Suena “One more night” de Maroon 5, se levanta y adormilada entra en el cuarto de baño para preparar la ducha. Los libros están tirados encima de la mesa testigos de una noche más sin dormir, estudiando. Primero de BAC le está resultando más difícil de lo que pensaba. Ya en el baño se quita el pijama y entra en la ducha. Justo antes de abrir el agua un pitido del móvil indica un Whatsapp, alarga su mano hasta la tapa del váter, dónde siempre deja su teléfono cuando se ducha y lo agarra. Es Alessandro, su mejor amigo y como todas las mañanas, ya por rutina, le pregunta si pasa por su casa a recogerla, esta le responde que sí y finalmente abre el agua.
***
Coge su camiseta favorita del armario que lleva unas letras en italiano que le recuerdan a su tierra natal y la introduce en su cuerpo pasándola por sus brazos. Alessandro sale al pasillo de la planta de arriba de su casa y se da cuenta de que Aarón se quedó a dormir allí después de discutir con sus padres.
-Buenos días, ¿piensas ir a clase hoy?-Pregunta Aless entrando en la habitación, casi suponiendo la respuesta. Aarón reacciona con un leve gruñido y se mueve entre las sábanas.
-¿Para qué tío? Si total…-Aarón bosteza en la cama mientras se cambia de posición, girándose para darle la espalda a su amigo.
-Haz lo que te dé la gana y así acabarás.-Aarón lo ignora y entrecierra sus ojos debido a la molestia que le produce la claridad que ya se cuela por las rendijas de la persiana.
-¿Qué vas a por tú amiguita la creída?
-Mira tío, haz lo que quieras con tu vida, pero a mis amigos los dejas en paz.-Alessandro no evita sonar malhumorado.
-Vale, vale. Tranquilo.
***
Noemí acaba de desayunar y va a maquillarse y peinarse, comprueba la hora del reloj antes de nada por si se tiene que dar prisa pero aún tiene tiempo, algo bueno tenía que tener madrugar. Al quedarse frente al espejo del baño mira su pantalón, tiene una mancha, como odia a ese tío. Tuvo que salpicar con su estúpida moto de “chico malo”. No soporta a la gente que se cree mucho para lo que es y menos a ese que tanto le amarga los días.
Después de prepararse tranquilamente, mete los libros de las asignaturas correspondientes al día de hoy en la mochila para salir en cuanto timbre Aless… cómo le quiere, siempre ha estado ahí en los momentos difíciles, nunca olvidará el día en que entró en clase, presentándose como un niño italiano llamado Alessandro.
***
Alessandro sale apresurado con la mochila en uno de sus hombros, Aarón se levanta con un repentino impulso cuando escucha un golpe en la puerta de la entrada y se asoma por la ventana, cuando ve a Aless, éste ya está lo suficientemente lejos, cierra la ventana y se gira con una sonrisa medio formada en su cara, Aless se ha olvidado el trabajo de Historia en el escritorio de la habitación en la que durmió hoy, dónde lo estuvo terminando mientras él le contaba a regañadientes lo que había ocurrido con sus padres, aún odiando hablar de su vida privada, todo salió tal y como lo había planeado.
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Lo imposible es nuestro
Teen Fiction-Te quiero.-Susurró en su oído creyendo que dormía, haciéndole un efecto tan deseado por su ser como sólo él podría causar con esas dos palabras. Todo lo que les rodea se basa en discusiones, inseguridades, en el miedo a no encajar en la sociedad y...