XXIII

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Cerró los ojos con fuerza, el puño de Chanyeol había impactado contra la cara de SungMin.

Arrullo a DaeHyun entre sus brazos y caminó lentamente, el pequeño había caído rendido nada más dejar de llorar.

Se dió la vuelta cuando el brazo de Chanyeol volvió a alzarse, nunca le había gustado la violencia y mucho menos presenciarla, pero no tenía más opción, no podían separarse, tendiendo en cuenta lo rastrero que era SungMin no podían fiarse, era más seguro permanecer unidos.

-Habla.

Chanyeol llevaba repitiendo la misma palabra una hora entera y SungMin aún no daba su brazo a torcer.

Se dió la vuelta y lo miró, SungMin le mantuvo la mirada y escupió sangre.

-¿Te está divirtiendo Baekhyun?, ¿Para esto le calentaste la cama?, ¿Era ésto lo que querías?.

Arrugó el ceño y apretó a DaeHyun contra su pecho, bufó y se dió la vuelta.

-¿Quién te dijo cómo entrar?.

SungMin levantó la cabeza y sonrió, escupió una vez más y negó, llevando su atención directamente hacía Baekhyun.

-Puta malagradecida.- Tosió.

Baekhyun se dió la vuelta y boqueo, ¿debía estar agradecido?, ¿agradecido de qué?, ¿de que lo hubiese forzado en mitad de la calle?, ¿debía estar agradecido de las palizas que había recibido sin razón?, ¿debía estar agradecido de lo que le había hecho a su lobo?, por favor, ¿no podía ser aún más cínico?.

-Vete a la mierda.

-¿Ahora respondes?.-rió.-¿Vas a dejar que maten al padre de tu hijo?.

Gruñó y enseñó los caninos, ¿padre?, él no sería jamás el padre de DaeHyun, el pequeño ya tenía un padre y se llamaba Byun Baekhyun.

-Tu no eres su padre.-Gruñó.

SungMin no era capaz ni de cuidar una piedra, mucho menos llegaría a ser llamado padre, no merecía serlo.

-Kwang no tengo todo el día, responde.

La piel se le erizó y dió un paso atrás, Chanyeol estaba demasiado tenso, se encontraba en el borde, el lobo en su interior quería salir y el hombre no estaba haciendo gran cosa por detenerlo.

-Yo tampoco alfa Park.

-Me estoy empezando a hartar de esto Kwang.

El brazo de Chanyeol volvió a alzarse, cerró los ojos y esperó el golpe, abrió un ojo al no escuchar el impacto y parpadeó confundido al ver al padre de Chanyeol detenerlo.

-Basta.

Chanyeol bufó y se llevó las manos a la cabeza.

-Papa...

-El viejo te controla Park.- sonrió SungMin.

El padre de Chanyeol se erizó, cogió a SungMin del pelo y lo tiró hacia atrás, levantando las patas delanteras de la silla en la que lo habían atado.

-No seas imprudente muchacho, no te olvides con quién estás hablando.

-No te tengo miedo Park ChangMin, dejaste que tú hijo tomase el poder, un lobo de verdad no deja su manada en manos de otro a no ser que no sea capaz de cumplir, no eres nadie viejo.

Chanyeol gruñó y dió un paso adelante, ChangMin empujó la mano contra su pecho y negó.

-Recuerda Chanyeol, por la boca muere el pez.

Chanyeol bufó, pero aún así retrocedió.

-Muchacho creo que no estás enterado de un par de cosas.- Sonrió ChangMin, se dió la vuelta y miró a Baekhyun.-Chanyeol acompaña a tu pareja afuera, llamen a Jongin y coman algo.

Chanyeol bufó y negó.

-Chanyeol no me hagas repetirlo.

Chanyeol bufó pero caminó hasta Baekhyun, le tendió la mano y cerró la puerta tras su espalda.

Baekhyun miró la puerta cerrada y desvío la mirada hasta la espalda de Chanyeol.

-¿No deberíamos quedarnos dentro por si pasa algo?.-Murmuró.

Chanyeol negó y se dió la vuelta.

-Creo que el único que puede llegar a necesitar ayuda es SungMin, habla demasiado, mi padre es un hombre de pocas palabras, le gustan las respuestas concisas.-Se encogió de hombros y sonrió leve.-Vamos.

Llegaron a la cocina unos minutos después, todo estaba hecho un desastre, sartenes en el suelo, cristales por todas partes y las puertas de los armarios colgaban de las bisagras.

Chanyeol lo paró antes de entrar y señalo el suelo.

-No llevas zapatos y no quiero que te cortes.

Se miró los pies y parpadeó, no se había dado cuenta, después de que Chanyeol había atrapado a SungMin habían cogido algo de ropa, pero no había pensado en los zapatos.

Chanyeol caminó y se detuvo enfrente de la nevera, apoyó la mano en el mango y la puerta cayó a sus pies, bufó y la dejó a un costado.

-Debería hacerles pagar por los destrozos, esa nevera me costó un dineral.

Baekhyun negó y sonrió leve, estaba seguro de que Chanyeol estaba nervioso por dejar a su padre sólo, pero intentaba aligerar el ambiente.

-Está apunto de amanecer.

Asintió y cambió a DaeHyun de brazo.

-Es casi la hora ¿no?.

Parpadeó confuso y lo miró fijamente.

-¿La hora de qué?.

-La hora de darle de comer a DaeHyun, me di cuenta un par de días después de que llegasteis, bajabas muy temprano, entrabas a la cocina y salías como un rayo, no supe lo que hacías hasta que vi la leche fuera del armario.

Asintió lentamente y miró el bulto entre sus brazos.

-Debo calentar el agua ¿no?.

Asintió un poco inseguro y lo observó atentamente mientras preparaba el agua, sacó un tarro de leche y vertió un par de cucharadas en el agua, frunció el ceño y observó el tarro, estaba seguro de que el último que había comprado lo había dejado en el cuarto.

Chanyeol pareció comprenderlo y sonrió tranquilo.

-Lo compré yo, tuve que hacer varias preguntas, pero creo tiene todo lo necesario.

Terminó de hacer el biberón y caminó hacia él, se lo dio y caminó en dirección al salón, entró y cogió el teléfono, le hizo un par de señas y marcó los números.

-Jongin, sí, necesito que vengas lo más pronto posible y trae lobos de confianza.

Colgó antes de recibir respuesta y sonrió al ver a Baekhyun intentando despertar al pequeño.

Levantó la cabeza cuando escuchó una puerta cerrarse, caminó hasta quedar enfrente de Baekhyun y respiró tranquilo cuando su padre atravesó el umbral.

-¿Y bien?.

-¿Te suena el nombre de Rui Minah?.

Break free (Chanbaek)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora