Lo imposible es nuestro

Capítulo 34

Sigue en estado de shock, caminan junto a él hacia el Hotel. No se puede quitar de la cabeza que casi se hayan besado… sin poder evitarlo, lo mira de reojo, camina cabizbajo, quizá esté pensando en el beso, quizá piense que ha sido un error, pero para ella eso significó muchas cosas, pero no un error, para nada. Por algún acto reflejo él la mira y ella le sonríe, le sonríe con una expresión tranquilizadora, incluso de felicidad, él al verla así se alegra un poco, piensa que quizá no haya estado tan mal lo que hizo.

-Gracias.- Dice Noemí sin dejar de sonreír.

-Gracias, ¿por qué?

-Por ser tú mismo conmigo esta noche.

-No me des las gracias… necesitaba ser yo mismo con alguien a quien…

-¿A quién…? -Pregunta Noemí deteniéndose y mirándolo fijamente a los ojos. A sus profundos ojos con esa mirada que puede llegar a ser tremendamente sexy.

Aarón no responde, no puede responder, si ahora mismo dijera todo lo que siente, en menos de un minuto Noemí sabría que él está enamorado hasta las trancas de ella, que es la persona a la que más quiere, con la que quiere compartir cada “te amo” y cada “te odio”, con la que quiere sentir, con la que quiere pasear por las noches de la mano, con la que quiere dormir y a la que quiere despertar con sus dulces besos... Nota cómo se le humedecen los ojos, últimamente está muy sensible, no debe llorar, ni siquiera debe dejar que se le escape ni una sola lágrima. Debe ser fuerte. Ella está con un gran chico y ese chico es su mejor amigo.

Ve como se le iluminan los ojos, poco a poco se le empañan, tiene los labios muy apretados y ahí es cuando se da cuenta de lo mucho que lo quiere y de lo rápido que saltaría a sus brazos si no fuera porque está con Aless. Ahora mismo se lanzaría a él, lo besaría, le demostraría lo mucho que lo ama pero sin ir más allá del presente, si pudiera, paralizaría ese momento, en el que con solo sus miradas se puede notar la química que fluye entre ellos dos. Y quizá, por fin, sea hora de poner punto y final a algo que no va a llegar a nada

Noemí da un paso y abraza a Aarón, los dos tienen el corazón acelerado, como si de un concurso de “¿quién tiene el corazón más acelerado?” se tratara, la presión y las pulsaciones aumentan y se mezclan las unas con las otras en esa muestra de cariño y con la mirada puesta el uno en el otro se dicen todo lo que callan. Se separan despacio, un poco sofocados y sin decir nada, siguen caminando, caminando muy cerca y no lo suficiente cerca que ellos quisieran.

Entran en el hotel, hay poca gente por el hall y por los pasillos, en un reloj de madera colgado de una pared donde hay un plano del hotel en diferentes idiomas pueden ver que es más de la una y media de la noche y que la mayoría de sus compañeros ya se irían a dormir debido al cansancio generado por el viaje. Entonces Noe se fija que en un sillón hay alguien tremendamente conocido. Aless. En el momento en el que ella se queda mirando su novio levanta la cabeza y la ve. Aarón también lo avista y sin saber por qué se teme que esa noche no va a acabar bien para alguno de ellos.

Alessandro lleva esperando bastante tiempo desde que Ainhoa se fue con el italiano al que parece gustarle cuando este le preguntó si quería dar una pequeña vuelta por el hotel. Mientras, él ahí siguió, hasta que ahora los ve llegar tan tranquilos.

-Hola.-Dice Aless serio.

-Hola.-Responden al unísono Noemí y Aarón.

-¿Cómo llegáis tan tarde?

-Salimos del comedor porque Aarón estaba incómodo y fuimos a dar una vuelta y entre andar y andar nos perdimos y no sabíamos como volver, pero como ves encontramos el hotel.

-Ya.-Responde Aless a Noemí.

-No tenías que preocuparte.-Interviene Aarón.

-No estoy hablando contigo y me preocupo si quiero.-La voz de Alessandro suena violenta, este evita mirar hacia su amigo en ese momento porque podría estallar en cólera al hacerlo y por ello no aparta su vista de Noemí.

-Vale vale, tranquilo.-Dice el chico de ojos verdes haciendo un gesto hacia abajo con las manos.

-Estoy muy tranquilo, ahora vete y déjame a solas con mi novia.

-¿Por qué?

-¿Tengo que darte alguna explicación yo a ti Aarón? Lo que haga o deje de hacer con Noemí es asunto mío.

-Y dime Aless, ¿qué quieres?-Interviene esta vez la chica.

-No preguntes, quédate y punto.-Ordena el chico de ojos azules.

-No le hables así.-Amenaza Aarón.

-No te metas en mi relación.-Dice Aless acercándose esta vez al chico lleno de ira.

         Noe lo agarra por detrás tirando de él y le hace un gesto a Aarón para que se vaya, este asiente no muy convencido y se aleja girándose un par de veces en el camino hacia el ascensor. Noemí le observa hasta que las puertas se cierran y se queda completamente a solas con Alessandro, lo mira seriamente y espera a que él diga algo.

-No me gustó que te fueras sin decir nada y encima que ahora llegues tan tarde.-Dice Aless cambiando su forma de actuar y poniendo morritos.

-Ahora actúa como un inmaduro.-Resopla Noemí.-Les pedí que te avisaran, Aarón necesitaba salir y consideré mejor no dejarlo solo y ya te explicamos por qué hemos tardado tanto. Ahora dime, ¿qué es eso de ordenarme lo que debo hacer?

-¿Eh?-Pregunta Aless confuso.

-Lo que acabas de hacer Aless. A mi no me trates con órdenes ni me hables así, nunca lo hiciste hasta ahora y por el simple hecho de ser pareja no lo vas a empezar a hacer, no te lo permitiré.

-Estaba enfadado y totalmente en mi derecho.

-No Aless.-Dice Noe girándose.

-Sí.-La agarra por el brazo poniéndola de nuevo frente a él.- ¿No me das un beso?

-No, quita.- Noemí hace ademán de alejarse pero Aless lo evita apretándola fuerte atrayéndola hacia él pero la chica molesta por este gesto irreconocible en Aless lo empuja y se aleja a paso rápido.

-¡Espera Noe! Lo siento... no quería ser tan brusco.-Se disculpa rápidamente Aless.

-Déjame un rato.-La oye decir no muy alto.

         Contempla como se aleja a paso rápido y se queda quieto. Sí, se ha pasado un poco pero no ha sido para irse de esa forma. No sabe por qué le resulta tan molesto que Noe y Aarón pasen tiempo a solas, es cierto que ella es su chica ahora pero nunca ha tenido por qué preocuparse de su relación con Aarón,  ellos se odian, ¿no es así? Mañana le pedirá perdón de nuevo, espera que ella esté menos disgustada y vuelva la normalidad a su relación. En cuanto a Aarón no va a disculparse, no le dijo nada fuera de lugar. Espera no volver a pasar el miedo que pasó esa noche, porque fue un miedo sin argumentos o al menos eso cree.

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