3. ¿Abi o Abigaíl?

225 10 0
                                    

Aquella noche no dormí nada, me despertaba cada dos por tres y Udane conmigo. No me perdonaba lo poco que la hice dormir. Y con la mala leche que me levantaba yo por las mañanas, sigo sin explicarme cómo puede tener tanta paciencia, como tiene esa actitud en general. Quería conocerla más.

Después de desayunar y de arreglarnos, me había propuesto ir con Abigaíl, me explicó que era su amiga y que asistía a las clases para que ella hiciera lo mismo, que le parecía una pura chorrada pero que en cierto modo era la única manera de sacarla del chocolate y de los peluches. Me pareció bien. Aún después de su actitud conmigo el primer día, nadie tiene culpa de las actitudes pasadas por malas rachas, así que no se lo tomé en cuenta y decidí acceder a ello.

Parece mentira, pero todos vivimos por la misma manzana y nunca me había parado a ver quién realmente eran mis vecinos.

Llegamos a la casa de Abigaíl, nos abrió con unas pintas un tanto horrorosas, con el maquillaje corrido y con una tableta de chocolate en la mano, inexplicable.

- ¿iOtra vez Abi!? - Dijo Udane resoplando.

- Qué haces con el bicho y por qué lo traes a mi casa. No pensarás que la dejaré pasar, ¿no? - Dijo mirándome más mal no poder.

- Sólo vine a acompañar, ya me iba. - Me di la vuelta.

- ¡¡Eh, eh!! ¿Dónde te crees que vas? Has venido conmigo y si tú no entras yo tampoco. - Me cogió Udane del brazo y me llevó con ella.

- Bueno pasad. Pero sin tocar nada. - Le contestó, por supuesto que iba para mí, no era su amiga ni estaba dispuesta a serlo, ya no.

Nos sentamos en el sofá, me costó un tiempo para hacerlo, el desafío de miradas entre ambas protagonizaba la situación de aquella mañana. La tensión se podía cortar con un cuchillo, pero Udane parecía que nació para ser la paz de la vida.

- Bueno Abi, quería presentarte a Ruth, ya sabes que es la chica rara del proyecto. Pero quería decirte que no es para nada así. - Afirmó y me miró sonriendo. - De hecho, la invité a dormir esta noche pasada. - Dijo Udane.

- Entonces quizás no sea para tanto... Bueno soy Abigail, podrás llamarme Abi cuando yo te diga. - Estiró la mano.

- Siempre y cuando no me mates, esté dispuesta a estar aquí. - Se la estreché.

- ¿¡Eso qué diablos es!? Nononono. - Dijo Udane, y nos juntó de tal modo que parecía que nos estuviéramos dando un abrazo.

Ese acto fue el único necesario para hacer esfumar la tensión entre ambas, tampoco se le veía tan mala, sólo estaba pasando por malos momentos, era entendible.

- Chicas se hace tarde, os invito a comer por ahí y ya de vuelta vamos a la sesión. - Dije levantándolas del sofá.

- Joder, juraría haber escuchado que no ibas a pisar más el suelo de esa aula. - Dijo Abi.

- Bueno, también escuché no se qué de no dejar pasar un bicho a tu casa. Todo el mundo puede cambiar de opiniones, ¿no? - Sonreí y esperamos unos minutos a que Abi decidiera arreglarse y pintorrearse para irnos.

Udane fue a por su coche, y me monté de copiloto esta vez. Puso la música para mi sorpresa máxima, comenzó a sonar Give Ur Heart A Break de Demi Lovato *. Nos pusimos las tres como locas a cantar.

Tan sincronizadas. Empecé a descubrir que el hilo que nos unía iba mucho más allá de las sesiones de terapia que llevábamos al mismo tiempo.

Udane cantaba para mirar solo y exclusivamente a Abi, que ponía cara de ser ese el porqué de todos sus males.

- There's just one night to live and there's no time to wait to wait so... - Cantamos Udane y yo a la vez.

- Let me give your heart a break, your heart a break oh yeah yeah! - Se animó Abi.

- Oye, montamos una fiesta mañana por la noche en tu casa, Udane? - Propuso Abi. - Es fin de semana y.... ¡¡¡Necesitamos darnos un respiro!!! Invitamos a todos los de la sesión para quedar bien, si alguien quiere presentarse perfecto, que no...- Se tomó una pausa mirando a un chico por la ventana. - Pues nosotras tres somos más que suficientes. - Nos miró con orgullo.

- Yeahhhh, claro que sí. En clase lo comentamos. - Afirmó Udane.

No sabía qué comentar al respecto y supongo que solo debería dejarme llevar.

Paramos a un restaurante donde se comía muy bien. Y justo al acaba como dijimos, fuimos para clase.

Tomás se sentó a un lado, como siempre, por lo tanto, teníamos que crear un círculo a partir de él. Últimamente solo hacíamos que debatir asuntos, supongo que para establecer conexiones entre nosotros, a través de las opiniones nos conocemos más, digo yo. Sino no tendría otra lógica.

- Mañana monto una fiesta en mi casa, quien quiera venir, después de clase, iremos directos. - soltó disimuladamente Udane.

- Allí estaremos. - Dijeron Telmo y Naúm.

Y los demás solo comentaban cosas entre ellos, inconscientemente se creó un murmullo bastante grande, del cual ni Abi, ni Udane, ni yo pusimos atención.

Telmo y Naúm se acercaron para darnos su número y en ese momento Udane aprovechó para hacer un grupo de whatsapp para la fiesta. 5 integrantes por el momento.

Lo que pasó después no tiene mera importancia. Cada uno en su casa y dios en la de todos como diría mi buena madre. No compartía para nada esa expresión.



*AQUÍ ESTÁ LA CANCIÓN PARA QUIEN NO LA CONOZCA.

DEMI LOVATO - GIVE YOUR HEART A BREAK

SATURNO.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora