aprovecho para acariciar su cabello.

— Elisa. —Lo miro. — Quédate conmigo siempre —Sonrío levemente, mientras bajo mi rostro para besar su frente.

— Siempre.

— ¿Siempre juntos?

— Siempre juntos, Luke. —Una sonrisa aparece en su rostro, al mismo tiempo que lo observo sentarse frente a mi.

— ¿Qué me has hecho? —Levanto la ceja, sin entender.

— ¿Por qué lo dices?

— Porque creo que me enamoraste. —Lo observo con los ojos extremadamente abiertos, ¡enamorarse es algo grande!

Toma mis mejillas acercándonos cada vez más.

Él va a besarme, y yo no tengo intensiones de pararlo.

Nuestros labios apenas se estaban rozando.

— ¿Luke? —Nos separamos rápidamente, mientras miramos a la dirección en que habían llamado a Luke.

— ¿Harry? —El chico sonríe. — ¿Qué haces aquí?

— Vine a pasar el rato. —Posa su mirada en mi —¿Quién es tu amiga?

— Elisa, él es Harry, un...

— Compañero del colegio. —Luke asintió tranquilo.

— ¡Ya me acuerdo de ti! -Harry sonrió. — Además de hacer que Luke nos deje plantados tú... Tú eres la chica rara.

— Harry, cállate — Le regaña Luke frunciendo el ceño en dirección a su amigo.

— Me refiero a que... Bueno... Olvídalo Elisa. Un gusto —Bufo incómoda y molesta — Bueno, tres son multitud. —Sonríe el pelinegro — Me voy. Nos vemos luego, amigo.

— Lo siento por eso. —Me encojo de hombros — ¿Podemos seguir en lo que estábamos?

— No, Harry lo arruinó. —Me levanto del pasto y camino un par de pasos esperando a que Luke se levantara.

— ¿Estás enfadada? —Me dice antes de levantarse. Niego — Está bien.

Luke toma mi mano para regresar a mi casa y no me niego a ello.

Realmente deseaba que ese beso sucediera.


Elisa (L.H)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora