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Me desperté sobresaltada media hora después cuando mi madre me llamó con voz alterada diciéndome que me apure.
Me levanté con pereza y me dirigí al auto para que me llevara hasta la casa de mi padre.
Sé que a mamá le dolía llevarme cada vez y ver a papá con su actual pareja y más aún cuando sabe que están pensando en tener un hijo.
Opino que no está mal que papá haga su vida con otra persona, pero su pareja (que voy a recalcar que se llama Karla) quiere siempre hacer sentir mal a mamá y a mí. Y lo peor es que papá lo sabe perfectamente pero no hace nada al respecto.
Estábamos a punto de llegar allí sin cruzar palabra.
El auto estacionó justo en frente de la casa. Esta era de dos pisos pero no tenía nada del otro mundo. Afuera estaba papá ya esperándome así que bajé del vehículo y fui a saludarlo. Me despedí de mamá  saludándola con  la  mano que en ese entonces seguía en el auto y se fue directo a su trabajo. Él me invitó a pasar y me dijo que se iba a quedar un rato más afuera hablando con un vecino resolviendo unos problemas. Dentro estaba Karla sentada en la mesa tejiendo algo.
-Hola Mikaela- Me saludó de una forma en la que quería sentirse superior. Solo atiné a sonreír falsamente para luego subir las escaleras.
A mitad de camino me siguió hablando:
-¿Acaso no vas a preguntarme qué estoy haciendo Mika?- La miré y esperé un momento. Desde ya antes de ir a la casa supuse que iba a decirme algo tocando el tema de su hijo que esperaba tener; o más bien que esperaba hacer porque ni siquiera estaba embarazada. De igual manera le pregunté para satisfacer un poco su mente hueca.
-Oh, ¡no había visto que estabas tejiendo!¿Qué tejes?- Le dije fingiendo un poco de emoción.
-Estoy tejiendo algo para mi bebé. ¿Te gusta?- Me preguntó mostrándome el tejido.
-Está bien. Pero creo que no pensaste en que el bebé puede ser niña o puede ser niño. Además te quedan veinte meses para ser madre Karla- Le dije manteniendo la misma postura de emoción falsa. Si lo hacía, ella probablemente se enfadaría. Su cara se tornó graciosa y burlona.
-Mikaela no me hagas reír por favor- se rió y luego siguió diciendo: -¿O acaso no sabes que un embarazo dura nueve meses?- Yo contesté:
-Karla...mi padre es detective y uno de mis pasatiempos es ayudarlo a investigar. ¿En serio crees que no se una cosa tan básica?- lo dije de manera calmada. Suspiré y luego seguí diciendo:
-Yo en ningún momento dije que tu embarazo iba a durar veinte meses, dije que ibas a tardar veinte meses en ser madre. Porque cinco meses de esos veinte va a ser pidiéndole a papá para tener un hijo, yo lo conozco y no se te va a hacer muy fácil. Los otros tres van a ser intentando ser buena persona. Los otros tres vas a aprender cómo ser madre porque no tienes ni la menor idea. Quizá mamá puede darte unas clases - Le dije en forma pensativa. Luego reí un rato y comencé a subir las escaleras, y desde arriba me giro y veo su cara de enojo fatal. Le sonrío y sigo lo que me faltaba:
-Y finalmente los nueve restantes serán de embarazo- Continué subiendo las escaleras y fui hasta mi habitación que probablemente en un tiempo con el nacimiento de mi hermanastro ya no vaya a ser mi habitación.

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