VIII

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La mañana pasó rápidamente, después de haber besado a Chanyeol había hecho todo lo posible por no cruzarse con él y había evitado a SungMin durante toda la mañana, hasta ahora. Por obvias razones no había podido evitar salir a despedirlo, estaba obligado a ello.

Agachó la cabeza y esbozó una pequeña sonrisa, SungMin estaba atravesando la puerta de la entrada y no podía evitar consumirse por la felicidad. Unió los labios una vez más, cambiando completamente de expresión y levantó la cabeza. Suspiró cuando el lobo le lanzó un beso y le guiñó el ojo, cuantas ganas tenía de romperle esa maldita sonrisa.

-Tranquilo lobo.

Se dio la vuelta con la ceja alzada e hizo una mueca, no tenía ni la más mínima idea de quien era el joven que tenía delante, era más o menos de su estatura y tenía los ojos más curiosos que había visto en su vida, sintió un escalofrío, removió la cabeza y frunció el ceño, eso había sido jodidamente extraño.

Sintió un estirón en la camisa y se dio la vuelta

-Baekhyun vamos dentro.

Parpadeó confundido y se giró hacia la entrada, el coche de SungMin ya no estaba, se había marchado, sonrió leve y se dio la vuelta siguiendo a LuHye.

La loba era demasiado activa para su gusto, ahora entendía lo que debían sentir sus amigos con él, era como verse representado, sólo que eso había sido antes, mucho antes de que la vida hubiese decidido desquitarse y amargarle la existencia.

Miró las escaleras y suspiró, ¿Debería subir a cerciorarse de que todo estuviese bien con DaeHyun?.

Asintió y empezó a subir escalón tras escalón, entró intentando no hacer ruido y se acercó a la cama, DaeHyun estaba adorable metido entre las sabanas con la boquita medio abierta y uno de los brazos estirados sobre una de las almohadas.

Lo dejaría dormir un poco más, salió igual de silencioso y pegó un brinco al ver que había alguien tras la puerta.

El chico se rió y lo miró de arriba a bajo, se estremeció y bufo, ¿Quién demonios era?.

-Jongin me ha hablado mucho de ti.

¿Jongin?,¿Por qué iba a hablar sobre él el segundo al mando?, hizo una pequeña mueca y terminó de ajustar la puerta, no le inspiraba confianza.

-En un principio me puse celoso.-sonrió el chico.-Pero después me dijo que estabas emparejado, mi nombre es Kyungsoo.

Parpadeó y lo miró desconfiado, ¿era la pareja de Jongin?, ¿este era el significado de Jongin de adorable?, a él sólo le ponía los pelos de punta.

-Mi nombre es Baekhyun.-murmuró.-Trabajo para el alfa Park, estaré a su servicio.

Sintió un escalofrío atravesarlo y se estremeció, sus ojos eran diferentes, tenían un brillo extraño, era como si supiese todo lo que rondaba por su cabeza. Se sentía como un experimento, totalmente observado y escrutado.

-Tengo que marcharme.-susurró intranquilo.-Debería ir a preparar la comida, a sido un placer conocerle señor Kim.

-Lo de señor no hace falta.-sonrió.- Ambos somos omegas y no creo ser mayor que tu.

Asintió no muy convencido y salió en dirección a las escaleras. Llegó unos minutos más tarde a la cocina, LuHye estaba removiendo algo en la sartén.

-¿Dónde estabas?.

-Estaba revisando a DaeHyun.

-Tienes la cara un poco palida.-susurró ella.-¿El niño está bien?.

Asintió y se puso a un costado de la loba, se encargaría de hacer su parte del trabajo en la cocina y después desaparecería durante un par de horas en el bosque.

Terminó de cortar las verduras cuando sintió un olor desconocido acercarse, cesó en su tarea y se quedó mirando fijamente la puerta.

La puerta la atravesó el mismo chico de antes, hizo una pequeña mueca y siguió con su tarea.

-¿Necesitan ayuda?.

Negó en silencio y siguió picando el resto de los ingredientes.

-Puedo ayudar con cualquier cosa, sólo díganme.

Suspiró y lo miró por el rabillo del ojo, tal vez no era tan siniestro como pensaba y sólo había sido la impresión inicial. Aunque ahora que lo pensaba era obvio que después de la pérdida de su cachorro el hombre estuviese decaído y su expresión no fuese la mejor, tal vez lo estaba prejuzgando o simplemente se había olvidado de como socializar sin tener una idea previa de alguien, sin sentir ese desagradable encogimiento del estómago, a la espera de cualquier movimiento traicionero.

Se paró en seco y su lo lobo se movió intranquilo, escuchó un llanto y salió corriendo de la cocina, llegó unos minutos después. DaeHyun se había despertado y estaba armando su propio espectáculo entre el llanto y agonía.

Soltó un poco de aire y se acostó frente a él, lo llamó suavemente y le acarició el pelo.

Sonrió cuando el pequeño se tranquilizó y lo abrazó, él le devolvió la mirada y sonrió. Era tan lindo, tan inteligente y no sólo lo pensaba porque fuese su padre, para él todos los bebés eran inteligentes, conseguían que las personas hiciesen hasta lo imposible por ellos.

Le acarició la cabecita y se levantó con él en brazos, no le gustaba la idea de mantenerlo en la cocina, pero debía seguir trabajando.

Bajó con cuidado susurrandole palabras incomprensibles a DaeHyun, entró en la cocina y lo sujeto con un brazo mientras seguía con su tarea.

-¿Necesitas ayuda?, puedo cogerlo por ti, se como se hace, aunque sólo si tu quieres.

Se dio la vuelta y lo miró dubitativo, hizo una mueca y se lo pensó durante unos segundos, era la pareja de Jongin por lo que no podría ser peligroso o al menos no lo parecía.

Asintió sin estar del todo convencido, pero las dudas se disiparon nada más entregárselo. La cara se le había iluminado y miraba a DaeHyun con una ternura envidiable, era injusto que no hubiese podido tener su cachorro, tenía que haber sido una experiencia horrible.

-Jongin me dijo que era lindo, pero nunca esperé que fuera tan lindo, Jongin tiende a babear ante cualquier cachorro que le presta un poco de atención, se le dan muy bien los niños.

Asintió y sonrió enternecido, ahora no le daba tanto reparo como antes, Kyungsoo simplemente estaba decaído y era normal.

-Huele muy bien.

-Gracias. -Respondieron ambos a la vez.

La mano le tembló y sintió un cosquilleo en la espalda, suspiró y miró hacia la puerta, Chanyeol entró unos segundos después, enfundado en un traje negro que se ceñía a su figura marcada y resaltaba sus rasgos.

-Alfa Park.-recitaron al unísono.

El lobo asintió y pasó a sentarse frente a Kyungsoo.

-Esta noche tenemos invitados, LuHye avisa a los demás.

-Sí alfa.

-Todo tiene que ser perfecto.

El  alfa agachó la mirada y levantó una ceja al ver a DaeHyun en brazos de Kyungsoo.
-Parece ser que el cachorro es irresistible.-Susurró.

-Lo es.-respondió Kyungsoo.

El lobo asintió pensativo y levantó la cabeza, mirándolo fijamente.

-Baekhyun necesito que vayas a mi despacho, SungMin y yo hablamos de un par de cosas.

Se estremeció y asintió, ¿Qué demonios le habría contado SungMin?.

Break free (Chanbaek)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora