Creo que te Amo...

14. Preso

Día 6.

Tenía hambre. Parecía que habían pasado meses desde que estaba allí, y eso que iba a hacer una semana. Bueno, eso creía. Como allí todo estaba oscuro era imposible saber qué hora era.

Desde que me llevaron no había probado otra cosa que pan seco y agua.

Me acomodé como pude en la pared de esa extraña celda donde a duras penas se podía dormir y me acurruqué en la esquina. Hacía frío.

Oí los pasos de alguien a lo lejos. Se estaba acercando otra vez. Era él.

- Buenos días, ¿has dormido bien? - preguntó La Voz Más Allá De La Oscuridad - Lo siento, pero me temo que vas a seguir con la terapia de recuperación de memoria hasta que me digas dónde está. ¿Estás de acuerdo?

¡¿Cómo iba a estarlo?! Lo único que había hecho desde que estaba allí era preguntarme sobre él. ¿Qué era lo que querían hacerle a Yuu?

- Ya les he dicho todo lo que sé - confesé - Por favor, déjenme. No he hecho nada malo.

- Muy mal, muy mal. ¿Así es como me tratas? ¿Mintiéndome a la cara? No, no... Esto es imperdonable. Vas a necesitar que te castigue otra vez - decía echándose la mano a la cara y alejándose de mí -.

- ¡NO! ¡OTRA VEZ LAS PINZAS NO! - grité con todas mis ganas, con la esperanza de que alguien me salvara -.

- Pues me lo tienes que decir todo. A ver, ¿dónde nos quedamos? - se puso a contar con las manos - ¡Ah, sí! Vosotros acabábais de romper porque él no quiso decirte que sí. ¡Qué triste, ¿no es cierto?! - se rió como un enfermo - Bueno... Entonces aún no me lo has contado todo, ¿no?

- Sí... E-Es todo.

- ¡¡¡MIENTES!!! - chilló y le dio una patada a las rejas - ¡SI SIGUES MINTIÉNDO, NO VOY A TENER MÁS REMEDIO QUE CASTIGARTE! ¡¿QUIERES QUE TE CASTIGUE, ES ESO?!

- ¡N-No! - respondí asustado, cerrando los ojos -.

- NO, ¿QUÉ?

- N-No, señor...

- Así me gusta. Ahora prepárate que hoy te toca paseo. Tienes cinco minutos - diji mientras se iba -.

- ¡AAARGH! De verdad, ¡que alguien me saque de aquí! - pensé - No solo no sé dónde estoy ni que hago en este lugar, sino que el hombre que me tiene secuestrado da miedo. Mucho miedo.

- Yuu-chan... - susurré cerrando los ojos - Si en algún momento encuentran mi cadáver, quiero que sepas que te amo muchísimo. Aunque tú no sientas lo mismo, para mí estará bien... Haber sido capaz de estar a tu lado todo este tiempo... Es... El mejor regalo... - se me deslizó una lágrima por la mejilla - ¡Genial, lo que faltaba! - dije limpiándomela - Llevo tanto tiempo aquí que me he vuelto loco. Ya empiezo a hablar solo.

- No, no, por favor. Continúa. Estabas siendo realmente emotivo - sonó otra voz desde detrás de las sombras -.

- ¡¿Quién eres?! - pregunté alterado -.

- ¿Yo? Nadie. Solo soy tu padre.

- ¡¿Qué dices?! ¡¿Por quién me habéis tomado?!

- ¿Habéis? ¡Ah! Supongo que te refieres a Gregor. Tú solo síguele el rollo, te dejará en paz.

- Aaah. Entonces, ¿tú no eres un pirado como él? ¿Tú eres distinto? Porque tener a un adolescente secuestrado y torturado no es lo que se dice normal.

- ¿Torturado? - preguntó con tono de asombro - ¿Es por lo de las pinzas? Si es por eso, siento decepcionarte pero no se considera tortura.

- ¡ME ELECTRIFICÁSTEIS LOS PEZONES!

- ¡Y lo volveríamos a hacer! - dijo en tono burlón, soltando una carcajada - Pero solo si no hablas.

- ¡No tengo nada más que decir! ¿Cuántas veces tengo que repetirlo?

- Ya veo... - suspira - Mika, ¿cuándo dejarás de mentirnos a la cara?

- Me rindo. ¡No puedo seguir con esto! N-Ni siquiera sé por qué estoy aquí con este par de pirados que mienten más que hablan. Me torturáis y me mantenéis lo suficientemente cuerdo como para seguir torturándome. ¿Esto os divierte?

- Para empezar, Mika... No, no es divertido, créeme. Y te hemos mentido bastante desde que llegaste, no lo niego. Sin embargo, hay algo de cierto en lo que te he dicho: sí que soy tu padre.

- ¡Ja! Mi padre se llama Ferid y mi madre Krul. Y que sepas que no les llegas ni a la suela.

- Es cierto. Ellos son tus padres, pero solo los adoptivos. ¿O de verdad creías que Yuu y tú os conocíais únicamente de ahora? No, no... Lleváis desde el orfanato juntos. Mi orfanato, para ser precisos.

- Su... Orfanato... ¡Usted es Saitou...! ¡¡¡El director del orfanato Hyakuya!!!

- ¡Ding, ding, ding! Respuesta correcta - rió estrepitosamente - Ahora bien, los relatos que le dijiste a Gregor, son algo... Peculiares...

- ¿Por?

- Por nada, por nada... Solo me había llamado la atención el simple hecho de que pareces un enfermo cuando hablas de Yuu.

- ¿Enfermo?

- Sí, sí... Me parece que estás obsesionado con él. Y no solo eso, él parece estarlo también de ti.

- Ojalá fuera así - dije rindiéndome y dejándome caer en el frío suelo -.

- ¿Crees que miento? - preguntó - Si realmente fuera así, te habría secuestrado para nada - suspiró, desviando la mirada - Verás... - dijo - Todo esto es para que Yuuichiro venga. Sus padres llevan meses sin pagarme e incluso planearon denunciarme, ¡y lo hicieron! ¡Ja! - rió de forma siniestra - así que decidí actuar.

- Pagarte... ¿Qué, exactamente?

- Ufff - suspiró desganado - Prepárate para lo que voy a contarte.

- Llevo días secuestrado, siendo torturado y casi sin comer. Créeme, estoy listo.

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Holaaaaaa!!! (qué de tiempo f*ck)

YA LO HE SUBIDO... ALELUYA!!!!!!

Ejem, ejem, cof, cof... Vale, me centro, me centro.

Después de BASTANTE TIEMPO, he subido cap. y.. la cosa ha vuelto movidita, ¿eh?

- ¿Qué será lo que va a desvelarle Saitou a Mika?

- ¿Qué estará pasando con Yuu, tras 6 días sin saber nada de Mika?

Todo esto y mucho más en... "Creo que Te Amo"